Francia - 13 de septiembre de 2017
Una vez más la clase obrera y la juventud explotada ganaron las calles en Francia para enfrentar al gobierno y la “Ley de Trabajo” de destrucción de las conquistas obreras…
Pese a la división de los sindicatos, decenas de miles paralizaron la producción en todo el país y se movilizaron en grandiosas manifestaciones…
¡La clase obrera francesa demuestra que las fuerzas para luchar por sus conquistas no están agotadas!
¡Abajo la reforma laboral!
¡Hay que retomar la lucha del año pasado y volver al camino del Mayo del 68!
¡Este es el camino que deben seguir los trabajadores del mundo para parar los ataques del imperialismo, sus gobiernos y regímenes!
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Con nuestros comités de base y de lucha, con las asambleas en todos los lugares de trabajo, escuelas y plazas para decidir los pasos del combate… ¡Hay que volver a poner en pie los organismos de autoorganización de la clase obrera y de los explotados! ¡Ya es más que hora de que en Francia vuelva a tronar el grito de VIVA LA COMUNA!
En este 12/09 más de 400.000 personas se movilizaron en todo el país para luchar contra la Ley El Khomri y las nuevas medidas de Macron que profundizan aún más el quite de las conquistas históricas de la clase obrera francesa. En una huelga general que paralizó todo el servicio de trenes del país, diversos sectores de los trabajadores del estado, de la salud, educación, y miles de empresas, los trabajadores demostraron que no están dispuestos a aceptar ver todas sus conquistas ser destrozadas.
En París, una manifestación con 60 mil personas tomó las calles, con la juventud rebelde en la cabecera de la marcha y con obreros y obreras de todos los sectores, incluso con columnas de trabajadores de los sindicatos que no habían ni llamado a la huelga ni a la movilización, como ForceOuvrière (Fuerza Obrera, NdT.), sobrepasando a sus direcciones y adhiriendo a la lucha. Eso es un enorme ejemplo de la voluntad de lucha y la fuerza de los trabajadores y explotados de Francia, que en mayo de 2016 llevaron adelante una gigantesca lucha, que tendía unificarse con el movimiento de refugiados en Europa y que llegó a las puertas de un nuevo Mayo del 68, lucha que fue entregada en las mesas de negociación por la burocracia sindical y por la “izquierda anticapitalista” desde sus aparatos sindicales, diciendo a las masas movilizadas que “eso era todo lo que se podía hacer…”.
Queda claro que la clase obrera de Francia, a pesar y en contra de las direcciones que tiene a su frente, quiere luchar y sobran las fuerzas para eso. Es que saben que, sin una lucha determinada contra el gobierno, el régimen y contra los patrones no es posible conquistar nada, y ni siquiera defender sus conquistas históricas.
Este ataque a la clase obrera francesa fue y es un ataque a toda la clase obrera mundial. Los imperialistas franceses, hoy con Macron como representante de sus intereses, declararon una brutal guerra de clases a los explotados, arrancándoles las 35 horas semanales, el derecho a la huelga y a la movilización, los convenios colectivos de trabajo… destruyendo las conquistas históricas de los trabajadores, y este ataque viene siendo generalizado a toda la clase obrera del mundo.
Se demuestra que el camino para parar los ataques de la burguesía, sus gobiernos y regímenes es el de la unidad internacional de la clase obrera.
Por no haber triunfado contra el gobierno de Hollande y la Ley el Khomri en 2016, a pesar de que los explotados habían desplegado enormes fuerzas en el combate, pero que terminaron desviadas por traición de la burocracia sindical y de la izquierda “anticapitalista” que sometió la lucha de la clase obrera a las mesas de negociación con el gobierno y la patronal, este plan de la burguesía imperialista se ha generalizado y viene siendo impuesto en los cinco continentes… la destrucción de los derechos más mínimos de los trabajadores, el ataque a las conquistas obreras, incluso a sus organizaciones de lucha, es un plan del imperialismo a nivel internacional, y lo debe imponer en todo el planeta para que, tirando la crisis en las espaldas de los explotados del mundo, las distintas pandillas imperialistas puedan salir a disputarse el mercado mundial, con la clase obrera trabajando en condiciones infernales, desde las colonias y semicolonias hasta los países imperialistas.
El imperialismo aún intenta imponer este ataque… pero la última palabra no está dicha, y la huelga general y las grandes manifestaciones de este 12 de septiembre demuestran eso.
¡Este es el camino! ¡Y no solamente para la clase obrera francesa, sino para todo el proletariado mundial, que debe apoyar y espejarse en la lucha de los explotados franceses como un punto de apoyo para luchar también contra las “reformas laborales” y el quite de conquistas y ataques a que viene sufriendo la clase obrera en todo el mundo!
La jornada del 12/09 en Francia debe ser un peldaño para una lucha internacional contra el ataque del imperialismo… ya queda claro que la burguesía declaró la guerra a los explotados en cada rincón del mundo… Desde los países coloniales y semicoloniales triplemente explotados por el imperialismo, hasta la clase obrera de las metrópolis que ven sus condiciones de vida todos los días decaer.
¡Hay que decir basta! ¡Hay que volver a la lucha de 2016, que tomó las plazas, que puso en pie organismos de autoorganización, con asambleas de democracia directa, comités de lucha y con el grito de que REVIVA LA COMUNA!, marcando el único camino posible para derrotar el ataque de los capitalistas, que es el de la revolución, expropiando a los expropiadores y llamando a todos sus hermanos de clase de Europa y del mundo a marchar juntos contra este sistema podrido, que no puede asegurar ni siquiera lo mínimo a sus esclavos.
Este grito debe ser un grito de todos los trabajadores del mundo, y un llamado a la unidad internacional contra la burguesía imperialista, que, si ataca a su propia clase obrera con tamaña saña, va imponer la peor de las miserias y barbarie en los países que oprime.
Es una responsabilidad de la clase obrera de los países imperialistas levantar el grito de “EL ENEMIGO ESTÁ EN CASA!” y luchando contra su propio imperialismo va a demostrar el camino para sus hermanos de clase del mundo!
¡LA LUCHA DE LA CLASE OBRERA FRANCESA DEBE EXTENDERSE, DESARROLLARSE Y TRIUNFAR!
¡Ninguna confianza en la dirección sindical que nos quiere llevar nuevamente a una lucha de presión a Macron luego de darle un año de tregua a los patrones para que recompusieran su régimen! Debemos continuar el camino iniciado en 2016 y profundizarlo, para esta vez sí derrotar al gobierno. ¡Es preciso poner en pie los organismos de autoorganización y autodeterminación de masas, desde las bases, en las fábricas, escuelas y lugares de trabajo, para terminar la lucha que empezamos frente el ataque despiadado de los carniceros imperialistas de la Vta República francesa!
¡La clase obrera y la juventud explotada de Francia demuestran una vez más que tienen las fuerzas y la disposición para el combate! ¡Lo que ellos merecen es una dirección y un programa para triunfar a la altura de la lucha que está planteada!
¡Viva el combate de los explotados franceses! ¡Abajo la reforma laboral!
¡Abajo la Vta República imperialista, el gobierno de Macron y todos sus sostenedores!
¡Que viva la democracia directa y que se desarrollen los organismos de autodeterminación de las masas!
¡Que este combate sea un punto de apoyo a la clase obrera mundial en la guerra de clases declarada por la burguesía y el imperialismo!
¡PASO A LA UNIDAD INTERNACIONAL DE LA CLASE OBRERA!
Una misma clase, un mismo enemigo… ¡UNA MISMA LUCHA!
¡QUE REVIVA LA COMUNA!
Corresponsal