El nuevo gobierno de Nueva Democracia de Grecia continúa y profundiza el ataque a los refugiados y espacios tomados y autogestionados en el barrio de Exarchia. El día 26-08 mandó a su policía asesina y desalojó tres edificios que habían sido tomados por colectivos anarquistas y de la juventud combativa solidaria para alojar refugiados.
Hay que pararle la mano al gobierno de Nueva Democracia que viene por toda Exarchia y a profundizar el ataque contra los refugiados y el conjunto de los trabajadores y la juventud rebelde griega
El pasado lunes (26-08) el gobierno de Nueva Democracia (ND) envió a su policía asesina a Exarchia, Atenas, para desalojar edificios que habían sido tomados para alojar refugiados. Es que los refugiados viven en las peores condiciones de miseria en campos de concentración o directamente en la calle. Los anarquistas y jóvenes solidarios, nucleados más que nada en el barrio de Exarchia, tomaron lugares abandonados para darle alojamiento. De la misma manera, en este barrio, funcionan muchos centros sociales y políticos tomados por distintos colectivos anarquistas, anti-autoritarios y en general de oposición al gobierno y al régimen.
El gobierno recientemente asumido de ND anunció en su campaña que iba a terminar con los espacios tomados en Exarchia. El nuevo Primer Ministro, Mitsotakis, declaró que su objetivo era tomarse un café en la plaza de Exarchia antes que termine su mandato. Pocos días antes de los dos meses de asumir, con un enorme despliegue de la fuerzas policiales de represión, lanzó los primeros desalojos a los lugares tomados, donde se alojaban refugiados, Spirou Trikoupi 17, Transito 15, Gare y Rosa de Foc.
En esta última redada más de 140 personas de los que se alojaban en esas ocupaciones, incluidas familias enteras, con niños pequeños, fueron detenidos. Los refugiados que no tenían permiso de residencia en Grecia fueron trasladados a los infames centros de detención, para de allí ser deportados, y todos los demás fueron llevados de vuelta a los campos de concentración, verdaderos ghettos, en las afueras de Atenas.
Así, el gobierno comenzó su plan represivo, profundizando el ataque que ya había empezado el gobierno anterior, el de la izquierda basura de Syriza, contra los refugiados, pero también contra el conjunto de la clase obrera griega contra las condiciones de vida de la clase obrera, con la imposición de los planes de la Troika, los infames “planes de austeridad”.
En este país los trabajadores y explotados han demostrado una enorme solidaridad para con los refugiados que llegaban a sus costas, escapando de masacres contrarrevolucionarias como en Siria, o de la miseria y de la guerra como en toda África.
La clase obrera griega, los refugiados y la juventud combativa dieron mil y un combates contra los ataques de los sucesivos gobiernos, con los que, ya desde 2008, vienen descargando la enorme crisis económica sobre los hombros de los trabajadores. Protagonizaron enormes sublevaciones, huelgas generales con combate en las calles y estuvieron a punto de tomarse el parlamento. Pero por traición de sus direcciones -como el Partido Comunista (KKE) que dirige los sindicatos y llegó al extremo de apalear a los manifestantes para defender el parlamento que votaba un nuevo ataque a los trabajadores- no pudieron avanzar en esta lucha. Hoy, cuando se acaba la farsa de Syriza y vuelve el gobierno de Nueva Democracia, el ataque a los refugiados se profundiza. Todavía siguen presos decenas de jóvenes anarquistas por luchar contra la Troika y a favor de los refugiados. El gobierno de Nueva Democracia busca que no quede ni rastro de esa enorme sublevación y combate que se desatara en 2008.
Como respuesta a este ataque, la juventud combativa y los grupos y colectivos anarquistas hicieron una movilización el día 28-08 que terminó en un enfrentamiento con la policía antimotines. Tres personas fueron detenidas y hubieron decenas de heridos por la violenta represión. A su vez, el movimiento anarquista ha organizado la autodefensa del resto de sus locales, centros tomados y otros espacios donde alojan a los refugiados que siguen habiendo en Exarchia.
¡No se puede permitir que este gobierno avance en su ataque!
¡Hay que volver a soldar la unidad de las filas obreras y de los explotados! Es necesario que los explotados, los de abajo, se unifiquen en un gran combate contra este gobierno, que no es menos lacayo de la Troika como lo fue Syriza. ¡Hay que pararle la mano a su ataque a los centros ocupados en Exarchia y sus planes de miseria para los explotados! ¡Libertad a todos los presos políticos!
¡Abajo Mitsotákis y el gobierno de Nueva Democracia!
¡Fuera la Troika y el Maastricht imperialista!
¡Hay que desmantelar los infames campos de concentración y que los refugiados tengan vivienda y trabajos dignos! ¡Hay que parar ya mismo las deportaciones! ¡Papeles para todos ya!
¡UNA MISMA CLASE, UNA MISMA LUCHA CONTRA LOS MISMOS ENEMIGOS!
Corresponsal |
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