Chile - 10 de noviembre de 2021
21 de noviembre: nueva trampa electoral del régimen pinochetista
sostenida en la traición de las direcciones de la Mesa de Unidad Social al combate revolucionario de masas
Las burocracias sindicales y estudiantiles y la izquierda colaboracionista cerraron el camino a la Huelga General y nos sometieron a la estafa de la Convención Constituyente, para sacarnos de las calles, salvar a Piñera y dejar intacto al régimen pro-imperialista de la Constitución del ’80.
De la mano de los Boric, los Kast, los Sichel y las Provoste, ahora el imperialismo y la burguesía se alistan para conquistar un recambio ordenado de su gobierno
Los explotadores dirimen quién será el sucesor de Piñera para ocupar el trono de “virrey" en este Chile colonizado por los yanquis
Los trabajadores y explotados no votamos por ninguno de nuestros verdugos:
¡son todos candidatos de Biden, el TLC y Wall Street!
Día a día, el gobierno de Piñera y los partidos patronales nos imponen mayores padecimientos a los trabajadores y explotados, a cuenta del imperialismo. El hambre, la cesantía, la carestía de la vida infernal y la súper-explotación no hacen más que profundizarse. Hay un millón de nuevos obreros cesantes.Millones quedamos sin pensiones porque nos hicieron pagar a los trabajadores y explotados la crisis económica y sanitaria con nuestros propios ahorros previsionales, mientras las transnacionales imperialistas amasan fortunas de su saqueo de nuestras riquezas naturales en este Chile colonizado por los yanquis. Continúan encarcelados 2.500 de los nuestros y el estado asesino se cobra la vida de nuevos mártires de las masas explotadas.
Los de abajo estamos en peores condiciones a cuando nos sublevamos en octubre de 2019 para terminar con 30 años de hambre, esclavitud y saqueo y derrotar al gobierno de Piñera y al régimen pinochetista. Esto es así porque el PC, el Frente Amplio y demás direcciones de las más de 110 organizaciones sindicales, estudiantiles, etc., que conformaron la Mesa de Unidad Social, se encargaron de sacar de escena al movimiento obrero y dividirlo de la juventud rebelde de la “primera línea” y los explotados en lucha. Estas direcciones cerraron el camino a la Huelga General Revolucionaria y entregaron el combate revolucionario de masas para que se impongan la estafa del plebiscito y esa farsa de Convención Constituyente, tal como estipulaba el “Pacto por la Paz y la Nueva Constitución” que sellaron a espaldas del pueblo Piñera, la Derecha pinochetista, la ex Concertación y el Frente Amplio, junto a los “pacos de rojo” del PC, contra la lucha revolucionaria de los de abajo.
Así salvaron al gobierno y al régimen cívico-militar y garantizaron que el imperialismo siga desangrando la nación con los TLC y la expoliación del cobre, con sus negocios custodiados por los milicos pinochetistas y la base militar yanqui de Con Con.
Desde La Moneda, Piñera no hizo más que redoblar su ataque contra las masas, mientras sigue el circo de esos embusteros de la Convención Constituyente, guardianes del TLC. Ya ha quedado claro que con su verso de “democracia” y “libertad”, ese apéndice del régimen pinochetista no fue más que un rodeo para que se vuelva a dormir el Chile que había despertado y que puedan levantar cabeza los fascistas que atacan a los obreros migrantes en Iquique y que Piñera tenga las manos libres para militarizar la Araucanía contra los campesinos pobres de origen étnico mapuche, con los políticos patronales de la Derecha y la Concertación extendiendo el estado de excepción desde el Parlamento.
Es que más y más la burocracia de la Mesa de Unidad Social le ató las manos al movimiento obrero para que no acaudille el combate revolucionario de masas, más y más nos sometieron a la farsa Constituyente, y más y más la burguesía y el gran capital alistan movimientos protofascistas como el de Kast, quien hoy encabeza la encuestas azuzando el de las clases medias desesperadas contra los obreros y campesinos pobres.
Y mientras la Derecha de Piñera y la Concertación se hunden en la intención de voto, los traidores de nuestra lucha revolucionaria, el PC y el Frente Amplio, de la mano de Boric buscan ser los nuevos administradores del régimen pinochetista en un gobierno de colaboración de clases, para con “frases dulzonas” seguir adormeciendo a los explotados y cuidarles su propiedad a los capitalistas, luego de salvar a Piñera.
Más allá de sus diferencias, todos los candidatos, lacayos de los parásitos imperialistas, se organizan para redoblar su ataque contra los explotados y garantizar un mayor saqueo de la nación.
Nos robaron el salario, el trabajo, la educación, la salud, las pensiones, la tierra… y ahora vienen por más.
La única solución para los de abajo:
Retomar el camino de Octubre de 2019
para que triunfe la revolución socialista
¡Sobre los escombros de este maldito régimen cívico-militar hay que imponer un gobierno revolucionario obrero y campesino!
Para avanzar en conquistar salarios y jubilaciones dignas; educación, salud, transporte, vivienda y luz gratuita para el pueblo; terminar con la esclavitud y flexibilización laboral; imponer la reducción de la jornada de trabajo; conseguir la tierra para el campesinado pobre, en su mayoría de origen étnico mapuche, y todas las demandas de los explotados, hay que derrotar a este régimen infame de la Constitución del ’80, a su gobierno asesino y a las casta de oficiales pinochetista con el triunfo de la lucha revolucionaria de masas. Para que el cobre vuelva a manos de los chilenos para que tenga educación el hijo del obrero, para romper con el imperialismo y cada uno de los tratados políticos, económicos y militares con los que EEUU han transformado a Chile en una estrella más de la bandera yanqui, hay que retomar el camino de Octubre para llevarlo a la victoria.
La clase obrera nunca ha faltado a la cita a la hora de combatir al poder de los de arriba, demostrando su enorme poderío y que tiene la llave para que el Chile de los de abajo conquiste la dignidad. Los 200.000 mineros son los que pueden atacar las ganancias de las grandes transnacionales y frenar el saqueo del cobre y demás riquezas de nuestra nación. Los más de 60.000 obreros portuarios son los que paralizando los puertos pueden bloquear el comercio exterior y terminar con la expoliación de los TLC, que significan enormes negocios para el imperialismo y sus sirvientes de la burguesía pinochetista chilena. Los trabajadores bancarios, como lo demostraron encabezando el combate por NO+AFP, son los que tienen en sus manos poder terminar con el saqueo a nuestras pensiones. Ni hablar de los profesores que, en un combate unificado junto al indomable movimiento estudiantil, son los que pueden atacar las ganancias de los empresarios que se hicieron millonarios gracias a la educación privada que paga la clase obrera y el pueblo pobre.
Desplegando estas enormes fuerzas, es el camino para que la clase obrera acaudillea los campesinos pobres y al conjunto de los sectores empobrecidos de la sociedad hacia la victoria.
Desde el proletariado minero, los portuarios, los profesores y los trabajadores bancarios, hay que conquistar un:
Congreso Obrero Nacional con delegados con mandato de base de todo el movimiento obrero, la juventud rebelde y los campesinos pobres, para reabrir el camino a la Huelga General Revolucionaria para echar abajo a Piñera y todo el régimen
¡Fuera los traidores de la burocracia de la CUT, de la Mesa de Unidad Social y todas las direcciones colaboracionistas!
¡Por asambleas de base y comités unitarios de empresa de los trabajadores ocupados, cesantes, inmigrantes, etc. para que se ponga de pie el conjunto de la clase obrera! ¡Que vuelva la juventud rebelde para ir a luchar junto a sus mejores aliados, los trabajadores mineros, portuarios y el conjunto de la clase obrera! ¡Por “primeras líneas” en cada mina, puerto, fábrica y centro de trabajo!
¡Por comités de autodefensa y la milicia obrera y campesina para derrotar a los pacos asesinos, a los generales pinochetistas que nuevamente patrullan las calles de Chile y aplastar a las bandas fascistas. ¡Por comités de soldados rasos que rompan con la oficialidad y se pasen con sus armas a pelear junto al pueblo!
¡Libertad incondicional a los más de 2.500 presos políticos y juicio y castigo a todos los asesinos y represores!
¡Disolución de la casta de oficiales genocida, sirviente de los yanquis! ¡Disolución de los pacos y todas las fuerzas represivas del estado!
Desde la Unión Portuaria y todas las organizaciones obreras combativas, desde la Coordinadora 18 de Octubre, desde las organizaciones de los familiares y amigos de los presos políticos por luchar, desde la ACES y los colectivos secundarios combativos, desde la toma del INDH, desde las asambleas territoriales que han llamado a enfrentar esta farsa electoral, pongamos todas las fuerzas para hacer realidad este Congreso Obrero Nacional.
El 21/11 no podemos votar por los explotadores:
votemos en blanco, anulemos o no votemos
Llamamos a la clase obrera a no votar por ninguno de sus verdugos, que son distintas variantes para profundizar la colonización de Chile y que los de abajo sigamos padeciendo el saqueo y las ganancias de los capitalistas con nuestra sangre, sudor y lágrimas, con nuestros presos y nuestros mártires.
En los distritos donde se presente el “Frente por la unidad de la clase trabajadora”, llamamos a votar a sus listas para diputados,
por ser candidatos de corrientes de la clase obrera
Las corrientes que conforman este frente, como el PTR/PTS, el MST/UIT-CI, etc., así como el MIT/LIT-CI lamentablemente siguen pregonando que la salida para conquistar nuestras demandas, como la libertad de los presos políticos, es presionar para que esa farsa de Constituyente se convierta en “soberana”, como si esto se pudiera lograr sin romper con los TLC y sin desarmar a la casta de oficiales pinochetista. De esta forma, siguen sembrando ilusiones de que se puede “democratizar” esa Constituyente que está para garantizar que se mantenga el Chile colonizado por Wall Street, custodiado por los sables de los generales genocidas. ¡Estas corrientes deben romper con esa Constituyente del TLC, apéndice del régimen pinochetista, y poner sus fuerzas y su campaña electoral al servicio de que la clase obrera pueda desatarse las manos para avanzar en conquistar realmente la unidad, peleando por un Congreso Obrero Nacional para retomar el combate que nos entregaron!
Desde el POI-CI llamamos a un voto de clase al “Frente por la unidad de la clase trabajadora” para diputados, contra los partidos de la patronal y el imperialismo y contra las direcciones de la Mesa de Unidad Social que quieren llevarnos tras el voto a Boric, pero alertamos a la clase obrera que en todo el continente estas corrientes han roto con toda política de independencia de clase y se han dedicado a aplicar una política de “frente democrático” apoyando a sectores de la burguesía que ellos llaman “progresista” en aras de “enfrentar a la derecha”, como con Castillo “contra Fujimori” en Perú, con Petro “contra el uribismo” en Colombia, con Haddad-Lula “contra Bolsonaro” en Brasil, mientras que desde el FIT-U de Argentina, han presentado y votado en común decenas y decenas de leyes con políticos patronales en el Parlamento. No sería sorprendente que en la segunda vuelta estas corrientes terminen apoyando a Boric con la excusa de “enfrentar a Kast”.
¡Con las actuales direcciones de la clase obrera no se puede pelear,
ni mucho menos triunfar!
Por un partido obrero revolucionario, internacionalista
y de combate, bajo las banderas de la IV Internacional
Las direcciones colaboracionistas llevan a cada paso a los trabajadores y explotados a empezar de cero en su combate y en las peores condiciones, como hoy sucede en Chile. Esto mismo hacen en Ecuador, Colombia, EEUU, etc. para desviar todas sublevaciones revolucionarias que protagonizan las masas.
Por eso, el principal llamado que hacemos a la vanguardia de la clase obrera y la juventud rebelde es a pelear junto a nosotros para poner en pie un partido revolucionario en Chile, internacionalista y de combate, que es el que no tuvieron los obreros de los Cordones Industriales en los ’70 para derrotar al stalinismo que los llevó a los pies de la “vía pacífica al socialismo” de Castro y Allende, que allanó el camino para que se imponga la vía sangrienta al golpe militar del chacal Pinochet y el imperialismo.
Un partido revolucionario, que solo se podrá poner en pie bajo las banderas de la IV Internacional y su programa, para pelear por el triunfo de la revolución socialista para, sobre los escombros del estado burgués, imponer el poder de la clase obrera y las masas explotadas, el de la amplia mayoría de la nación, que es del camino del que nos sacaron con esta farsa del proceso Constituyente. Solo un gobierno provisional revolucionario obrero y campesino, basado en los organismos de autoorganización de las masas explotadas, es el único poder que podrá garantizar hasta la más mínima demanda democrática para los explotados porque habrá derrotado a la casta de oficiales pinochetista, desarmado a los pacos asesinos, expulsado a la base militar yanqui de Con Con, etc. Por ello este gobierno obrero y campesino podrá expulsar al imperialismo, expropiando a los banqueros y las transnacionales que expolian el cobre y rompiendo sus tratados políticos, económicos y militares de sumisión de la nación. E inclusive será el único que, contra la estafa de esta Convención Constitucional, podrá garantizar una Asamblea Constituyente revolucionaria, verdaderamente libre y soberana, impuesta sobre los escombros del régimen de la Constitución del ’80, porque no tendrá las bayonetas de los generales pinochetistas apuntando sobre sus cabezas. Solo con las armas en manos del pueblo conquistaremos la independencia nacional, la tierra, la libertad y la dignidad.
Un partido revolucionario bajo las banderas de la IV Internacional, para pelear por unificar el combate de las masas de Chile con sus hermanos de clase de todo el continente. El modelo del “Chile colonia” es el que hoy Biden y los piratas imperialistas yanquis quieren imponer contra la clase obrera y los explotados de toda América Latina. ¡Hay que enfrentarlos en una lucha común de Alaska a Tierra del Fuego!
Tenemos que ponernos de pie junto a los obreros cubanos que padecen la restauración capitalista que impuso el castrismo, entregando la isla al imperialismo, mientras el gobierno de Maduro ylos “boliburgueses" en Venezuela matan de hambre al pueblo y obligaron a millones de explotados a recorrer el continente buscando un lugar donde vivir y comer.
¡Tenemos que pelear por unirnos con la clase obrera norteamericana, que tiene la llave para enfrentar desde adentro al corazón de la bestia imperialista, y con la única que podremos romper con los TLC y conquistar la libertad y la tan ansiada dignidad!
Para que la clase obrera viva, ¡el imperialismo debe morir!
¡Chile será socialista o será colonia de Wall Street!
POI-CI
|