El régimen de los nuevos mandarines chinos quiere aterrorizar a los estudiantes en lucha de la Universidad de Pekín
A fines de diciembre de 2018 un grupo de estudiantes se encontraban manifestándose en la Universidad de Pekín contra la toma del campus Sociedad Marxista por parte de la Asociación de estudiantes de los empresarios rojos del PC. Los estudiantes que se encontraban protestando contra ello fueron rápidamente abordados por la policía y llevados a un aula donde se los obligó a mirar una serie de videos.
Estos videos consistían en confesiones forzadas de cuatro de los estudiantes que fueron detenidos durante la lucha de Jasic. Luego de meses y meses sin conocer siquiera el paradero de los jóvenes, sin que pudieran verlos ni sus familiares ni siquiera abogados, aparecieron estos vídeos en donde de repente los estudiantes confiesan estar “trabajando para fuerzas extranjeras” y que su accionar es “ilegal”, precisamente las acusaciones que larga el régimen contra ellos.
Estos videos de confesiones forzadas no son más que el producto de extensas jornadas de tortura y aislamiento, y los quieren utilizar para amedrentar a los estudiantes y quebrar su espíritu de lucha.
El Grupo de Apoyo y Solidaridad con los trabajadores de Jasic emitió un comunicado mediante el cual desconocen estos dichos de los estudiantes, que claramente fueron coercionados para hacerlo.
¡La lucha de los trabajadores y de los estudiantes chinos no puede quedar en el olvido y seguir acallada! ¡La clase obrera internacional debe acudir en su ayuda! En primer lugar los trabajadores de EEUU a quienes se intenta inficionar con la mentira de que su gran enemigo es la superexplotada clase obrera china que los deja sin trabajo. Una vil mentira. Los obreros esclavizados de China entregan su sangre y sus músculos a la voracidad de las transnacionales, que son las mismas que explotan a los trabajadores de EEUU. ¡Ellos, los imperialistas son el verdadero enemigo! Con la campaña de odio contra los trabajadores chinos solo buscan generar base social que apoye futuros ataques contra ellos. ¡No podemos permitirlo!
La clase obrera de EEUU debe gritar: ¡El enemigo está en casa! ¡Viva el combate de los trabajadores y los jóvenes rebeldes chinos! |