Reproducimos la declaración del Colectivo de inmigrantes La Chapelle Debout de Francia frente a la masacre de inmigrantes de Melilla en junio pasado
10 de julio de 2022
Aâtini l'visa *o pasaporte…
de donde yo quiera a todos lados
Queremos en primer lugar rendir homenaje a todos los que murieron el 24 de junio o en el hospital a causa de sus heridas, 70 personas, una cifra estimada no por las autoridades o las ONG, sino por migrantes que intentaron pasar y lo consiguieron, o por sus familiares aquí.
En este edificio sin ir más lejos hay dos personas que conocen a una decena de personas muertas ese día o a consecuencia de sus heridas.
Homenaje a ellos y a todos los que no han llegado, aquí o a otro lugar.
Es también para ellos que hemos organizado este evento y nos gustaría agradecer a todas las personas que, aquí, en Marruecos o en otros lugares, trabajan para devolverles la dignidad. En particular, queremos darle las gracias a Mustafa por todo lo que ha hecho.
Los hechos son conocidos, pasemos a los discursos: son importantes porque permiten los hechos y legitiman su repetición.
Hemos leído y visto publicaciones de periódicos, hemos mirado los sitios web de partidos políticos franceses, hemos escuchado las declaraciones de los gobiernos.
- Marruecos dice haber tenido que rechazar una guerrilla organizada y violenta, orquestada por mafias, en particular sudanesas. Acusa a Argelia de haber trabajado en secreto en una operación de desestabilización
- El primer ministro español declara por su parte que los únicos responsables son las «mafias que trafican seres humanos».
- Ambos se enorgullecen de la eficaz colaboración de la policía marroquí y española contra un ataque a la policía para los primeros, a la integridad del territorio español para los segundos.
- La ONU y las ONG se esconden tras exigencias de investigación imparcial y no cuestionan las respuestas de las autoridades, sino su «desproporción».
- En Francia, no hubo ninguna reacción política salvo por parte de los fachos y de organizaciones humanitarias y de defensa de los derechos como la Cimade, Migreurop o la ATMF.
Mientras tanto, en Rabat, migrantes y marroquíes protestan ante el HCR (Alto Comisionado para los Refugiados, organismo de la ONU, NdT), 2000 personas en Madrid, o incluso en Vigo, Barcelona y Melilla, mientras que antes de ayer, 150 personas en París marchaban a la embajada de Marruecos.
Las diferencias de cifras reflejan las diferencias de sensibilidad hacia la igualdad de derechos, la lucha contra el racismo y la negrofobia.
En 2015, algunos se contentaban con decir «migrantes welcome», mientras que otros se manifestaban por millares y abrían gimnasios.
Una prueba más de que hoy la extrema derecha no ha ganado sólo en el Parlamento.
Por el silencio, la indiferencia o la decisión de no hablar, los pueblos y las organizaciones son cómplices de los asesinos y del hecho de que esas muertes no existan.
Esto es lo que hace posible que aún hoy los cuerpos se pudran en las morgues y que otros hayan sido enterrados a toda prisa para esconderlos sin haber podido ser identificados.
Algunas personas heridas fueron evacuadas, para ser dispersadas y ocultadas en hospitales a cientos de kilómetros, como en Benimellal - 600 kilómetros de Nador- o en Kelaat Sraghna -800 kilómetros.
“Si realmente estás muerto, te dejaremos en el hospital, si solo estás herido, estás en la calle”.
Ellas no se atreven a hablar ni a contar lo que ha pasado.
Estas muertes, aquí y allá, son números, nunca tienen nombre, ni identidad, ni historia. La estadística anónima y ciega es una expresión y una herramienta entre otras del racismo. En Francia, el reconocimiento político de las víctimas de crímenes policiales ha pasado por el hecho de devolverles un nombre y una identidad: Wissam El Yamni, Gaye Camara, Amine Bentounsi ...
Por lo tanto, nos negamos a deplorar un drama, ya que es la palabra empleada tanto por el Ministro español como por Le Monde o Le Figaro.
Nos negamos a hacer del 24 de junio una tragedia excepcional cuando la vida cotidiana de los inmigrantes en las cercanías de Ceuta y Melilla es la cacería, las razzias, las redadas, los asesinatos y la humillación.
Al menos 81 personas murieron en Nador el año pasado en las rejas o ahogadas.
Cerca de 2.000 personas murieron en 2021 al intentar cruzar el Mediterráneo, y desde 2015 los botes de rescate han sido reemplazados por aviones y drones de alerta que localizan las embarcaciones para el conteo de las autoridades libias.
En Grecia, la policía constituye por la fuerza milicias de solicitantes de asilo para cazar y golpear a otros migrantes.
En Calais, en noviembre de 2021, 27 personas morían tratando de cruzar el Canal de la Mancha.
Desde 2007, la UE ha pagado 270 millones de euros a Marruecos, mientras que este mes de junio los países europeos se han puesto de acuerdo sobre las grandes líneas del Pacto Europeo sobre Inmigración y Asilo: el filtrado y la clasificación en las fronteras entre los que dependerían del asilo y los demás.
Se trata de un asesinato masivo racista organizado, planificado y repetido. Se trata de una política de asesinato por homicidio o abandono (dejar morir).
El único sistema mafioso capaz de organizar total, legal o ilegalmente, financiera, material y jurídicamente el paso o la inmovilidad de unos y otros se llama «Frontex», «Unión Europea», «Makhzen».
A través del trato diferencial entre personas de nacionalidad y categorías administrativas diferentes, entre ricos y pobres, uno de sus objetivos es romper la solidaridad entre los inmigrantes.
Frente a esto, elogiamos a los saltadores y destructores de rejas, a los y las que han tomado la ruta de Melilla, que como dicen es "la de los que no tienen dinero".
Elogiamos a las 65 personas que serán juzgadas en los próximos días por «entrada ilegal en suelo marroquí», «violencia contra agentes de la fuerza pública», «concentración armada», «negativa a obedecer», y «participación en una banda delictiva con el fin de organizar y facilitar la inmigración clandestina en el extranjero».
Después de haber sido objeto de intentos de asesinato, son víctimas de represión política.
Partir para alimentar a su familia, a su pueblo, a causa de la guerra y de los problemas, y para vivir, es un acto de valentía que sólo merece el respeto y el reconocimiento de la dignidad y de los derechos. Por eso hemos abierto este lugar y organizado este encuentro, para organizarnos de manera durable.
En torno a este suceso vimos a marroquíes encontrarse al lado de sudaneses contra la monarquía, vimos a españoles oponerse a su policía junto a cameruneses, y aquí a los mauritanos luchar con los franceses.
Este tipo de sucesos separa y acerca a personas de color, idioma, situación administrativa, o estatus social diferente.
Para todas ellas, para nosotros, aquí, como en Rabat, en Jartum, en Madrid o en Gaza, se trata de construir barricadas en lugar de muros.
De aquí a que se obtenga la igualdad total y, por tanto, la libertad de circular y de instalarse, queremos visados, pasaportes, documentos para todos y todas.
*”dame” en darija, título de la anción de Abdelaziz Stati, Aâtini l'visa |