Voces del piquete de Abasto (La Plata) en la noche del 7 de mayo de 2015
Los explotados de Abasto toman la resolución del problema de la tierra y la vivienda en sus propias manos
Desalojo, represión y resistencia por un techo
“… la orden de desalojo estaba desde ayer y no había pasado nada. Un juez dicto una medida cautelar que frenó momentáneamente el desalojo. Por eso a mucha gente la agarró desprevenida. Muchas estaban durmiendo. Nos re cagaron a patadas, a mansalva balas de goma. Mataron perros, chanchos, quemaban lo que encontraban. Y ahí empezaron a tirar con balas de plomo. No mataron a nadie de casualidad.
Parece que a una mujer embarazada la han golpeado mucho y en estos momentos está internada y le están induciendo el parto.”
“Los que estábamos en el predio empezamos a hacer contacto con gente que empezó a traer más gente: abogados, sindicatos y otras organizaciones, CCC, UTT (Unión por tierra y trabajo), facultades, SUTEBA, delegados del ARS, todas organizaciones que se solidarizaban con la gente y venían a apoyarnos y a la vez venían todos con su causa (los estudiantes decían que a mí me están cagando con los estudios, en los sindicatos que están echando gente, etc.). Y diciendo que iban a venir muchas más organizaciones como la UOCRA.
Es bueno que nos unamos todos porque somos muchos los que tenemos el problema de la vivienda y de la tierra. Así cuanto más somos, más podemos pelear contra estos fiscales…”
En la madrugada del 7 de Mayo centenares de obreros industriales y agrícolas que comenzaron a construir sus viviendas en terrenos fiscales en la localidad de Abasto, fueron desalojados brutalmente por la policía asesina que, armados hasta los dientes con gases, balas de goma y de plomo, destruyeron y quemaron todo lo que se encontraba a su paso. Hubo trece detenidos y decenas de heridos.
Lo que estalló en Abasto es la verdadera Argentina en la que más del 70% de la clase obrera y las clases medias arruinadas no pueden acceder a una vivienda digna. Por ello, hartos de esta situación, los trabajadores tomaron la resolución de este problema en sus propias manos. La lucha de los trabajadores de Abasto representa la demanda de todo el movimiento obrero, puesto que la vivienda digna es una lucha que está indisolublemente ligada a la pelea por el trabajo digno y el aumento salarial.
Los trabajadores, a pesar de la represión, no se rinden y cortan la Avenida 520 reclamando que les devuelvan sus tierras.
Presentamos a continuación las voces del piquete de Abasto
DO: Contanos como empezó todo.
J: Mattioli se había apropiado de esos terrenos y se los alquilaba a gente que había hecho quintas. Cuando este hombre se enteró que los terrenos eran fiscales, le empezaron a exigir que les diera una parte, no le querían pagar más el alquiler. Entonces Mattioli les dijo que se tenían que ir porque eran terrenos fiscales. En respuesta a esto los quinteros hicieron público en todo el barrio que esos eran terrenos fiscales, que el que quisiera un pedazo de tierra fuera a ocuparla. Y así empezamos a tomarlo. Unos conocían a gente que trajo los planos del predio. Cuando vino la primera orden de desalojo vimos que el predio iba de las calles 520 a 530, y de 214 a 217. ¡Y nosotros creíamos que era de una hectárea! Ahí se empezó a ocupar todo. Son 30 manzanas más o menos.
Esas tierras eran de una empresa que quebró. El dueño murió y supuestamente tiene dos hijos que viven en Italia. Al tercer día que empezó la toma, comenzaron a circular estas versiones, pero esos dos hijos nunca aparecieron. Supuestamente mandaron un fax. ¿Cómo hicieron los jueces y fiscales para ordenar un desalojo sin ninguna denuncia? Todo con plata. Es que hay mucha plata en juego ahí, 300 millones de pesos según el cálculo que hicieron del terreno.
DO: ¿Cómo es que llega la orden de desalojo?
J: Mattioli decía que nos teníamos que ir porque esos terrenos eran suyos y de un día para otro cae la orden de desalojo firmado por Mattioli, un juez, dos fiscales y una lista de nombres de unas veinte personas que no las conoce nadie. Supuestamente habían hecho un censo, y la orden de desalojo la emiten contra esas veinte personas y todos los demás que están ocupando el predio.
Acá supuestamente había ya un proyecto de hacer un plan de viviendas. Supuestamente lo acordaron hace 8 meses atrás, con la delegada municipal de ese entonces que está denunciada por casos de corrupción por la venta de miles de registros de conducir truchos desde que está en la dirección de 20 y 50 (que es donde se saca el registro de conducir N. de R) cuando entró Pablo Bruera. Cuando se fue para 20 y 50, lo metió al marido de delegado de la comuna de Abasto. Ellos tenían ya todo arreglado. Mattioli, para tapar todo y quedarse con el gran negocio apropiándose de los terrenos fiscales, le había prometido a los delegados del Municipio un predio para hacer la salita, el jardín, la comisaría y polideportivo, incluidos los materiales para las construcciones. Es decir, les daba a ellos un par de hectáreas para que no dijeran nada respecto de que se trataba de terrenos fiscales y a cambio este chorro se quedaba con todo lo demás.
A su vez la gente estaba toda aterrorizada, sin saber para donde disparar. Ya llevábamos unas dos semanas ahí. En carpas la mayoría, había sólo dos casillas. Como no teníamos nada asegurado del tema del desalojo, si nos iban a dejar o no, porque se movió mucha plata. Hasta al cura se compraron. Cuando le fueron a pedir si iba a dar una misa ahí para la gente, el cura los sacó cagando y a los veinte minutos nos enteramos que lo habían arreglado con cuatro hectáreas. Las mismas tierras que nos sacaban a nosotros.
Hay que ver porque este Mattioli hizo mucho quilombo, giladas, compró a un montón de gente, a fiscales y jueces, para ensuciar a la gente que estaba en el predio y desalojar.
Mattioli se empezó a comprar también a todos los comerciantes, para que largaran la campaña de que se iba a hacer una villa, que iba a venir gente de otros lados, que adentro era un aguantadero, que había un montón de tranzas y era un quilombo. Para enfrentar a la gente del barrio.
DO: Los desalojaron con una violenta represión. Contanos como fue esto.
J: Después quedó todo calmo porque la orden de desalojo estaba desde ayer y no había pasado nada. Un juez dicto una medida cautelar que frenó momentáneamente el desalojo. Por eso a mucha gente la agarró desprevenida. Muchas estaban durmiendo. Nos re cagaron a patadas, a mansalva balas de goma. Mataron perros, chanchos, quemaban lo que encontraban. Y ahí empezaron a tirar con balas de plomo. No mataron a nadie de casualidad.
Parece que a una mujer embarazada la han golpeado mucho y en estos momentos está internada y le están induciendo el parto.
Incluso al abogado del juez Arias lo cagaron a palos. Hay 13 detenidos. Fue todo a mansalva. Entraron por la 530, prendiendo fuego, levantando a la gente a las patadas. Como si tuvieran una orden de allanamiento no de desalojo. Y en mitad del predio se juntaban los que venían de la 520 y los milicos que entraban de la 530, venían de dos frentes: norte y sur. Eran 2500 milicos, eran mucho más que la gente. Venían a explotar todo. A la gente la corrieron más de veinte cuadras.
Ya llegaron a las cuatro de mañana, a los tiros. Muchas balas de plomo y de goma.
Ahora se está esperando que suelten a los detenidos. Y confirmar lo de la mujer embarazada.
DO: ¿Qué opinas de unirse con otros sectores para pelear juntos?
J: Los que estábamos en el predio empezamos a hacer contacto con gente que empezó a traer más gente: abogados, sindicatos y otras organizaciones, CCC, UTT (Unión por tierra y trabajo), facultades, SUTEBA, delegados del ARS, todas organizaciones que se solidarizaban con la gente y venían a apoyarnos y a la vez venían todos con su causa (los estudiantes decían que a mí me están cagando con los estudios, en los sindicatos que están echando gente, etc.). Y diciendo que iban a venir muchas más organizaciones como la UOCRA.
Es bueno que nos unamos todos porque somos muchos los que tenemos el problema de la vivienda y de la tierra. Así cuanto más somos, más podemos pelear contra estos fiscales, si podemos pelear y hasta donde con el tema de los papeles y todo lo necesario para tener nuestro terreno.
DO: ¿Y ahora como continúan?
J: Por ahora no podemos volver a ocupar porque se metieron el vicegobernador, diputados y senadores. Ayer estaban los de derecho a la niñez. La idea es hacer todo legal. Porque esos terrenos no tienen dueño, son fiscales. Mattioli dice supuestamente que tiene un papel que dice que son de él, pero es todo mentira. Mattioli Propiedades no parece en ningún lado, no pagó nunca ningún impuesto, nada como para decir que es de él.
Vamos a seguir con el corte acá en 520 y 214, por lo menos hasta el miércoles que dijeron que nos van a dar una respuesta. Y pienso que tendríamos que llamar a todas las organizaciones obreras, delegados, sindicatos, de los estudiantes, maestros, a todos a venir al corte con nosotros.
DO: ¿Queres agregar algo más?
J: La gente quedó muy mal, porque le sacaron todo. Hoy en día es imposible para uno que trabaja comprarse un terreno. Y aunque el 70% sean paisanos, (por los inmigrantes N de R) somos todos iguales. Ahí estamos todos juntos en la necesidad del terreno.
Acá supuestamente iban a hacer un plan de vivienda, pero se lo tenías que pagar al tránsfuga este de Mattioli. Y los de la municipalidad, de las cuatro hectáreas que quedaba la gente tomando, ellos querían que no hubiera inmigrantes.
Había mucha gente, familias con hijos, con bebés, que ya no podían pagar el alquiler. Ahí se notaba mucho la necesidad. Hay muchas familias que viven todos juntos, hermanos, tíos, sobrinos, todos con sus hijos en una misma casa porque no se puede tener vivienda ni alquilar con lo que se gana. Y este terreno la verdad que viene del cielo, y además nadie se lo quiere dejar para que lo agarre este chanta que además cagó a todo el mundo.
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