Al frente de las fuerzas de Rusia en el cerco a Aleppo estaba Kadyrov, el mismo que comandó la operación genocida de Putin contra el pueblo checheno
El régimen de Putin se caracteriza por revivir algunas de las tradiciones medievales de Rusia... el alcoholismo, abusos, violencia doméstica, clericalismo. Las razones son muchas. "Nuestros" reaccionarios rusos ("cuellos rojos") están convencidos de que la justicia en el mundo no se puede alcanzar, que "los derechos son de los más fuertes". Por lo tanto justifica la guerra sucia contra el pueblo de Siria, apoya regímenes como el de Assad, sólo porque es beneficioso para el imperialismo ruso.
Y también, en tal lógica reaccionaria está ausente la relación de causa-efecto. Los putinistas aplauden el bombardeo en Siria, pero al mismo tiempo se enfurecen cuando los rebeldes sirios matan a un piloto criminal de guerra.
Por cierto, un ejemplo clásico de orden medieval es el poder ilimitado de Kadyrov, el protegido de Putin en Chechenia. Los bandidos de Kadyrov son responsables del apaleamiento y asesinato a muchas mujeres... violaciones y otros.
Al "ejército" de Kadyrov, el régimen de Putin recientemente lo envió al Aleppo oriental ocupado como "policía militar rusa".
Stokman
