En enero de 2014, frente al plan de la patronal de la fábrica de neumáticos Goodyear que buscaba cerrar la planta de Amiens, los obreros respondieron con una huelga en defensa de sus puestos de trabajo y tomando la fábrica, no dejando entrar ni salir a nadie. Pese a esta enorme lucha de los trabajadores, la planta cerró dejando al rededor de 1150 empleados en la calle. 1150 familias destruidas, donde se cuentan incluso varios suicidios. 1150 obreros que fueron a engrosar las filas de los desocupados que actualmente no pueden encontrar otro empleo que no sea bajo contratos basura de pocos meses de duración.
Ahora, el pasado 12 de enero la justicia de los piratas imperialistas condenó a 9 meses de prisión firme (24 meses en total) a 8 de esos trabajadores de Amiens, acusados de “secuestrar” a dos directivos durante la huelga de 2014. ¡Esto es una infamia! Los únicos secuestradores son los patrones. ¡Ellos secuestraron el sustento de 1150 familias, ellos secuestraron nuestro trabajo y NUESTRA FÁBRICA! ¡Los obreros somos los que la hacemos producir, somos sus verdaderos dueños! ¡Y los parásitos que viven a costa de nuestro trabajo la secuestraron y la cerraron! Lo único que hicieron los trabajadores fue defender legítimamente su fuente de trabajo, el pan de sus hijos. |
|
La justicia patronal busca con esta condena escarmentar a todo el movimiento obrero para que no salgan a la lucha frente al descomunal ataque que vienen sufriendo. Y si la condena se hace efectiva probablemente irán luego por los trabajadores de Air France que el año pasado también salieron a la lucha contra los despidos. ¡No podemos permitirlo! ¡Si tocan a uno, nos tocan a todos! ¡Ningún obrero preso ni procesado por luchar! ¡Hay que parar semejante ataque de la patronal y su justicia! ¡Primero nos exprimen hasta la última gota de sudor, luego nos echan como perros y encima ahora nos meten presos! ¡Basta!
|
En Francia, como en toda Europa, la burguesía imperialista y su gobierno vienen desde hace rato descargando sobre los trabajadores un brutal ataque, haciéndoles pagar los costos de la crisis que no deja de profundizarse, como lo demuestra el crack chino. En los últimos años en el país galo se suprimieron centenares de miles de empleos en el sector público y privado. Y el gobierno de Hollande con su declaración del "estado de emergencia económica" acaba de anunciar que va a redoblar este ataque con recortes de presupuestos y más flexibilización laboral, liquidando definitivamente la conquista de las 35hs con la ley Macron. En particular en la rama del neumático, las transnacionales (francesas, yanquis como Goodyear y demás) impusieron decenas de miles de despidos y suspensiones, relocalización y cierres de plantas y salarios miserables para sus trabajadores durante el 2015. Y el ataque se profundizará este año. Por ejemplo Michelin ya anunció el cierre de tres de sus plantas en Europa durante el 2016. |
Para esto fueron los autoatentados en Paris el 13 de noviembre, para militarizar todo el país, pasar así todos los ataques contra la clase obrera, en particular contra la de origen magrebí a la que reprimen salvajemente y ahora deportan a mansalva (incluso a los que tienen hace años la ciudadanía), y para bombardear Siria en interés de los negocios de sus transnacionales. Inventando que el "enemigo es el ISIS", ¡es el imperialismo francés el que ataca a las masas en Siria a los bombazos y en Francia con despidos , cárcel y represión! Y cuanto más bombardea Siria y más profundiza su invasión a Mali, más blinda su régimen en Francia y ataca a su propia clase obrera. La suerte del proletariado francés está atada a la del Norte de África y Medio Oriente. Por eso el grito debe ser ¡EL ENEMIGO ESTÁ EN CASA! ¡Hay que parar la maquinaria de guerra francesa que ataca por tierra en Mali y por aire en Siria! Ese es el camino para defender a los trabajadores de Goodyear y parar el ataque sobre el proletariado francés, es decir a los que producen las riquezas mientras los parásitos capitalistas hacen jugosas ganancias con sus guerras. Hay que ponerse en pie de lucha para parar los despidos, y conquistar en primer lugar la libertad incondicional y el desprocesamiento de los 8 trabajadores de Goodyear y de todos los procesados por luchar como los luchadores de la campaña Boicot Desinversión Sanciones a Israel (BDS) que serán llevados a juicio por luchar por la causa palestina. Hay que arrancar de la cárcel a Georges Abdallah y a los presos independentistas vascos que cada gobierno de turno mantiene como rehenes desde hace décadas.
Todos los trabajadores de Francia deben tomar ya mismo esta bandera.
La CGT (de la cual los condenados de Goodyear son activistas) ya juntó 150.000 firmas en solidaridad con los 8 compañeros y llama a una reunión para el 4 de febrero. ¡En esa reunión tiene que votarse y organizarse el paro general ya en todo el país junto a los docentes, los estatales, y demás sectores en lucha que enfrentan el estado de emergencia! La enorme solidaridad con los obreros de Goodyear y el paro del 26 de enero demuestran que hay condiciones para hacerlo. Lamentablemente ni la CGT, ni FO, ni Solidaires pusieron la absolución de los compañeros como demanda del paro del 26. ¡No perdamos un minuto más! ¡No perdamos la oportunidad del 4 de febrero! ¡Los sindicatos, las organizaciones obreras, las corrientes que hablan en nombre de los trabajadores deben allí llamar al paro y a un plan de lucha para conquistar la absolución de los 8 compañeros, parar la masacre en Siria! Y ese es el camino para empezar a conquistar todas nuestras demandas.
¡Ni un despido, ni un cierre de planta más! ¡Trabajo para todos, en primer lugar para los inmigrantes! ¡Basta de deportaciones!
¡Absolución de los 8 trabajadores de Goodyear! ¡Libertad a Adballah y los presos vascos!
¡Desprocesamiento de los militantes BDS y de todos los procesados por luchar!
¡Abajo el estado de emergencia y la militarización de Francia!
¡Boicot a la maquinaria de guerra francesa para parar el bombardeo a Siria! ¡Por el retiro de todas las tropas de Mali y Centroáfrica!
Corresponsal |