A través del Ministerio de Trabajo, el gobierno de la Kirchner ha lanzado un plan de “blanqueo” de trabajadores no registrados, o sea que trabajan en negro sin ningún tipo de derecho laboral y social (vacaciones pagas, aguinaldo, jubilación, convenio colectivo de trabajo, etc.). Es un plan que sólo alcanzará según los objetivos planteados a unos 650 mil trabajadores de ahora a 2016. Estamos frente a un cinismo sin límites de la burguesía. El Ministerio de Trabajo y la podrida burocracia sindical saben donde están cada uno de los trabajadores que está en negro, haciendo los peores trabajadores en la industria, en la construcción y en el campo… ¡y llevan frondosas y minuciosas estadísticas sobre ello!
Según Tomada, el Ministro de Trabajo, al finalizar este plan habrá todavía un ¡30% de trabajadores no registrados! Y eso sin tener en cuenta a los nuevos jóvenes que se incorporarán al mercado de trabajo hasta el 2016.
Pero lo más cínico del plan es que le permite a la patronal esclavista bajar sus costos laborales, permitiéndole contratar nueva fuerza de trabajo sin pagar las cargas patronales, y a los que blanqueen la situación de algunos de sus trabajadores se las exime de pagar esas cargas durante todo el período anterior. Los principales beneficiaros serán las medianas y pequeñas empresas, o se la burguesía rastrera de la sustitución de importaciones que está imbricada en los negocios con las grandes transnacionales.
En Argentina casi la mitad de la fuerza de trabajo compuesta por 13 millones de obreros está “en negro”, es decir sin ningún derecho laboral. Sólo un poco más del 30% de la clase obrera se encuentra sindicalizada. El resto está como contratado o bajo tercerizaciones.
¡Basta de esclavitud laboral! ¡Basta de trabajo en negro y contratos basura! ¡Ni un desocupado más y trabajo digno para todos en base al reparto de las horas de trabajo entre todas las manos disponibles!  ¡Salario mínimo vital y móvil de $12000! ¡Todos a planta permanente y bajo convenio colectivo  de trabajo!