Italia, Puglia 11 de agosto de 2018
16 jornaleros africanos muertos en una semana…
¡La patronal y el gobierno
son los responsables!
¡Viva la huelga de las “gorras rojas”,
contra la esclavitud!
¡Así se lucha!
En la región italiana de Puglia, en apenas 48 horas dos accidentes mortales ocurrieron cobrándose la vida de 16 jornaleros africanos.
El domingo pasado cientos de trabajadores se reunieron en asamblea y junto a la Unión Sindical de Base decidieran llamar a una huelga de 48 horas tras el accidente en donde murieron 4 jornaleros.
Pero el lunes sucedió nuevamente otro accidente en donde murieron 12 jornaleros que iban a trabajar hacinados en una camioneta, sin ningún tipo de seguridad, ni siquiera una ventana por donde entrara el aire.
Estos trabajadores que huyen del hambre y de las guerras que el imperialismo provoca, llegan a Europa y son tratados como esclavos.
En Puglia hay alrededor de 170 mil trabajadores temporales trabajando, de los cuales un poco más de 40 mil son migrantes. La mayoría de todos los jornaleros trabajan en negro, por salarios miserables y sin ningún tipo de protección. Inclusive duermen en tiendas en los mismos campos después de jornadas extenuantes de 12 horas.
Estos esclavos modernos que cobran no más de 30€ al día, deben inclusive pagarse el transporte, la comida y el agua que consumen durante su jornada laboral.
Uno de los jornaleros declaró que en una de las furgonetas habían quitado las dos ruedas de repuesto y en el hueco habían colocado una silla, soldada mal y atada con un alambre, para que entre una persona más.
Es por eso que cientos de jornaleros realizaron una huelga con manifestación este pasado jueves
Así lo describía Aboubakar Soumahoro, sindicalista del Unión Sindical de Base (USB): "A lo largo de la mañana cruzaremos los campos hasta llegar a la Prefectura de Foggia. Llevaremos puestas nuestras gorras rojas para decir basta a la explotación. Para repetir que antes que los negocios están las personas".
El comunicado de USB, donde se anuncia la huelga, comienza diciendo: “Será la marcha de gorras rojas, como las que los 4 jornaleros muertos el sábado llevaban para protegerse del sol mientras se rompían la espalda para recoger tomates por la vergonzosa paga de un euro por quintal”.
Los jornaleros no se olvidan de Soumayla Sacko, un joven jornalero maliense que fue asesinado el pasado 2 de junio por luchar por los derechos de los migrantes africanos. Uno de ellos decía: “Ésta es nuestra batalla, la protección de los trabajadores y la reivindicación de sus derechos, negados en Puglia como en Calabria, Piamonte o Lacio. Por éstos combatía Soumaila Sacko, asesinado el 2 de junio, y peleaban los compañeros, organizándose para escapar de la esclavitud y el hostigamiento”.
La muerte de 16 jornaleros en apenas 48 horas no fue un accidente, es un asesinato.
Son centenares de miles los migrantes que intentan llegar a Europa. Miles de ellos no lo logran y hoy riegan con su sangre el mar Mediterráneo. Los que logran llegar son encerrados en campos de concentración, como los más de 60.000 que el gobierno de Syriza tiene encarcelados en Grecia.
Otros miles son vendidos como esclavos al Maastricht imperialista. Ellos son la clase obrera europea, tratada como animales en el campo mientras cientos de miles de ellos no tienen ni la posibilidad de trabajar para darle de comer a su familia.
Las pandillas imperialistas y los terratenientes italianos utilizan a estos trabajadores migrantes para hacer los peores trabajos. Si los necesitan los dejan entrar a Europa y si no, los dejan sepultados en la tumba del mar Mediterráneo.
Inclusive cuando mueren los tratan peor que a animales. Así lo decían los jornaleros que denunciaban que recibieron un trato denigrante después de los accidentes, que los cuerpos de sus compañeros muertos estuvieron abandonados durante horas en el asfalto, cubiertos con una sábana blanca, y los heridos tardaron horas en recibir atención médica.
El mismo ministro de Agricultura, Gian Marco Centinaio, declaró en una entrevista televisada que “existe la esclavitud en Italia”. La hipocresía del gobierno no tiene límites, continuaba el Ministro: “Existe una cadena de explotación de la mano de obra que debemos combatir".
¡Ellos son los que garantizan esa cadena de explotación!
¡Son las empresas imperialistas y los terratenientes italianos los esclavistas!
¡No son muertes, son asesinatos!
Los trabajadores lo saben y por eso denuncian la esclavitud a la que los están sometiendo y responsabilizan al gobierno y a la patronal por la muerte de sus compañeros.
¡Con huelgas y manifestaciones, así se lucha!
¡Que la CGIL siga el ejemplo de la Unión Sindical de Base y convoque ya a una huelga general
¡Que se abran las fronteras! ¡Trabajo, vida digna, papeles y derechos para todos! ¡A igual trabajo, igual salario, en toda Europa y al otro lado del Mediterráneo, en el África martirizada y saqueada!
¡Que los sindicatos y organizaciones obreras afilien a los migrantes y refugiados como miembros de honor, para que puedan pelear juntos a sus hermanos de clase en Europa y en todo el mundo!
¡Comités de migrantes en todos los sindicatos!
Para que todos puedan trabajar: ¡reparto de las horas de trabajo sin rebaja salarial! Un turno más en todas las fábricas para que los miles de desocupados y trabajadores migrantes entren a trabajar.
¡Abajo el Maastricht imperialista!
Democracia Obrera - Estado Español
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