Ha concluido la gira de Obama. Ese carnicero imperialista estuvo en Cuba y Argentina para asentar el control de EE.UU. en su “patio trasero” latinoamericano. En momentos en que se desarrolla un nuevo crac de la economía mundial por la crisis china y se achican los mercados y negocios para los piratas imperialistas, los yanquis buscan fortalecer su dominio exclusivo en la región para profundizar su ofensiva contrarrevolucionaria en todo el planeta. Por ello Obama también vino para asegurarse que no quede ni rastro de la revolución obrera y socialista que recorrió el continente a fines del Siglo XX y principios del XXI.

Una vez que el Foro Social Mundial y los “bolivarianos” jugaron su rol de expropiar y abortar la revolución latinoamericana, ha llegado el representante de los piratas de Wall Street a terminar de poner las cosas en su lugar luego de la “anormalidad” que significaron los combates revolucionarios de las masas de Argentina, Bolivia, Ecuador, etc. que pusieron en cuestión el dominio imperialista en toda la región
Los “bolivarianos” y el FSM garantizaron que “América sea para los (norte) americanos”… con el pacto Obama-Castro entregaron Cuba, la resistencia colombiana y todos los procesos revolucionarios del continente… y hoy son los “bolivarianos” los que aplican a rajatabla los planes del imperialismo en la región.
La estafa de la “Revolución Bolivariana” de los Castro, Chávez, Morales, Lula, Kirchner, etc. no fue más que un rodeo para terminar imponiendo el ALCA de Bush en todo el continente… incluida Cuba. Por eso la primer escala de Obama fue La Habana, donde los hermanos Castro y los nuevos ricos del PCC lo recibieron con honores, luego de entregar Cuba a la restauración capitalista, sobre los huesos del proletariado cubano que deberá ir a trabajar por 18 dólares a las maquilas que se instalarán en la zona franca de puerto Mariel. Luego de esto, Obama arribó a Argentina.

Las direcciones del movimiento obrero, de los campesinos pobres y estudiantes combativos del continente impidieron presentarle batalla a esta gira de Obama. Estas son las burocracias sindicales y los partidos estalinistas y de los renegados del trotskismo que se han dedicado a presentarle a las masas como “democrático” al mayor  asesino y genocida de los pueblos oprimidos del mundo. Por eso se negaron a organizar una lucha continental y han permitido que pise nuestras tierras el masacrador de las masas sirias, el comandante del ejército yanqui que asesina, persigue y encarcela a cuenta de las grandes trasnacionales a los explotados en el mundo con sus bases militares y cárceles clandestinas regadas por el globo.

En Argentina, los burócratas sindicales han asistido a la cena de gala ofrecida a la comitiva de Obama y los representantes de las trasnacionales que saquean el mundo y aquellas corrientes de izquierda como las que integran el FIT, que influencian a los sectores más combativos de la clase obrera, los explotados y la juventud se negaron a conquistar las condiciones para imponer un plan de lucha contra la llegada de Obama. Se limitaron a llamar a una movilización el día 23 a la embajada yanqui y sólo enviaron pequeñas delegaciones. Y el 24 de marzo, a 40 años del golpe militar videlista, realizaron una movilización y acto conmemorativo en la Plaza de Mayo, a los pies de una política de “frente democrático” en busca de políticos patronales “progresistas” contra los “reaccionarios”, en la vereda de enfrente de una política de clase, con los métodos del movimiento obrero, llamando a una jornada de lucha con piquetes, paros y acciones de combate en las calles.

Los trotskistas de Democracia Obrera en la Argentina y de toda la FLTI en el continente americano, llamamamos a que las organizaciones de masas y antimperialistas tomen en sus manos la lucha por que el carnicero Obama no pise ni Cuba, ni Argentina junto a los verdaderos aliados de los explotados latinoamericanos, la clase obrera norteamericana y con los métodos de la clase obrera: los paros, los piquetes y la huelga general. Hicimos esta moción a los sectores más combativos de los trabajadores del continente como los mineros de Huanuni en Bolivia, a los heroicos obreros de SIDOR en Venezuela, a la juventud y trabajadores chilenos, a los trabajadores colombianos y brasileros.
En Argentina participamos de la movilización del 24 de marzo, a 40 años del golpe militar videlista y contra la presencia de Obama, denunciando a ese genocida de las masas sirias y levantando en alto estas banderas de lucha. Porque era obligación de toda organización y corriente que se reivindique de la clase obrera y antiimperialista enfrentar la llegada de Obama, no sólo al suelo argentino, sino a la tierra de la revolución cubana del ´59 por la cual generaciones enteras de los explotados latinoamericanos dieron sus vidas, entre ellos los 30.000 compañeros desaparecidos.

Las direcciones que tiene la clase obrera a su frente impidieron que los trabajadores, campesinos pobres y explotados del continente enfrenten esta gira del carnicero Obama. Pero esta lucha continúa. Obama se fue pero quedan todas las transnacionales yanquis que junto al resto de las potencias imperialistas saquean nuestras naciones y con sus gobiernos y regímenes cipayos nos imponen los peores planes de hambre, miseria y súper-explotación.
Hoy más que nunca:¡Fuera yanquis de América Latina! ¡Abajo la restauración capitalista en Cuba! Hay que seguir el camino que marcan los obreros de Sidor en Venezuela contra la estafa de los “bolivarianos”: “No creemos en socialistas de Hummer, ni en comunistas de Rolex. Creemos en la revolución de los trabajadores”
Nuestros mejores aliados siguen en pie de lucha: los obreros norteamericanos que pelean por salario de 15 dólares la hora y contra las masacres a la juventud obrera negra. Junto a ellos nuestro grito debe ser: ¡Para que la clase obrera viva, el imperialismo debe morir! Por ello los trotskistas de la FLTI afirmamos contra los Castro que dicen que “ya no es posible una Cuba socialista ni siquiera en Cuba”, que la lucha por la revolución socialista está más vigente que nunca en momentos en que más este sistema capitalista imperialista muestra toda su putrefacción. ¡La revolución latinoamericana debe volver a ponerse de pie y triunfar en las calles de Washinton y Nueva York contra ese 1% de parásitos de Wall Street!

Comité Redactor