Argentina - 14 de septiembre de 2018
INDUSTRIA DEL NEUMÁTICO
LA ASAMBLEA DEL 6/9 EN FATE: UN PASO A TRAS EN LA LUCHA POR LA DEMOCRACIA OBRERA
La Lista Negra no dejó hablar a compañeros de otras agrupaciones sindicales y acalla
a los disidentes utilizando el matonaje y las amenazas de sanciones disciplinarias
El 6/9 en la asamblea de Fate que votó el acuerdo paritario del 28% en cuotas, firmado entre las patronales del neumático y la dirección de nuestro gremio, ocurrió un repudiable hecho. Como ya afirmamos en la nota que acompaña a estas líneas, el secretario general Crespo (dirigente de la Lista Negra) impuso una “Asamblea corta” impidiendo así que las otras agrupaciones sindicales y los obreros de base den su punto de vista sobre el mal acuerdo que se estaba votando.
Pero no solo cortaron los micrófonos y la lista de oradores, sino que amenazaron con golpear a compañeros de la Lista Granate que, siendo miembros de la dirigencia del sindicato, fueron unos de los tantos que no pudieron hacer uso de la palabra. Y como si esto fuese poco, ante el revuelo generado, la Lista Negra desde la dirección del SUTNA emitió, días posteriores a estos sucesos, un comunicado amenazando con utilizar el tribunal de disciplina para silenciar a los disidentes. Un bochorno, porque justamente la ecuación, para todo aquel que se dice defensor de la democracia obrera, debe ser al revés: los que tienen que ser sacados de sus puestos de dirección son aquellos que callan y matonean a los compañeros que no opinan igual que los dirigentes.
Estos tipos de actos –como los ocurridos en la asamblea del 6/9 en Fate- que son comunes en la burocracia de la CGT y la CTA, no puede ser jamás el comportamiento de la Lista Negra. Y merecen un repudio de todos los trabajadores, dirigentes y base, comenzando por los compañeros de la Negra, puesto que recrean los perores métodos de la burocracia violeta del traidor Pedro Wasiejko, muy reñidos con los principios de fraternidad entre los compañeros y la democracia de la base obrera. No puede haber un solo justificativo para que compañeros, sea cual fuese su opinión, sean callados, matoneados o amenazados con sanciones por disentir en una asamblea con la dirección del gremio. Y mucho menos esto puede suceder entre agrupaciones sindicales que se reivindican “clasistas” y que comparten un mismo frente electoral como los es el FIT. Este manejo, como el que vivimos en la asamblea del 6/9, no hace otra cosa que dividir a los trabajadores… y todos sabemos quién gana cuando esto sucede: LA PATRONAL.
Sin conquistar la unidad y la democracia de los trabajadores, lo único que estamos haciendo es debilitar nuestra lucha. Y todos sabemos que no pusimos a la Lista Negra al frente de nuestro gremio para que nos dividan. Debemos terminar de una vez por todas con todo residuo de la vieja burocracia a la que echamos a patadas primero y le ganamos las elecciones después. Hay que romper con los viejos estatutos y cuerpos orgánicos, y conquistar la más amplia democracia obrera, votando medidas elementales como las siguientes:
1- Como plantean claramente las Tesis de Pulacayo –el programa de los obreros bolivianos en su revolución de 1952, basado en el programa del trotskismo- es necesario romper con el estado burgués planteando “Fuera las manos de los ministerios patronales de las organizaciones obreras; abajo las conciliaciones, los arbitrajes obligatorios y toda legislación que permita la injerencia patronal. Abajo el cobro compulsivo de las cuotas por parte de la patronal. Los dirigentes deben cobrar las cuotas en el lugar de trabajo, y los trabajadores la pagarán voluntariamente”.
2- El sindicato debe representar a todos los trabajadores, lo que significa que un sindicato de esas características se convierte en una organización de verdaderos comités de fábricas, donde están representados todos los sectores efectivos, contratados, precarizados, tercerizados. Esto implica la lucha práctica por un programa contra la desocupación, basado en la escala móvil de salarios y horas de trabajo.
3- Los compañeros no podrán estar por un período mayor a dos años como rentados del sindicato, luego de ese período vuelven a trabajar. Esta es una máxima elemental contra la burocratización.
4- Comisión negociadora de base, y los negociadores rotan en cada entrevista. Lo que implica la subordinación total de los dirigentes a la voluntad de la base y evita que la patronal pueda corromper al negociador al ser este rotativo.
5- Asambleas democráticas, es decir que no sólo tienen que ser garantizando la presencia de la mayoría de los trabajadores parando la producción, y garantizar la libre expresión de las posiciones. Debe también garantizar la defensa de cualquier compañero atacado por concurrir a las asambleas.
6- Cuentas públicas del sindicato y Comisión de Base Revisora de Cuentas, rotativa cada 30 días.
Para dar el primer paso en este sentido, es necesario convocar de inmediato a una asamblea general del gremio y retomar el camino de la democracia obrera, ese que iniciamos cuando echamos a Wasiejko, pero que aún no hemos podido terminar de conquistar.
La Lista Negra tiene la palabra…
Corresponsal de los trabajadores del neumático para Democracia Obrera