En el homenaje a León Trotsky también se expresaron las voces de sectores en lucha de la clase obrera latinoamericana que buscan un camino al internacionalismo militante.
Sin dudas, estos jalones de internacionalismo se hacen carne en los obreros avanzados -jalones del programa revolucionario por el cual lucharon Trotsky y los fundadores de la IV Internacional- se han conquistado a pesar y en contra de sus direcciones que a cada momento intentan arrodillar a los trabajadores ante la burguesía.
El grupo “Comuneros” de Colombia, simpatizante de la FLTI, aportó su visión remarcando el carácter antiimperialista del combate de la clase obrera latinoamericana.
Dirigentes de la agrupación “Generando Movimiento” de México, conformada por obreros de la GM de Silao en ese país, hablaron de la lucha contra la burocracia obrera que vienen dando allí, por unificarse con los obreros en el continente, en particular con los que pelean hoy en el corazón de la bestia imperialista yanqui.
La LSTI de Bolivia aportó las lecciones de la lucha revolucionaria de la clase obrera boliviana que hemos sacado los trotskistas, desde 1952 a la actualidad, resaltando particularmente el combate contra el frente popular que le abre las puertas al fascismo, tal como se ve hoy en Bolivia.
La clase obrera del continente necesita el programa del trotskismo para triunfar. Solo la IV Internacional ha planteado el camino para unir las fuerzas de la clase obrera desde Alaska a Tierra del Fuego contra Wall Street y las burguesías latinoamericanas.
Sin dudas, el mejor homenaje que se les puede rendir al camarada Trotsky y los fundadores de la IV internacional es que el internacionalismo militante por cuya continuidad dieron su vida hoy se haga carne en los obreros avanzados de América Latina.

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