Jornada internacional en homenaje a León Trotsky,
a 83 años de su asesinato a manos del stalinismo

Intervención de Abu Muad del Comité Redactor del periódico
“La Verdad de los Oprimidos” de los socialistas de Siria y Medio Oriente

Buenas tardes camaradas. Voy a ir retomando algunos conceptos dichos anteriormente y con ello adentrarme a una corta intervención, para posteriormente darles la palabra a los compañeros que se encuentran en Siria y que van a intervenir desde el terreno mismo de combate, azotados nuevamente por el fuego de Bashar Al Assad.

Se dijo que el Partido Comunista estalinista fue cómplice del ascenso de Hitler al poder. En 1933 asciende Hitler al poder y 7 años más tarde es ese mismo Partido Comunista que fue responsable por el triunfo de Hitler en Alemania, orquestó el asesinato de nuestro camarada León Trotsky. Por lo que ya sabemos cómo se perfila el estalinismo en la historia.

Unos cincuenta años después cae el Muro de Berlín y el estalinismo termina de entregarle en bandeja los Estados Obreros al imperialismo. Luego de unos 10 años de la caía del Muro de Berlín vimos a un Bush arremetiendo contra la clase obrera del Magreb y Medio Oriente, invadiendo con las tropas del imperialismo primero Afganistán y después Irak; poniéndole una ametralladora en la cabeza, no solamente a la clase obrera del Magreb y Medio Oriento, sino al movimiento obrero mundial.

Mientras todo esto transcurría, luego de haber perdido al camarada Trotsky, los trotskistas estábamos en la resistencia. Luego de que cae la URSS, el trotskismo estalla en mil pedazos, intentando explicar el por qué.

Bush somete a la región y saquea el petróleo de esta zona; y no terminaron de pasar otros 10 años, en pleno siglo XXI., con el trotskismo todavía en la resistencia; el estalinismo siendo, una vez más, la punta de lanza que le abrió las puertas de Irak al imperialismo con el Partido Peshmerga aliado del Partido Comunista Kurdo.

Diez años más tarde de esa invasión, una enorme cadena de revoluciones proveniente del Magreb y Medio Oriente azota el planeta, comenzando en Túnez, pasa por Egipto, Libia... Y uno decía "Es ahora, es el momento". Las masas en las calles, tomándose las ciudades, partiendo los ejércitos e incluso armándose.

Esas sublevaciones hicieron que dictadores que llevaban 30, 40 y hasta 50 años en el poder cayeran. Y nos preguntamos ¿qué hará la izquierda ahora? Como siempre el estalinismo fue el primero en darse vuelta en Siria, que fue uno de los lugares donde las masas llegaron más lejos. Allí fue donde tenían servido al gendarme del imperialismo en la región, el Estado Sionista de Israel. Fue donde pusieron en jaque el dominio del imperialismo en la región.

En Siria las masas se atalonan, llegaron hasta unas cuadras de la casa de gobierno de Bashar Al Assad, habiendo puesto en pie Comités de Coordinación, con miles y millones en las calles. Y uno le decía a la izquierda, "Es ahora"...

El primero en darle un zarpazo a esa revolución fue el Partido Comunista Kurdo que hizo un pacto con Bashar Al Assad. Es que inmediatamente el estalinismo salió en apoyo de Al Assad. Bashar luego es asistido por el imperialismo, y las tropas gurkas de la región, como Hezbollah, Irán, etc. Todos fueron apañados por esa izquierda estalinista, que le dio "luz verde" y alentó a Bashar Al Assad, y planteó que la insurrección de masas no era obrera sino que era alentada por el imperialismo.

Y uno decía que era el momento de que apareciera el trotskismo, el momento de que todos los que estuvieron en la resistencia se les vaya la vida, den su sangre y la militancia de todos estos años por estar a la cabeza de esas revoluciones obreras que sacudieron el planeta, e incluso tendían a empalmar con los levantamientos que se desarrollaban en Europa.

Y una vez más los renegados del trotskismo con las falsas banderas de la IV Internacional lo único que hacen es ponerse a los pies de esa burguesía opositora, esperando el milagro. Apoyando a quienes vendían la revolución desde adentro, en Siria, en Libia. O calumniándola, diciendo que eran "tropas terrestres de la OTAN", o que lo peor que le podía pasar a una insurrección de masas era armarse.

El imperialismo reinventó a Al Qaeda y con el nombre de Estado Islámico. Obviamente que toda la derecha y el imperialismo salieron a “condenar” a ese Estado Islámico que, una vez más, nacía en Siria como “el nuevo monstruo que horrorizaba a la humanidad”. Mientras el imperialismo lo condenaba, la izquierda estalinista iba atrás, como furgón de cola y muchos renegados del trotskismo decían que no habían aliados en las revoluciones de Magreb y Medio Oriente, sino que había un “enemigo en común” que era el Estado Islámico. A todo esto las masas seguían en las calles resistiendo.

Nos enteramos que había un partido "trotskista" en Turquía, al lado de la revolución siria. Hacía de todo, menos apoyar la revolución siria, y era hermano del Partido Obrero argentino que calumniaba la revolución siria. Años en la resistencia esperando el momento, y cuando llegó el momento lo único que hicieron fue traicionar e irse con el enemigo…

Y acá viene la matemática, porque ¿qué nos deja esto como lección?, De 7.000 millones de habitantes que tiene el planeta, solamente dos con toda una estructura atrás y cientos de camaradas apoyándolos, se hicieron presentes en el mismo terreno de combate en Siria para apoyar esa revolución. Pero no iban solos, llevaban un programa, que es el programa de Trotsky para la revolución. Esos dos camaradas, fueron, o intentaron encarnar, ese programa. Y fue ese programa el que captó y se ganó a los valientes integrantes de la Brigada León Sedov, que son los compañeros que están presentes en esta reunión desde el mismísimo frente de combate, y nos van a dar sus testimonios de lo que están sufriendo hoy. En unos de los terrenos más saqueados y azotados por el imperialismo, en unos de los terrenos más ricos, y también más calumniados por la izquierda mundial y por los renegados del trotskismo.

Entonces, el programa del trotskismo se ganó a quienes son hoy los dirigentes de la Brigada León Sedov, que tuvo y tiene el orgullo de haber sido la única brigada trotskista en haber peleado codo a codo junto a los compañeros en Libia y en Siria, apoyando a las masas.

Y con ese programa que busca un Partido Revolucionario Internacional, que es el que nos debemos y el que le debemos a las masas, que por su falta no se pudo tomar el poder en toda la región, y por el cual seguimos peleando, porque vemos que no faltó valentía de las masas, sino que sobró traición de las direcciones.

Aún hoy las masas siguen peleando. Estamos frente a un nuevo 2011 en Siria, con una sublevación general y mientras Rusia, Irán, el imperialismo yanqui, los imperialismos europeos y toda la izquierda calumnian, las masas siguen en las calles.

Pido un fuerte aplauso para los compañeros que se han rehusado a bajar las banderas de la revolución y siguen hoy en el combate.