Bolivia - 18 de abril de 2019
Como ayer con Goni y la rosca, hoy con Morales y
la estafa de la revolución bolivariana
Continúa el robo de los minerales y los hidrocarburos de Bolivia
Un redoblado saqueo de las transnacionales imperialistas
Tan solo en el año 2017 las transnacionales mineras se llevaron 3.828 millones de dólares, dejando al Estado boliviano la miserable renta minera de 340,6 millones de dólares
Presentación
El suplemento que presentamos da cuenta del redoblado saqueo de minerales e hidrocarburos bajo el gobierno de Evo Morales, que como socio menor de las transnacionales imperialistas le ha garantizado jugosos negocios, acrecentando además sus súperganancias. Durante más de una década este gobierno ha expuesto a la nación a un saqueo semejante al de la época dominada por los “barones del estaño” y el régimen de “La Rosca” en las primeras décadas del siglo XX o como durante el gobierno de Sánchez de Lozada. Es que las migajas por el pago de renta minera y de hidrocarburos que dejan las transnacionales en Bolivia, mientras se llevan miles de millones de dólares, son una muestra del saqueo imperialista a las naciones oprimidas, que solo deparan esclavitud, hambre y muerte para los explotados.
En el año 2017 sobre un total de ingresos de 4.168,7 millones de dólares (valor de 1,038 millones de toneladas de mineral) la renta minera que obtuvo el Estado fue de 340,6 millones de dólares (dato extraído del Ministerio de Minería y Metalurgia)1. Estas cifras que desarrollamos en los artículos del presente suplemento son un ejemplo del robo alevoso del país por parte de las transnacionales imperialistas durante el “Proceso de Cambio”.
Este redoblado saqueo deviene de la expropiación y el aborto que significó el gobierno de Morales a la revolución de 2003-2005, cuyas demandas centrales: “Ni 30, ni 50%, nacionalización” y “¡Fuera gringos!”, ponían a la orden del día la expropiación de las transnacionales y la nacionalización sin pago de la minería y los hidrocarburos. El triunfo de la revolución hubiera liberado a la nación del yugo imperialista, por el que dieron la vida más de 100 explotados, pero esa heroica lucha antiimperialista, eslabón de la revolución latinoamericana y mundial a principios del siglo XXI, fue desviada por el FSM (Foro Social Mundial), con la complicidad de la burocracia colaboracionista de la COB (Central Obrera Boliviana) y las direcciones reformistas de todo color y pelaje del continente que la sostuvieron.
Expropiada la revolución se impuso la farsa de la “revolución bolivariana” al servicio de Wall Street, encabezada por el mismo FSM, con Fidel Castro, Chávez, Kirchner, Morales, entre otros, y sostenidos de modo abierto o críticamente por los “renegados” del trotskismo. Una caricatura de revolución que dejó intacta la propiedad de los monopolios imperialistas que arremetieron a un saqueo cada vez mayor de América Latina.
Vaya entonces este suplemento, el cual busca demostrar con cifras sobre el profundo saqueo imperialista para poder aportar al debate y la lucha del proletariado boliviano y latinoamericano.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
BOLIVIA: a propósito de la expoliación minera bajo el “Proceso de Cambio”
EL GOBIERNO DE EVO MORALES GARANTIZA UN REDOBLADO SAQUEO DE LAS TRANSNACIONALES MINERAS
El dominio de las transnacionales en el sector minero
La explotación de minerales en Bolivia es realizada por tres tipos de empresas: privadas, cooperativas2 y estatales. La mayor parte de ella se encuentra en manos de cuatro empresas privadas, subsidiarias de las más grandes transnacionales mineras: las minas Bolívar y Porco, que proveen concentrados de zinc/plata y plomo/plata en Oruro y La Paz, están en manos de Illapa/Sinchi Wayra, filiales de Glencore3 (Suiza), que además opera en tres minas más y una planta de concentrados a través de sus subsidiarias; la mina San Vicente de Potosí del cual se extrae principalmente plata, y zinc/plomo en segundo lugar, es explotada por Pan American Silver4 (EE.UU./Canadá); la mayor mina a cielo abierto de San Cristóbal en Potosí, de donde se extrae aproximadamente la mitad de todos los concentrados de zinc/plata y de plomo/plata del país, está en manos de la Sumitomo5 (Japón); y la mina San Bartolomé en Potosí, que provee plata, se encuentra en manos de la Empresa Minera Manquiri, que es filial de la Coeur Mining6 (EEUU).
Estas grandes transnacionales, junto a sus subsidiarias y otras empresas privadas más pequeñas concentran el grueso de la actividad minera. El periódico Pagina Siete sostuvo hace dos años que “El actor privado concentró el 82% de la producción minera (…) según datos del Anuario Estadístico 2016 de la cartera del sector” (05-04-2017).
El redoblado saqueo bajo el “Proceso de Cambio”
Evo Morales, durante 13 años, no ha dejado de garantizar jugosos negocios a las transnacionales mineras y sus subsidiarias. Ha conservado condiciones de expoliación que se asemejan a las que tuvieron los “barones del estaño” bajo el gobierno de la Rosca hasta mitad del siglo XX o las que tuvieron las transnacionales bajo el gobierno de Sánchez de Lozada. Veamos.
El monto total por la extracción de minerales bajo el gobierno de Morales, entre 2006 y 2017, fue de 33.592 millones de dólares mientras que la renta minera capturada por el Estado (de privadas, cooperativas y estatales) en ese mismo periodo fue de 3.217,3 millones de dólares7, lo que representa un 9,5% del total. Por lo tanto, las transnacionales mineras se quedaron con 30.374,7 millones de dólares.
La renta minera que se queda el Estado representa entonces una migaja en relación a lo que se llevan las transnacionales. La misma está compuesta por el pago de: a) regalías, una compensación por la explotación de minerales que llevan a cabo las empresas mineras, que se calcula sobre la base del valor bruto de venta, el cual se distribuye en su totalidad entre el gobierno departamental (85%) y municipal (15%); b) impuestos por las utilidades de las empresas y c) patentes mineras, representan una suma fija que pagan las mineras. Cabe aclarar que el cálculo porcentual por regalías, fijado por ley, varía entre el 2% y el 7 %, según el mineral, su volumen y su precio en el mercado mundial, siendo el oro (en su mayoría explotadas por empresas cooperativas) el que menos aporta al mismo, alrededor del 2%. Por otra parte, el pago por impuestos que el Estado recibe, los “re-invierte” en casi su totalidad para la prospección y exploración de nuevos yacimientos, que aprovechan principalmente las transnacionales. El pago de patentes financian a las instituciones de control y fiscalización estatal como Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (60%) y al Servicio Geológico Minero (40%) que es funcional a las tareas de prospección.
Como una muestra concreta del saqueo de minerales por las transnacionales, en el año 2017 sobre un total de ingresos de 4.168,7 millones de dólares (valor de 1,038 millones de toneladas de mineral)8 la renta minera que obtuvo el Estado fue de 340,6 millones de dólares (ver gráfico 1). La renta minera representó ese año sólo el 8,2% del total, donde la minería privada dejó en relación a ella una migaja de 264,6 millones de dólares cuando sus ingresos por exportación fueron de 3.181,2 millones de dólares, en tanto que las cooperativas dejaron en concepto de renta 58,2 millones de dólares y las mineras estatales 17,6 millones de dólares. En relación al Producto Interno Bruto (PIB)9 del año 2017, que fue de 37.782 millones de dólares10, la extracción total de minerales representó el 11% (4.168 millones de dólares) y la renta minera solo significó el 0,9 % de dicho PIB.
En el 2018 la expoliación de la nación fue más pronunciada, de acuerdo a la estimación que realizara el periódico oficialista CAMBIO (14-12-2018), este sostuvo que la explotación de minerales "…alcanzará un volumen 1,3 millones de toneladas, que generará un ingreso de $us 4.181 millones." En relación a la renta minera, este periódico señalaba que las regalías para 2018 se estimaban en 182 millones de dólares. Pero esta cifra estimativa se rectificó en la rendición de cuentas de la gestión minera 2018, ya que “El ministro de Minería, César Navarro, informó que en 2018 se logró… por concepto de regalías mineras… $us 179 millones.” CAMBIO (22-01-2019). Esto representa sólo el 4,3 % del total de ingresos por la venta de minerales, una migaja que hacen pasar como “compensación” por la explotación minera y con el que ya no pueden ocultar el brutal saqueo de la nación. Asimismo, en relación al PIB que, según el gobierno, alcanzó un acumulado de 40.885 millones de dólares para 2018, la actividad minera en cuanto a sus ingresos totales (4.181 millones de dólares) representa poco más del 10%, mientras que la renta minera solo por regalías (179 millones de dólares) apenas alcanzó al 0,44 % de dicho PIB. ¡Estas cifras en sí mismas son una muestra del brutal saqueo de la nación por parte de las transnacionales bajo el gobierno bolivariano de Evo Morales y su pacto con la Media Luna fascista!
El dominio de las transnacionales en la exportación de minerales
en Bolivia la exportación de minerales no es realizada por el Estado, ya que no tiene una minería ni un comercio exterior nacionalizado. Por lo tanto, si bien tiene una participación minoritaria en la exportación, su principal función es la de ejercer un registro y control -como “propietario” del suelo boliviano y de sus recursos naturales- de las licencias otorgadas a mineras privadas y cooperativas. Así como también de las licencias de exportación dadas a comercializadoras privadas de acuerdo a la Ley Nro. 535, por medio del Servicio Nacional de Registro y Control de la Comercialización de Minerales y Metales (SENARECOM) para el cobro de patentes, impuestos y regalías.
En lo que respecta a la exportación, en el año 2017 (último registro detallado) el monto total por exportaciones fue de 3.898,8 millones de dólares: las privadas tuvieron ingresos por 3.181,2 millones de dólares, las cooperativas 408,3 millones de dólares y las estatales 309,3 millones.11
En cuanto a la exportación a manos del Estado cabe aclarar que si bien todas las empresas mineras (cooperativas, privadas, estatales) están obligadas por ley a vender el mineral a las fundidoras estatales que luego exportan lingotes, solo existen dos de peso (Vinto y Karachipampa), las cuales absorben principalmente estaño, cuyo grueso proviene de las propias mineras estatales. Por eso el Ministro de Minería, César Navarro admitió que “Uno de los grandes problemas (que tenemos) es que dependemos de los hornos de fundición de España, Estados Unidos y el Asia”. (Periódico El Diario, 25/12/2016). Es que los ingresos por exportación de las empresas estatales sólo representó el 8% del total exportado en 2017, ya sea en mineral concentrado (producto intermedio de molienda donde el metal es separado de desechos) de zinc, plata, estaño y plomo principalmente, o bien lingotes de estaño de sus empresas. Además los minerales exportados como concentrados por las estatales fueron a fundidoras en el extranjero, en manos de transnacionales.
Estas exportan los minerales extraídos en Bolivia por intermedio de comercializadoras privadas, que compran concentrados principalmente a las mineras privadas y a empresas cooperativas a precios fijados a nivel internacional12. Estas comercializadoras son subsidiarias de las transnacionales que saquean Bolivia. Por ejemplo, la Minera San Cristóbal, subsidiaria de la japonesa Sumitomo, declara: “Los concentrados minerales de MSC son transportados al puerto chileno de Mejillones mediante ferrocarril y en contenedores a granel. Desde allí, Summit Minerals GmbH, empresa también subsidiaria de Sumitomo Corporation, compra gran parte de la producción de concentrado para comercializarlo en diferentes destinos, principalmente de Europa y Asia. Los clientes finales son fundidoras que procesan el concentrado para obtener metales de alta pureza…”13 La transnacional suiza Glencore, que opera las minas Bolívar y Porco, también se vende a sí misma… “Los concentrados exportados por Sinchi Wayra S.A./Illapa S.A. son vendidos a Glencore en puertos de Chile y Perú.”14
Como puede verse, con estos ejemplos, las transnacionales que saquean Bolivia hacen jugosas ganancias comercializando el grueso de los minerales extraídos mediante sus empresas subsidiarias a fundidoras (que en general les pertenecen) en el extranjero. En tanto que las mineras y fundidoras estatales exportan minerales en un mínimo porcentaje, con destino a EE.UU, China y la Unión Europea a través de distintos transportistas privados que llevan cargas de mineral a los puertos de Chile y Perú.
Una mayor superexplotación de los mineros en beneficio de las transnacionales
El saqueo de los minerales va de la mano del abaratamiento de la fuerza de trabajo que golpea de lleno sobre el conjunto de los mineros. Esto se evidencia, por un lado en la reducción de los mineros de empresas privadas y estatales junto a un progresivo quite de sus conquistas, y por el otro, en el crecimiento numérico de los mineros superexplotados por los patrones cooperativistas, que reciben salarios de hambre y que trabajan en peores condiciones en relación a la media.
En el año 2017 el número de trabajadores de las empresas mineras del país (privadas, cooperativas y estatales) alcanzó un total de 136.162. Entre 2013 y 2017 se dio una tendencia pronunciada a la reducción de trabajadores del sector: las mineras estatales redujeron su personal de 7.902 en 2013 a 6.370 en 2017 y las mineras privadas pasaron de 8.110 en 2013 a 6.756 trabajadores en 2017. En cambio el número de trabajadores de empresas cooperativas que tuvo un crecimiento continuo desde 2006 (54.200 trabajadores), pasó de 114.920 trabajadores en 2013 a 123.036 en 2017.15 La reducción del número de mineros de empresas privadas y estatales impuso una mayor explotación de quienes quedaron trabajando. Por otra parte, el aumento del número de trabajadores de las cooperativistas, más precarizados, y de míseros salarios, empujó la tendencia hacia una mayor superexplotacion del conjunto de los trabajadores mineros. Esto significó una reducción de la masa salarial para las empresas mientras aumentaban sus ganancias. Una flexibilización laboral que pagan todos los mineros con su salud y su vida.
En un informe del CEDLA, el investigador Vladimir Díaz Cuéllar señala al respecto que: "Naturalmente existen algunos casos en que los salarios son mucho más elevados que estos promedios como en la mina San Cristóbal donde muchos ganan más de Bs 10.000 (1450 dólares) o en el sector estatal (Huanuni) donde el salario promedio alcanza a Bs 13.400 (1942 dólares). Pero estos, así como los ingresos más elevados de trabajadores especializados de algunas cooperativas, son simplemente excepciones a la regla... la inmensa mayoría de los obreros mineros trabajan en cooperativas donde sus ingresos en la última década oscilaron entre Bs 300 (44 dólares) y 3.000 (435 dólares)”. (Periódico El Día, 09/04/2017, negritas nuestras).
Esto no hubiera sido posible sin la burocracia colaboracionista de la COB y la FSTMB que sostuvo el plan de las transnacionales ejecutado por el gobierno bolivariano de Morales. El hundimiento de la masa salarial total del sector minero solo beneficia a las transnacionales y a sus socios menores, ya que al controlar el grueso de la exportación minera no necesita explotar directamente todo mineral, especialmente donde el costo salarial le resulte alto en relación a sus beneficios. Por ejemplo, en lugar de realizar ellas mismas la explotación del oro, cuyo costo laboral le sería alto por el número de trabajadores bajo convenio que debería emplear, deja ésta en manos de las cooperativas esclavistas, cuya patronal, íntimamente ligada al gobierno, superexplota mineros en masa y a bajo costo salarial, para luego vender el mineral a las comercializadoras privadas que son subsidiarias de las mismas transnacionales mineras.
En este sentido, la reducción de mineros de las empresas estatales junto a la creciente flexibilización laboral y desocupación en los distritos mineros solo puede beneficiar a las transnacionales, las cuales quieren hacerse también del estaño.
Esto lo impuso el gobierno servil de Morales en base a chantajes con el verso de mantener la “estabilidad laboral” que le ha costado a los mineros de las estatales miles de despidos como sucediera en Huanuni. Dividiendo las filas de los mineros de las privadas, la base esclavizada de las cooperativas y las estatales con el completo aval de la burocracia minera de la COB y la FSTMB, e inclusive enfrentándolos con sus hermanos de clase desocupados con la estafa del “déficit” que supuestamente generarían los jukus (ladrones de mineral), cuando los más grandes ladrones de mineral son las transnacionales imperialistas.
Las transnacionales quieren mineros esclavizados, no mineros con conquistas y convenios, sino con salarios de hambre como las de las empresas cooperativas.
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
HUANUNI:
LA ESTAFA DEL GOBIERNO SOBRE EL “DÉFICIT” DE LA EMPRESA MINERA HUANUNI, SOSTENIDA POR LA BUROCRACIA COLABORACIONISTA
Ni los mineros asalariados ni los desocupados ni el jukeo son causantes del “déficit”.
Los verdaderos responsables del déficit y el robo de minerales son las transnacionales mineras que saquean la nación y el gobierno cipayo de Evo Morales que ejecuta sus planes.
¡Fuera la policía y las FF.AA asesinas del distrito minero de Huanuni!
Los funcionarios del gobierno plantean que la Empresa Minera Huanuni (EMH) presenta déficit (que presenta más gastos que ingresos), y que esto se debe, principalmente, al jukeo (robo de minerales por parte de desocupados de poblados cercanos a la mina). Además, del excesivo número de mineros y de sus altos salarios. Al respecto, el gerente de la EMH Mario Felipez decía: “Tenemos un estudio que han hecho los anteriores gerentes, pero nosotros también hemos hecho un estudio correspondiente y (el robo de mineral) es un perjuicio tremendo para la economía minera de Huanuni. Por mes estamos hablando de casi cerca de Bs 2 millones (de pérdidas)”.16
Esto no sería posible sin el aval de la burocracia colaboracionista. Tanto la directiva de la COB (Central Obrera Boliviana) como la de la FSTMB (Federación Sindical de Trabajadores Mineros de Bolivia) y de la SMTMH (Sindicato Mixto de Trabajadores Mineros de Huanuni) se hicieron eco de la campaña lanzada por el gobierno de Evo Morales sobre una EMH “deficitaria”, y sostuvieron esa mentira señalando que la causa de la misma se debe al jukeo. David Choque (Secretario General del SMTMH) declaró: “Por este tipo de robo se pierde mensualmente dos millones de dólares. Entonces la empresa es afectada por los jukus que le hacen daño en su economía”.17
Estas declaraciones condenatorias al jukeo, con cifras que se contradicen, tan solo persigue un objetivo: dividir las filas obreras para profundizar la flexibilización laboral del conjunto de los mineros estatales, pues justamente el plan del gobierno es reducir el número de trabajadores en la EMH. Felipez, aseguró que“…lo óptimo sería tener 2.000 hasta 2.200 trabajadores, para reducir los gastos que involucra el personal, puesto que existen otras empresas privadas que trabajan con una menor cantidad de empleados y su eficiencia es mayor.” 18
La burocracia colaboracionista oculta el plan del gobierno a pedido de las transnacionales mineras que saquean la nación. Morales, gracias a la directiva del SMTMH, está chantajeando con el déficit y el jukeo a los mineros ocupados para que entreguen sus conquistas y para que se sometan al gobierno, el cual les brindaría “seguridad”. La directiva de la COB, la FSTMB y la nueva dirección sindical de Huanuni (revestida de “Internacionalista” por la LIT-CI en las elecciones de diciembre de 2018) garantiza la división entre los mineros ocupados con los desocupados, a los cuales se acusa de ser jukus o bien de ser una amenaza a la estabilidad laboral por el solo hecho de exigir trabajar en la mina mientras la gerencia reduce la planta de trabajadores de la EMH. Todo esto con el fin de liquidar a la vanguardia proletaria de la revolución de 2003-2005 y para destruir la minería estatal, conquistada al calor de aquella heroica lucha revolucionaria. Esto solo puede redundar en un mayor beneficio para las transnacionales mineras instaladas en Bolivia, ya que de imponerse el plan del gobierno el grado de explotación laboral del conjunto de los trabajadores mineros será igual o peor al que sufren los mineros esclavizados por los patrones cooperativistas. Este ataque centralizado sobre el corazón del proletariado boliviano y latinoamericano, se está llevando a cabo con militarización de las empresas estatales por policías y las FFAAA y con sangre de desocupados.
La EMH no presenta ningún déficit
La Empresa Minera de Huanuni, principal minera estatal productora de estaño, extrajo en 2018 con sus 3.190 trabajadores un total de 7.054 Toneladas Métricas Finas (TMF) por un valor de 145,8 millones19 de dólares, y aportó 4,2 millones de dólares en concepto de regalías.20 Por otra parte, las mineras estatales (sin contar con la Empresa Metalúrgica Vinto que funde estaño concentrado en forma de lingotes) obtuvieron ingresos en 2018 por un total de 275,5 millones de dólares.21
En el caso particular de Huanuni, el monto total de ingresos (145,8 millones de dólares) no pudo ser absorbida por completo por los supuestos salarios “altos” de los trabajadores ni por el jukeo que serían factores determinantes del déficit, según el gobierno sostenido por la nueva directiva del SMTMH.
En relación al salario en la EMH ésta presenta distintas escalas, que van desde un mínimo de Bs 3.500 (507 dólares)22 a un máximo de Bs 25.000 (3.597 dólares) en promedio, incluyendo obreros, ingenieros, y la administración. Si bien no existen datos en los últimos años al respecto, podemos aproximarnos a ella. Por ejemplo, si tomamos como base un salario general promedio alto de 7500 bolivianos (1.080 dólares) por la cantidad de trabajadores (3190), la masa salarial sería de 23,9 millones de bolivianos por mes (3,44 millones de dólares) con un promedio estimado anual (más un mes por aguinaldo) de 310,1 millones de bolivianos (44,7 millones de dólares). Si al total de ingresos de la EMH (145,8 millones de dólares) en 2018 le restáramos la masa salarial y una suma igual (o mayor) por costos de operación más la renta minera (regalías, impuestos, patentes) le quedaría a la minera estatal alrededor de 50 millones de dólares. Es poco creíble que los jukus sean el causante del “déficit”, pero es la burocracia colaboracionista de la COB, de la FSTMB y del SMTMH los que sostienen esta farsa del gobierno, cipayo de las transnacionales.
Es más, como demostramos en el presente trabajo, el gobierno tan solo en el 2017 le ha garantizado a las transnacionales mineras quedarse con 3.828 millones de dólares dejando al Estado la migaja de 340,6 millones de dólares de renta. Este multimillonario monto (3.828 millones de dólares) de quedarse en las manos de los trabajadores –y no así en el de las transnacionales imperialistas- serviría para poder garantizar salarios dignos a todos los mineros del país, y demás trabajadores, acabar con la desocupación, jubilaciones dignas, educación, salud entre otras demandas.
Entonces ¿De qué déficit habla el gobierno de Morales? El único “déficit” a la nación saqueada la generan las transnacionales imperialistas. Que el Presidente de la COMIBOL (Corporación Minera Boliviana), el gerente de la EMH expliquen dónde está el déficit, cuando se han dedicado –junto a la burocracia minera- a ocultarle a los trabajadores de Huanuni las millonarias ganancias que perciben las transnacionales imperialistas. El gobierno de Morales utiliza cualquier pretexto, avalado por la burocracia colaboracionista para asentar la idea del “déficit” de la EMH para “demostrar” el fracaso de la empresa estatal y del supuesto control obrero que en ella existe, el cual de imponerse solo beneficiará al plan de las transnacionales, que son los verdaderos ladrones de mineral.23
Si hay control obrero en la EMH como afirma la burocracia masista, que la anterior y la nueva dirección sindical de Huanuni (SMTMH) nos expliquen donde están los millones de dólares que ingresaron en las empresas estatales al menos. No lo pueden decir porque lo que existe en Huanuni es una “cogestión” entre el gobierno (que pone a dedo al gerente de la empresa estatal) y la dirección sindical que a lo sumo ejerce presión sobre este funcionario para evitar la lucha de la base minera. Es sobre la base de esta cogestión que el gobierno utilizó el supuesto déficit y el jukeo como excusa para militarizar la EMH, dividir las filas de los mineros y terminar de hundir sus conquistas por haber osado conquistar cinco mil puestos de trabajo en 2006, ganándose a la base de mineros de las cooperativas contra su patronal esclavista asociada al gobierno, con la cual se había reabierto en su momento la demanda de nacionalización de toda la minería sin pago y bajo control obrero en la revolución de 2003-2005 que fuera abortada con la farsa de la “revolución bolivariana”.
¡Basta de culpar a los trabajadores y a los desocupados del déficit!
¡Apertura de los libros de contabilidad de la EMH y de toda la rama de producción minera para demostrar las millonarias ganancias de las transnacionales imperialistas!
¡Basta de robarles a los mineros! ¡Basta de militares y policías asesinos en la EMH! ¡Fuera las fuerzas represivas enviadas por el gobierno y las transnacionales imperialistas!
¡Basta de dividir las filas obreras! ¡Trabajo digno para todos! ¡Por la inmediata incorporación de todos los mineros esclavizados por los patrones cooperativistas y de los desocupados en la minería nacionalizada con los mismos derechos de los mineros asalariados de Huanuni! ¡Por un turno más en las minas para que todos entren a trabajar!
¡Nacionalización de toda la minería, sin pago y bajo control obrero!
A propósito de la Tesis de Pulacayo y el control obrero en las minas
¡Abajo el secreto comercial! ¡Apertura de los libros de contabilidad de toda la rama de producción minera, para que los trabajadores con los números en la mano demostremos que las transnacionales en el “Proceso de Cambio” se están robando todas las riquezas de la nación!
Bajo el “Proceso de Cambio” nada sustancial ha cambiado de los tiempos de los “barones del estaño”, en lo que respecta al saqueo y a la entrega de los minerales a los monopolios imperialistas. Los artículos, que fueron desarrollados arriba, demuestran el brutal saqueo imperialista y el rol nefasto que ha jugado la burocracia de la FSTMB y de la COB para sostener la impostura de la “Revolución Bolivariana”, y al mejor agente de Wall Street, Evo Morales.
Al contrario de la burocracia colaboracionista que ata a los trabajadores a la burguesía lacaya del imperialismo, sostenidos por la izquierda reformista, la Tesis de Pulacayo plantean que: “La realización de nuestras aspiraciones será posible si somos capaces de liberarnos de la influencia de todos los sectores de la burguesía y de sus agentes, de “izquierda”. La sífilis del movimiento obrero constituye el sindicalismo dirigido. Los sindicatos cuando se convierten en apéndices gubernamentales pierden su libertad de acción y arrastran a las masas por el camino de la derrota.”
La política de la dirección de la FSTMB es de total subordinación al gobierno, esta dirección le dijo a la base minera que “luchar y enfrentar al gobierno de Evo no sirve y está mal”. Por ejemplo, en el XXXI congreso de la Federación Minera de 2011, el mismo que fuese legitimado y sostenido por el Partido Obrero Revolucionario, donde la burocracia minera de la FSTMB y la COB plantearon que la “nacionalización de todas las minas” se la conseguía exigiéndole esto al gobierno de Morales. Asentando esta subordinación en sus resoluciones, donde incluso dieron apoyo al asesino Khadafy de las masas en Libia pintándolo de antiimperialista, y sometiendo así a los mineros a Morales. El rol jugado en los últimos años por la burocracia de la COB y la FSTMB no es más que la pérfida política de colaboración de clases para seguir garantizando la división de las filas obreras y con ella la subordinación del proletariado a la burguesía, con la estatización extrema de las organizaciones obreras, principalmente la COB que hoy se encuentra como apéndice del gobierno.
Para conquistar el camino de la victoria hay que terminar con la burocracia colaboracionista y luchar por la nacionalización de toda la minería y de los hidrocarburos sin pago y bajo control obrero retomando el camino de la revolución de 2003-2005. Para ello es vital abrir los libros de contabilidad de las empresas de toda la rama productiva, con un verdadero control obrero que es la única forma de develar el secreto comercial que es el corazón de la conspiración capitalista contra los explotados y demostrar las jugosas ganancias que hacen los capitalistas. ¡Abajo el secreto comercial de todos los patrones! No puede haber control obrero de toda la rama de producción sin la abolición de los secretos comerciales que es el primer paso hacia el control efectivo de la industria y sin expropiar y nacionalizar sin pago y bajo control obrero a todos los bancos. Los trabajadores tenemos que conocer las ganancias de los capitalistas y el grado de saqueo del país. Sin esto no puede existir un verdadero control obrero de la industria.
¿La Empresa Minera de Huanuni (EMH) opera con control obrero sobre la producción? Lamentablemente no es así. Solo los burócratas colaboracionistas pueden hacer pasar tal estafa a la base minera. Pues en realidad lo que hay en Huanuni es una co-gestión, esto quiere decir que hay una administración conjunta de una empresa entre el gerente puesto a dedo por el gobierno (a través de la COMIBOL) y la burocracia del sindicato. Pero es el gobierno antiobrero de Morales quien realmente ejerce el control sobre la EMH, puesto que pone y controla a los miembros del directorio de la COMIBOL, y a través de éste al gerente de la EMH: “Cada empresa tendrá un Gerente General que será ingeniero en minas, Directorios Locales con representación paritaria de empresa y trabajadores (Control obrero, secretario general y conflictos) sujetándose a un reglamento especial. El gerente general será nombrado por el presidente del directorio, y será ingeniero con por lo menos 10 años de experiencia en trabajo minero.” (Estatutos de la COMIBOL). Es el gobierno de Morales el que tiene un control de la empresa desde la gerencia, mientras que la representación obrera en manos de la burocracia sindical solo puede ejercer presión sobre el gerente pero jamás poner en cuestión los estatutos de la COMIBOL.
Esto nada tiene que ver con el control obrero. Trotsky, en relación a las nacionalizaciones burguesas realizadas en México por el presidente Cárdenas en la década del 30 del siglo XX, planteaba: “La administración de los ferrocarriles, de los campos petroleros, etc., por medio de organizaciones obreras, no tienen nada en común con el control obrero sobre la industria, pues, la esencia de la cuestión en esta administración es que se realiza por medio de la burocracia obrera que es independiente de los obreros, pero que al contrario, depende completamente del Estado burgués. Esta medida por parte de la clase dirigente persigue el objetivo de disciplinar a la clase obrera, haciéndola más industriosa en el servicio de los intereses comunes del Estado que, en la superficie parecen identificarse con los intereses de la clase obrero…” (“Los sindicatos en la época del imperialismo”, 1940).
Para impedir entonces el saqueo de las transnacionales, hay que ejercer un verdadero control obrero, como lo demuestran la Tesis de Pulacayo, para lograr “un efectivo control de los obreros en todos los aspectos del funcionamiento de las minas.” “Los obreros deben controlar la dirección técnica de la explotación, los libros de contabilidad, intervenir en la designación de empleados de categoría y, sobre todo, deben interesarse en publicar los beneficios que reciben los grandes mineros y los fraudes que realizan…” Es más, un verdadero control obrero sobre toda la rama de producción es un paso que estará férreamente vinculada con la perspectiva de una lucha revolucionaria anti-imperialista y por la toma del poder.
Que vuelva el grito de 2003-2005: ¡Fuera Gringos! ¡Ni 30 ni 50%, Nacionalización!
¡Qué demanda de la clase obrera y los campesinos pobres no se podría garantizar con la nacionalización de toda la minería y los hidrocarburos sin indemnización y bajo control obrero! ¡Basta de renta minera de miseria!
¡Basta de dividir las filas obreras! ¡Basta de dirigentes que sostienen a nuestros verdugos: a los patrones cooperativistas, a las privadas y al patrón que es Evo Morales y sus ministros! Por eso es indispensable terminar con la cogestión y la estatización de los sindicatos, recuperar la democracia obrera dentro de nuestras filas y preparar un plan de lucha para unificar a los mineros estatales junto a los mineros superexplotados por los patrones cooperativistas, de las privadas y los desocupados en un verdadero CONGRESO MINERO DE LA FSTMB CON DELEGADOS DE BASE Y MANDATO REVOCABLE, DONDE LOS OBREROS DESOCUPADOS TENGAN VOZ Y VOTO y desde allí se termine de romper con el gobierno, su cogestión al servicio de las transnacionales y se expulse a los dirigentes colaboracionistas, a los ministros y senadores "obreros". Por lo tanto debemos pelear porque…
¡Todo minero que no explote otro minero se organice en la FSTMB, bajo las mismas condiciones y salarios que la de los mineros de las empresas nacionalizadas!
¡Por la inmediata incorporación de todos los mineros esclavizados por los patrones cooperativistas y de los desocupados en la minería nacionalizada con los mismos derechos de los mineros asalariados de Huanuni!
¡Trabajo digno para todos! ¡Todos los mineros a planta permanente! ¡Por un turno más en las minas para que todos entren a trabajar!
¡Apertura de los libros de contabilidad de toda la minería y abolición del secreto comercial! ¡Control obrero de toda la producción minera y de hidrocarburos!
¡Nacionalización del conjunto de la minería y del comercio exterior para frenar el saqueo imperialista! ¡Por una banca estatal única! ¡No al pago de la deuda externa fraudulenta! ¡Allí e stá el dinero para cubrir todas las demandas de la clase obrera y los campesinos pobres!
¡Por la independencia de los sindicatos del Estado y por la más amplia democracia obrera! ¡Por una dirección revolucionaria en la COB y la FSTMB!
¡Hay que refundar la Federación Minera como en el ’52 con las milicias obreras y de los campesinos pobres y los comités de autodefensa sobre la base de la Tesis de Pulacayo!
¡Derrotemos al régimen del pacto de Morales y la Media Luna fascista que fuera bendecida por la OEA y su constitución reaccionaria, con la alianza obrera y campesina!
¡Luchemos de manera unificada contra las transnacionales saqueadoras y el imperialismo esclavizador!
¡Fuera gringos de Bolivia y de América Latina! ¡Ni 30 ni 50, nacionalización completa!
1- Dossier, Estadísticas del Sector Minero Metalúrgico 1980-2017, Ministerio de Minería y Metalurgia, Editorial del Estado, La Paz, Bolivia, 2018. Pág. 27.
2- Cooperativa minera: Este sector fue el refugio desde 1985 que acogiera a un ejército de desocupados tras el cierre de minas (1985-1987) dejando en la calle a miles de trabajadores. El grueso de este sector son mineros que trabajan en minas marginales que han entrado en un abierto proceso de agotamiento, estas minas se encuentran en áreas contaminadas donde existen inmensos depósitos de residuos minerales explotados durante décadas por la minería estatal y la gran minería privada. Su estructura organizativa cuenta con “socios” en la Federación Nacional de Cooperativas Mineras de Bolivia (FENCOMIN), donde yace una patronal minera que superexplota peones que trabajan en las peores condiciones, con herramientas precarias, sin seguro industrial, ni seguro de salud, ni aportes jubilatorios y con magros salarios. Hasta fines del 2017 se contabiliza 1816 cooperativas.
3- Glencore es una transnacional que explota y comercializa minerales como el cobre, cobalto, níquel, zinc y aluminio entre otros. Además comercializa productos energéticos (petróleo y carbón) y agrarios (legumbres y algodón). Tiene presencia minera principalmente en países de África, América, Europa y en Australia. https://www.glencore.com/who-we-are/our-products-in-life Esta transnacional registró un beneficio neto de 3.408 millones de dólares según http://www.expansion.com/empresas/energia/2019/02/20
4- Pan American Silver explota minas de plata en México, Perú, Bolivia y Argentina, reportando ganancias netas de 36 mil millones en el segundo trimestre de 2018 https://noticias.panamericansilver.com/2018-08-08-Pan-American-Silver-Reports-Net-Earnings-of-36-7-million-or-0-24-per-share-in-Q2-2018
5- Sumitomo Corporation Group realiza actividades comerciales en el mundo en base a recursos minerales, energía, productos químicos. y electrónica. En cuanto a explotación de minerales tiene presencia en Bolivia (zinc); Chile, Perú y EEUU (cobre); Brasil (hierro), Madagascar (níquel), entre otros. https://www.sumitomocorp.com/en/jp
6- Coeur Mining tiene explotaciones mineras principalmente de plata y oro en EEUU, México, Alaska, Bolivia http://www.coeur.com/
7- Las cifras fueron realizadas sobre la base de datos estadísticos del Dossier, estadísticas sector minero metalúrgico 1980-2017, p. 28-29; p. 58-59, Ministerio de Minería y Metalurgia, Editorial del Estado, La Paz, Bolivia, 2018.
8- Dossier, estadísticas sector minero metalúrgico 1980-2017, p. 56, Ministerio de Minería y Metalurgia, Editorial del Estado, La Paz, Bolivia, 2018. P.56
9- El PIB es el valor total de la producción de los bienes y servicios finales producidos por una economía en un período determinado, generalmente medido anualmente como figura en el ejemplo del presente artículo.
10- Según información del periódico La Razón (22-01-2019) en referencia al informe de gestión dado por Evo Morales.
11- Dossier, estadísticas sector minero metalúrgico 1980-2017, p. 56, Ministerio de Minería y Metalurgia, Editorial del Estado, La Paz, Bolivia, 2018. P. 114
12- Los precios de los minerales son fijados en la Bolsa de Metales de Londres, cuyos miembros directos, las transnacionales imperialistas, a través de sus operadores, participan de subastas y acceden a más de 700 almacenes de metales en el mundo. El precio promedio anual de los minerales que se exportan desde Bolivia fueron relativamente estables, pero si tomamos el promedio anual del precio del zinc, oro, plata y estaño de 2006 y de 2017 se observa un leve ascenso. Dossier, estadísticas sector minero metalúrgico 1980-2017, p. 220, Ministerio de Minería y Metalurgia, Editorial del Estado, La Paz, Bolivia, 2018.
13- Reporte de Sostenibilidad, Minera San Cristóbal, 2017, p.18.
14- https://www.bbv.com.bo/Media/Default/InformacionBursatil/Informes/PGB_SMI1_PCR.pdf.
15- Ídem, p. 23-24
16- Periódico La Razón, “La estatal Empresa Minera Huanuni pierde unos Bs 2 MM al mes por el juqueo”, (15/04/19)
17- Periódico Página Siete, “Calculan las pérdidas en $us 2 millones de por el robo de mineral”, (05/04/19)
18- Periódico La Patria, “Excedente de trabajadores en Huanuni es de 1.190”, (01/04/19).
19- Calculo estimado en base al precio promedio del estaño del año 2018
20- Según la revista Bocamina Nro. 74, enero de 2019 (editada por COMIBOL)
21- En el año 2018, además de Empresa Minera Huanuni, la Empresa Minera Colquiri extrajo con 1.200 trabajadores 3.475 TMF de estaño y 14.997 TMF de zinc por un valor total de 116,4 millones de dólares, aportando en regalías 4,1 millones de dólares y declarando utilidades por 17,7 millones. En tanto que la Empresa Minera Corocoro, con alrededor 300 trabajadores, tuvo ingresos por las 2.026 TMF de cátodos de cobre por un valor de 3,4 millones de dólares, logrando una utilidad de 1,5 millones. Bocamina Nro. 74, enero de 2019.
22- El dólar en Bolivia permanece estable desde hace 10 años bajo la siguiente cotización: 1 dólar = 6,95 bolivianos.
23- Las transnacionales entre 2006 y 2017 se quedaron con 30.374,7 millones de dólares mientras que la renta que se quedó el Estado fue de 3.217,3 millones de dólares. Estos son los jukus que se roban las riquezas de la nación y los que impiden garantizar trabajo para todos, mejorar la industria, la seguridad laboral para evitar tantos accidentes y muertes obreras, jubilación, salud, educación digna y cubrir todas las demandas elementales del conjunto del movimiento obrero y de los explotados.