La "nueva Izquierda" y sus candidatos burgueses y socialdemócratas en Brasil:

Se dedicaron a engañar bajo la farsa del “golpe” y a sostener al PT, al que lo salvaron de la furia de los explotados en 2013, en momentos en que este se retira disciplinado sometiendo a la clase obrera y paralizando momentáneamente sus fuerzas. Engañaron a los trabajadores diciendo que se pueden conseguir conquistas para los obreros a través de leyes en los parlamentos. Mintieron diciendo que con prefecturas de “izquierda” se puede humanizar el capitalismo y ahora en Brasil la “Democracia Real” también embellece y pinta de “izquierda” y “socialistas” a los viejos candidatos de la burguesía…

El PTS-MRT puso sus candidatos en San Pablo junto con la ex candidata de la burguesía y hoy candidata del PSOL: Erundina

El PTS-MRT entró en el Syriza de Brasil y desde el PSOL lanzó sus candidaturas. En la segunda vuelta sostiene a Freixo en Rio de Janeiro bajo la consigna “Por un Río de Janeiro más humano” dentro del capitalismo. En Leblon, en Ipanema y los barrios ricos de Río eso puede parecer una linda postal de esta “nueva izquierda” y sus banderas amarillas y violetas, pero para la clase obrera y los explotados “la democracia real” es una ciudad ocupada por ejército y los barrios obreros militarizados.

El PSOL hoy aparece como el “heredero del PT” y todos sus cortesanos lo “critican” para que “no cometa los mismos errores del PT” … al que todos han sostenido durante su gobierno y ahora lo sostienen en su ocaso.
Es allí donde el MRT-PTS buscó entrar en el fin del año pasado juntando miles de firmas, pero, aunque fue negado su ingreso, el PSOL les ofreció algunas candidaturas como los “representantes del FIT” en Brasil. Hoy sostiene la candidatura de Freixo con fraseologías como “hay que llevar adelante una posición anticapitalista, en una postura consecuente contra el conservadorismo… de enfrentamiento con el orden y sus instituciones”.

La ruptura pro stalinista del PSTU, el MAIS, los apoya y los considera “una trinchera” contra la derecha y los ataques y convoca a que todos se junten en un frente de izquierda junto al PCB. Mientras el PCB remata diciendo que ante el “crecimiento de las fuerzas conservadoras y reaccionarias (…) elegir a Freixo es un acto de resistencia al obscurantismo y la barbarie”. Finalmente, todo el círculo cierra con el PSTU llamando a un voto critico a Freixo.

Pero todos, absolutamente todos se callaron y se callan que una de las principales candidaturas del PSOL fue la de Erundina para la prefectura de San Pablo… ¿quién es Erundina? La candidata del PSOL ocupó la prefectura entre 89-92, reprimiendo ferozmente la huelga de los choferes de colectivos y abriendo el camino para la privatización del trasporte, entre otras cosas. Pero su historia sigue como una candidata para nada “socialista” ni “progresista”, en 1992 cuando era casado el mandato del ex presidente Collor de Melo vía Impeachment y asumiera su vice Itamar Franco, Erundina ocupó el cargo de Ministra Jefe de la Secretaría de Administración Federal. En 2004 había hecho alianza con el hoy “golpista” Temer para la misma prefectura de San Pablo a la que hoy se candidatea por el PSOL.

En Porto Alegre, la candidata del PSOL Luciana Genro (candidata a presidente en las últimas elecciones de 2014) defendió abiertamente los capitales mixtos con capital privado para gestionar la ciudad, al mismo tiempo que defendió la flexibilización laboral cuando durante los debates de los candidatos a Prefecto de Porto Alegre consideró que a no se trataba de acabar con la tercerización, sino que había que “fiscalizarla”. Mientras en Rio, como dijimos, Freixo habla de una ciudad más humana con las UPPs haciendo “reconciliación” de conflictos….

Nada de sorprendente. Es que toda la izquierda para hacer pasar como progresivo todo lo que hay de más reaccionario y rancio de este sistema capitalista en decadencia debe esconder todas sus mugres debajo de la alfombra. Y el PSOL es experto en este trabajo. No nos detendremos en plantear que sus principales dirigentes son invitados de honor y premiados todos los años en los “cursos” que da la burocracia de la central sindical de Cuba, que fue el pilar fundamental de la restauración capitalista a manos de la burguesía castrista, y hacen esto en nombre de la “revolución socialista”. Ni hablar de su “ex aliado” el mandelista Miguel Rosseto, ex Ministro de Desarrollo Agrario de Lula (que legitimó a las bandas fascistas que masacran en el campo), y último Ministro de Trabajo de Dilma (desde donde se desarrolló el peor ataque y flexibilización que hoy continua el gobierno de Temer). Un último botón de muestra fue el papel nefasto que la ex senadora por el PSOL Heloísa Helena jugó en 2006 cuando los Sin Tierra ocupaban el Palacio del Planalto en Brasilia, los echó diciéndoles que “La Constitución lo prohibía” y que “Nada puede ser hecho más allá de aquello de la legislación en vigor en el país”.

Y a esto es a lo que hoy travisten de “democracia real”. Esta es la vieja “nueva izquierda”, una verdadera cara lavada para continuar aplicando la receta de enfermeros del capitalismo, ahora con candidatos reciclados de los partidos burgueses.
Es decir, el PSOL que todos plantean que es el futuro de la izquierda es una fotocopia desgatada del PT, con sus candidatos burgueses y de los derechos humanos, ocultando al podrido del sistema capitalista en bancarrota diciendo que expandiendo la democracia es posible conseguir ciudades más humanas…

Así va nutriéndose y tomando forma “el Syriza” o “el Podemos” brasilero, entre todos los que en 2013 “No representaron” a nadie hoy se juntan y se sostienen pintando al PSOL como un ala “radical y consecuente” exigiéndolo que no capitule a la derecha y enfrente los ataques, ya la vimos a esta película en Grecia y en España, su final no es feliz ni humano, al final la pagan las masas con desempleo, represión, cárcel y muerte. ¿Y el “anticapitalismo de ruptura radical con el sistema” del PTS-MRT? Una mentira, más que una mentira un verdadero escándalo… la clase obrera brasilera volverá a levantarse y saldará cuentas con sus verdugos; la “nueva izquierda” y todos los colaboracionistas, jamás.