13/01/15
La izquierda de Obama le cubre las espaldas al castrismo cuando éste le entrega la revolución cubana al imperialismo norteamericano.
Festejan el “fin del bloqueo”, cuando ganaron los yanquis y se consumó la restauración en Cuba
¡Son la izquierda de la restauración capitalista!
Los que ayer sostuvieron el pacto Obama-Castro y su política de frente popular internacional, hoy han salido a festejar rabiosamente su triunfo, es decir el reanudamiento de las relaciones diplomáticas Cuba-EEUU. La izquierda apéndice del PCC afirmó “triunfo de la revolución”, “David le ganó a Goliat”, “Obama es débil y se adecúa a la relación de fuerzas”, “el levantamiento del bloqueo es una derrota del imperialismo”, y otras tantas definiciones venenosas destiladas por ejemplo por el PO o el PTS de Argentina contra la conciencia de clase de los trabajadores cubanos, norteamericanos y del mundo. ¡Es una verdadera estafa para sostener por izquierda a los gusanos rojos del PCC que le abren las puertas de Cuba a Wall Street!
Para esto, justifican su política haciendo eje en “la cuestión del bloqueo” utilizándolo como una cortina de humo para esconder el triunfo de los yanquis en Cuba que finalmente terminaron de restaurar el capitalismo de la mano de los Castro y la Iglesia.
Por ello al (supuesto) “bloqueo yanqui” le otorgan un carácter puramente económico, de aislamiento comercial, cuando éste es solo un aspecto de dicha política contrarrevolucionaria que tuvo en un periodo el imperialismo yanqui.
Lo cierto es que por décadas el bloqueo tuvo un solo objetivo: la restauración capitalista en Cuba. El imperialismo yanqui lo utilizó para crear las condiciones para una invasión contrarrevolucionaria directa con los gusanos de Miami que restaure el capitalismo a fuerza de cañoneras, pero las masas cubanas y latinoamericanas no se lo permitieron.
Sin embargo, a su vez el bloqueo imperialista le permitió a la burocracia contrarrevolucionaria con su pseudo teoría reaccionaria del “socialismo en un solo país”, crear las condiciones para asentarse como administraba el estado obrero; y luego de la caída de la URSS en el 89, esa misma burocracia devino en restauradora, agentes directos del imperialismo, asociándose al capital financiero europeo, mientras las masas resistían sin desfallecer la miseria y necesidades durante los 90, cuando Castro les quería hacer creer en el llamado “periodo especial” que un plato de arroz era “el socialismo”.
Lo que ha quedado claro es que el bloqueo imperialista ha cumplido su objetivo, en este sentido ha triunfado. Pero la cuestión, como veremos, no es “el bloqueo” ya caduco hace años puesto que de la mano de los Castro hace décadas que ha penetrado el capital financiero en la isla, sino que los yanquis, la Cargill, Coca Cola y la Caterpiller vuelven a La Habana a quedarse con todos los negocios propinándole un duro golpe contrarrevolucionario a las masas del mundo ¡Y a esta tragedia la izquierda reformista le llama ”triunfo”! Vivimos las consecuencias del verdadero bloqueo que sufrió el pueblo cubano durante décadas: el de los Castro que bloquearon Cuba de la revolución mundial.
Veamos, dice la FT-PTS sobre “el levantamiento del bloqueo”: “en primer lugar, un reconocimiento tardío del fracaso político de la estrategia yanqui de manifiesta hostilidad y bloqueo, que como dice el propio Obama “no ha servido”. En segundo lugar, no se debe a la “buena voluntad” del Papa o de Obama, sino que es subproducto de la necesidad del imperialismo de adaptarse a relaciones de fuerza en la región en las que el papel de Cuba es importante y donde es un factor clave la tenaz resistencia antiimperialista del pueblo cubano y la solidaridad de los pueblos de América latina ante el intervencionismo yanqui.”
Entonces, para la FT, Obama tuvo que levantar el bloqueo ¿porque es débil!? ¿Es débil el imperialismo que gobierna con las cañoneras de centenares de bases militares en el mundo?, el que le tiró toda su crisis al resto del mundo, incluso a las potencias europeas?, el que tuvo las manos libres para parar las revoluciones de Medio Oriente, con un brutal genocidio de la mano de sus lacayos como Al Asad, Putin, Xi Xinping, etc. ¿ese es el imperialismo débil del que habla la FT?
El levantamiento del bloqueo, que no es más que EEUU entrando a Cuba con los bancos, la Cargill, Monsanto, con mercancías para consumo de un prometedor mercado, con la tecnología para quedarse con el sistema de medicina, con las maquilas para explotar mano de obra barata y calificada, con la hotelería de lujo y el turismo para millones de burgueses yanquis, para terminar con la triangulación de operaciones comerciales, y ser directamente ellos los que negocien con Cuba, seguramente desplazando algunos sectores competidores como España o Francia, …todo eso ¿es el reconocimiento tardío del fracaso para Obama porque es débil el imperialismo? Son unos sirvientes del Partido Demócrata y de Castro!
Obama habla del “fracaso del bloqueo” justamente porque es el imperialismo dominante y no va a permitir que los imperialismos europeos se queden con todo el negocio de la restauración capitalista. Los yanquis hace tiempo abandonaron la política de hostilidad militar para la restauración y definió que los Castro son sus agentes para que vuelva Wall Street a la isla. Obama habla de “fracaso” para quedarse con todo porque el bloqueo cumplió su objetivo y en Cuba triunfaron los yanquis: se impuso la restauración capitalista ¡Esto oculta la izquierda de “amigos de La Habana”!
Esta “izquierda de Obama”, que con su posición debería haber apoyado a la restauración capitalista llevada adelante por Yeltsin en la ex URSS o el pacto Nixon-Deng Xiao Ping con el cual se garantizó la restauración capitalista en China, hoy le dice a las masas cubanas y del mundo que el imperialismo yanqui, sus bancos y empresas, pueden llevar el progreso a Cuba y sacarla de la crisis ¡Mentira! El presidente de la Cámara de Comercio de EE.UU. junto al gerente de la Cargill que se reunieron con los Castro a planificar negocios, saqueo y explotación, no traerán ningún “progreso” sino una nueva y brutal colonización de la nación que terminará por imponer peores penurias que bajo la Cuba de Batista.
Por otra parte ¿cuál es la relación de fuerzas a la que se refiere la FT, que lleva a Obama a hacer esa “concesión”? ¿A cuantas acciones llamaron las organizaciones de izquierda para impedir la restauración capitalista en la isla? ¡A ninguna! ¿A cuántos gobiernos boliburgueses denunciaron y enfrentaron, por la estafa de la revolución bolivariana, que le allanó el camino a EEUU para la restauración y a Castro para ser su agente? ¡A ninguno! Por el contrario se dedicaron a mostrar a Obama como el democrático, desviaron cada lucha que rompía con éste y con los gobiernos burgueses de la región, se dedicaron a la conciliación de clases, desde el movimiento de los obreros de Oackland, hasta los indignados de Wall Street, pasando por los trabajadores de Bolivia, llevando a la COB a ser sostén del gobierno de Morales, apoyando a Chávez primero y Maduro luego “contra el fascismo”.
La relación de fuerzas que conquistó Obama para terminar de restaurar el capitalismo en la isla, la conquistó porque reventó todas las revoluciones del siglo XXI en América Latina, e impuso la contrarrevolución en Siria, pero esto no lo podía hacer solo, sino que tuvo la inestimable ayuda de la izquierda reformista, chupamedias de Obama y Castro, para que desincronicen y desviaran cada proceso, que de avanzar, hubiera si, dado vuelta la relación de fuerzas en contra de la restauración.
El PTS llega a plantear que el bloqueo que mantuvo EEUU contra la isla fue para asfixiar a Cuba y sin ruborizarse dice: “pero sus efectos fueron en parte aliviados por el aumento del intercambio y el turismo con los países europeos, China y Sudamérica, tornándose clave el aporte de petróleo barato gracias a la alianza con Venezuela.” ¿O sea que gracias a los gobiernos burgueses expropiadores de la revolución obrera y campesina, se pudo “aliviar” esos efectos? El PTS le da un carácter progresivo no solo al castrismo sino también a los bolivarianos afirmando que con ellos y con las trasnacionales europeas se contrapesó el bloqueo a Cuba ¡El bloqueo imperialista solo podía derrotarse con la revolución socialista internacional! Es por estos servicios prestados que el castrismo los ha condecorado en La Habana por sus “documentales” donde esconden las traiciones de Fidel en los 70.
Para la FT, es secundario que se restaure el capitalismo en la isla, que haya sido un golpe brutal a la clase obrera latinoamericana y mundial la pérdida del estado obrero cubano, porque en definitiva para ellos ”...establecer relaciones comerciales “normales” con la mayor y más cercana economía del mundo es una necesidad objetiva para la pequeña y débil economía cubana,” Para la FT la restauración capitalista es algo normal y hasta progresivo, hablan de que las transnacionales europeas y los bolivarianos atemperaron los daños del bloqueo y todo tipo de loas al capitalismo, pero ni siquiera tienen el tupe de plantear que si es un triunfo el ingreso de Wall Street a La Habana, que los obreros cubanos y latinoamericanos ganen los mismos salarios que los obreros calificados norteamericanos ¡A Igual trabajo igual salario! Claro, no lo dicen porque esta demanda implicaría llamar a poner en pie una lucha revolucionaria continental de la clase obrera.
Estamos ante una corriente abiertamente sostenedora del castrismo que quiere ocultar a como de lugar que en Cuba triunfaron los yanquis porque al bloqueo imperialista se lo rompía con la revolución latinoamericana haciendo de Bolivia, Argentina, Nicaragua, Honduras, Venezuela y EE.UU “nuevas Cubas”, es decir con la revolución socialista internacional.
Lo más grave es que en última instancia, si los reformistas plantean que es un “triunfo de Cuba” el levantamiento del bloqueo imperialista, lo que están afirmando con su programa stalinista es que la independencia nacional de un país semicolonial deviene de la fortaleza del sistema capitalista a su interior. Es decir, para el reformismo si se retrocede en todas las conquistas de la revolución, se retrocede de un gobierno obrero y campesino y de la dictadura del proletariado, así Cuba mantendría y profundizaría su independencia nacional. Son la negación de la teoría programa de la Revolución Permanente que afirma que la clase obrera como caudillo de la nación oprimida, expropiando al imperialismo y la burguesía nativa puede conquistar las demandas democráticas de independencia nacional y la reforma agraria, revolución que solo puede triunfar integra y efectivamente como revolución socialista internacional.
¡Ayer renegados del trotskismo, hoy son los nuevos stalinista!
Es una “izquierda” que le llama “triunfo” a que se abra el capitalismo en Cuba liquidando todas las conquistas de la revolución; es una izquierda que le dice a la clase obrera que puede avanzar en sus demandas destruyendo el socialismo; es una izquierda que festeja que se abrió un proceso de colonización de Cuba , para que vuelva a ser el prostíbulo de los yanquis, donde los obreros mas cultos y calificados quedaran esclavizados en las transnacionales con salarios de 18 dólares, y para que vuelva un régimen de explotación, saqueo y miseria, peor que como viven hoy los obreros chinos bajo la bota de los nuevos mandarines. ¡Eso festejan! ¡A eso le llaman triunfos! Es una izquierda reformista que ha devenido en verdaderos verdugos de la clase obrera y los campesinos pobres. Ya ha quedado claro y los trotskistas no lo ocultaremos.
La izquierda reformista quiere hacer pasar derrota por triunfo y enemigos por aliados del proletariado ¡Este es su objetivo! ¡Han sostenido desde su inicio al castrismo contrarrevolucionario y hoy lo festejan en la restauración! Lo que en realidad están diciendo estos liquidadores y destructores del marxismo, es que la revolución cubana puede dar pasos adelante sin aplicarle derrotas al castrismo restaurador, sin derrotarlo, sin aplastarlo con los métodos de la revolución socialista.
El reformismo siempre planteó que la burocracia stalinista tenía una “doble carácter”, es decir que era una burocracia contrarrevolucionaria, pero “progresiva” frente al imperialismo. Bajo esta teoría el pablismo terminó disolviendo secciones enteras de la IV Internacional en la post guerra en los PC que “enfrentarían al imperialismo”. Los trotskistas afirmamos que la burocracia tiene una sola naturaleza: contrarrevolucionaria.
Son los continuadores del pablismo que terminó por destruir al SWP norteamericano formado por Trotsky y el joven Cannon al que devinieron en una agencia del castrismo al que reivindicaron como “la dirección más revolucionaria luego de la muerte de Lenin y Trotsky”. Jack Barnes y sus aliados liquidaron una conquista estratégica para el proletariado internacional, un partido revolucionario en el corazón de la bestia imperialista.
Hoy estos charlatanes intentan engañar al proletariado queriendo hacer pasar a los Castro como “burócratas”, es decir que “defienden las conquistas de la revolución a su manera”, a los que ni siquiera llaman a derrotar con los métodos de la guerra civil. Hacen peripecias para justificar su bancarrota y sometimiento a la burguesía. Lo que ha quedado a las claras es que estos destructores de la IV Internacional, nunca estuvieron por el triunfo de la revolución política en los ex estados obreros, siempre fueron sostenedores del stalinismo, del castrismo y hoy lo son del capitalismo.
Si no fuera una tragedia para todo el movimiento obrero, causaría gracia, que aun desde la FT, llamen a defender las conquistas de la revolución cubana, cuando ya de estas no queda nada, siguen hablando de revolución política cuando ya se ha reestablecido la propiedad privada, se ha terminado con el monopolio del comercio exterior y la economía planificada y donde los Castro y funcionarios de la vieja burocracia se reciclaron en burguesía.
Lamentablemente para el proletariado, en Cuba se cumplió la premisa trotskista que la IV Internacional definió para la URSS “El pronóstico político tiene un carecer alternativo: o la burocracia se transforma cada vez más en órgano de la burguesía mundial dentro del Estado Obrero, derriba las nuevas formas de propiedad y vuelve el país al capitalismo; o la clase obrera aplasta a la burocracia y abre el camino hacia el socialismo.” Programa de Transición 1938.
Así como todos estos años callaron y silenciaron la restauración, han borrado de su lenguaje la revolución socialista para América Latina, EEUU y Cuba en particular.
Los renegados del trotskismo han devenido en “verdugos” de la clase obrera porque hace décadas trabajaron engañando al sector más combativo del proletariado mundial para que se termine de imponer la restauración capitalista. ¡Se han declarado enemigos del programa de transición trotskista y la teoría programa de la revolución permanente!
Los destructores del trotskismo deben dar muchas explicaciones ante la historia ¡No quedaran impunes sus traiciones! ¡Fuera sus manos de la IV Internacional!
Se vuelve urgente un reagrupamiento internacional de las fuerzas del socialismo revolucionario y las organizaciones obreras internacionalistas que levantemos un programa para aplastar la restauración capitalista en Cuba.
Pato, del Comité Redactor de Democracia Obrera