Columna de Abu Muad - 29 de diciembre de 2019
La segunda oportunidad de las masas de Medio Oriente para conquistar el pan
¡Los actuales levantamientos en Túnez, Jordania, Irán, Líbano, Irak, Sudán no pueden quedar aislados!
Los trabajadores del mundo vemos esperanzados los nuevos levantamientos por el hambre que sacuden, cual cimbronazo, a la burguesía imperialistas y sus lacayos en Francia, Irán, Sudán, Jordania, Líbano, Irak y Túnez nuevamente. Son bocanadas de aire fresco para las heroicas masas sirias que resisten a pesar de todas las traiciones, bombazos, masacres y hambrunas. ¡Allí se levantan sus aliados!
En Túnez, los trabajadores se vuelven a levantar por el pan y casi en la misma fecha que en 2011. La miseria, la falta de trabajo y la corrupción que se vive en ese país del Magreb africano llevó a que nuevamente se inmole un trabajador prendiéndose fuego. ¡Qué grande ese genio que escribió alguna vez un librito titulado "La revolución permanente"! En este caso podríamos decir que no solo es permanente sino redundante, porque se trata de las mismas causas, los mismos motivos, la misma metodología de protesta. ¡Es el sueño del que alguna vez que lo intentó no triunfó; que se le vuelva a dar la oportunidad frente a sus ojos para poder actuar de mejor manera frente a la situación que en un pasado no pudo resolver! Hoy eso es Túnez... pero también eso es Irán y Francia.
Hay norteamericanos que se dicen de izquierda que afirman a todo viento que "en Sudán lo que motiva a la gente a las calles es el hambre, pero lo que los mantiene en las calles es la libertad"... como si se tratara de una “revolución democrática” únicamente. Ocultan, una vez más, el verdadero carácter de la revolución que comenzó y plantean que la lucha es solo por democracia. Son como la “Nueva Izquierda”… que todos tienen el viejo manual. Ellos quieren volver a embarrar de calumnias y sangre a los trabajadores que se levantan hoy contra este sistema, el cual solo pueda traer más y más muerte, mientras sacan provecho y hacen jugosos negocios de la guerra. ¡No podemos dejar que eso suceda!
La revolución sigue viva en cada rincón donde los trabajadores y los explotados combaten para no morir de hambre. Es fundamental enfrentar y desenmascarar el cerco que esta “Nueva Izquierda” impuso sobre la revolución siria para que las masas del mundo no caigan en esa misma trampa tendida por esta izquierda. ¡Los explotados que hoy se levantan en todo Medio Oriente no pueden quedar cercados como lo fue la revolución siria! De los trabajadores del mundo depense sacarse de encima a sus opresores, pero de los revolucionarios socialistas depende aportar un granito de arena para que se saquen de encima primero a quienes los traicionan.
Abu Muad