Catalunya- 9 de octubre de 2017 Para que los trabajadores tengamos independencia y no seamos esclavos de la burguesía catalana ni española… Hay que expropiar los bancos y las empresas que se llevan jugosas ganancias a costa del trabajo de los obreros inmigrantes y los trabajadores catalanes Tan solo una semana después del Referéndum y pasados apenas unos pocos días de la huelga general en Catalunya, la gran burguesía “catalana” ha anunciado que traslada su sede a otras ciudades. Grandes bancos y empresas, como CaixaBank, el Banco Sabadell, Gas Natural Fenosa, Seat, Avertis, Catalana Occidente, Codorniu, Freixenet y otras empresas de los sectores más pujantes, como el textil, el químico o las telecomunicaciones han decidido cambiar, o se lo están pensando, su sede social fuera de Catalunya. Hoy esta burguesía se va de Catalunya porque no les conviene a sus bolsillos. La burguesía de los bancos y de las empresas no tiene “patria” ni territorio que defienda, sólo le importan sus negocios. Si hoy trasladar su sede a otras ciudades del estado español le garantiza sus ganancias lo hace. Su única “bandera” son los miles de millones de euros que le robaron a los trabajadores y al pueblo haciéndoles pagar la crisis que ellos habían generado en el 2008 con los bonos basura de las hipotecas. Todavía hoy, después de casi diez años, los trabajadores continúan perdiendo sus viviendas hipotecadas por no poder pagarlas ya que la gran mayoría no llega a un salario de 1.000€. En todo el estado español y también en Catalunya pueden verse los pisos vacíos con sus puertas selladas, lo que significa que una familia fue desahuciada por un banco. ¡Basta! Los trabajadores queremos independencia, pero de todos los patrones. No queremos ser más esclavos ni de la burguesía catalana ni de la españolista. Mientras en Catalunya como en el resto del estado español, la gran mayoría de la clase obrera inmigrante trabaja sin contratos y el resto de los trabajadores lo hace con convenios basura, la burguesía de Sabadell como de Caixabank hacen jugosos negocios junto a la monarquía de los Borbones y el gobierno del PP. Sólo la clase obrera puede garantizar el derecho a la autodeterminación de Catalunya porque es la única que no tiene ningún lazo que la ate a la burguesía. Como ya se ha demostrado, la burguesía y pequeña burguesía catalana de PdeCat y ERC, a los que los “anticapitalistas” independentistas de la CUP apoya, no quieren la independencia o habrían expropiado ya sus bancos, pero no puede jamás la burguesía expropiarse a sí misma. La patronal catalana está utilizando las justas aspiraciones del pueblo como moneda de cambio para una negociación de sus propios intereses. Hace rato que la patronal de Catalunya quiere ganar mayor autonomía política y económica, más parecida a la que tiene el PNV en el País Vasco, que le permite recaudar determinados impuestos que la autonomía catalana no les permite. Para esto no tiene ningún problema en utilizar el genuino reclamo de autodeterminación del pueblo catalán para garantizar mayores ganancias. La clase obrera tiene que expropiar a los expropiadores. Debemos expropiarles los bancos y las fábricas, para garantizar vivienda y trabajo digno. Sólo la clase obrera del estado español y catalana puede llevar hasta el final la lucha contra toda opresión nacional, incluso con la que ejercen los borbones y sus empresas contra otros pueblos oprimidos fuera del Estado Español. No habrá Catalunya libre sin expropiar sin pago y nacionalizar bajo control obrero a los bancos y las transnacionales. Catalunya solo será libre sin los Borbones y sin el Maastricht imperialista. Los trabajadores de Catalunya junto a los del estado español son los únicos que tienen la fuerza para derribar la Monarquía y a los parásitos del capital financiero español, catalán y europeo. El pueblo catalán no tendrá su derecho a decidir si no se acaba con la monarquía de los Borbones. ¡Expropiación, sin pago y bajo control obrero, de todos los bancos para hacer una banca estatal única y darles créditos baratos a los pequeños productores del campo y la ciudad, y devolverles sus viviendas a los trabajadores!