LA BATALLA DE CHILE AL DÍA
18 de noviembre de 2019
Los combates de la “primera línea” a un mes de iniciada la sublevación revolucionaria
En el día de hoy fuimos miles y miles los que ganamos las calles de todo Chile a un mes de aquel 18/10, cuando dimos inicio a nuestro combate revolucionario contra el gobierno de Piñera y el régimen de la Constitución del ’80 y todos los partidos que lo sostuvieron durante décadas, sirvientes del imperialismo.
En Santiago, desde la “primera línea” hemos demostrado que no estamos dispuestos a aceptar esa estafa de “acuerdo por la paz y la nueva Constitución” que nuestros verdugos firmaron para hacernos rendir y que abandonemos las calles.
En la “primera línea” no aceptamos que la sangre derramada por nuestros compañeros sea entregada ni utilizada para sus sucios y espurios acuerdos entre este gobierno asesino, los partidos de este régimen pinochetista y sus sirvientes. Por eso decimos: ¡Queremos la cabeza de Piñera! Esto es lo que sentimos, lo que gritamos, por lo que peleamos y lo que ya comenzamos a rayar en las paredes.
En la jornada de hoy, cientos de nosotros, de la juventud obrera y estudiantil, colmamos la Avenida Vicuña Mackenna, alrededor de la Plaza Italia. Como siempre, los pacos nos estaban esperando, siempre listos esos perros de presa para defender al gobierno de Piñera y al régimen de los explotadores. Los enfrentamos con nuestras barricadas, con los camotes que van consiguiendo otros compañeros, defendiéndonos con escudos, mientras otros compañeros se dedicaban a “cazar” lacrimógenas para apagarlas y que así podamos seguir combatiendo y que los miles que estaban en Plaza Italia pudieran continuar manifestándose.
Los pacos nos tenían preparada una encerrona. Desde el principio del Parque Forestal, estaban concentrados con piquetes, zorrillos y guanacos. Lo mismo sucedía al inicio de Avenida Providencia, en el otro extremo de la Plaza de la Dignidad. En un momento comenzaron a avanzar sincronizadamente desde esos dos puntos y también desde Vicuña Mackenna, tirando perdigones, balines, bombas lacrimógenas con sus escopetas, etc.
Así nos dejaron encerrados. Fue tal la represión que hubo compañeros que se tuvieron que tirar al Río Mapocho que se encuentra aledaño a la Plaza Italia y que está todo contaminado. Pero aun así mucho prefirieron tirarse igual antes que perder algún ojo o caer en manos de los pacos.
¡Basta! ¡Tenemos que fortalecer la “primera línea” para darle su merecido a los pacos asesinos y sacarlos de las calles! ¡Que vengan delegados de los portuarios, los mineros, los obreros de la construcción, la juventud rebelde, la mujer trabajadora a encabezar la “primera línea”!