Trabajadores iraníes persas y árabes enfrentan juntos
al régimen teocrático de los ayatollahs
Mientras los ayatollahs siguen viviendo como reyes, le arrojan toda la crisis a los trabajadores, con inflación, devaluación, carestía de la vida, despidos, trabajos precarizados y hasta meses que los trabajadores no reciben sus salarios.
El coronavirus ya se ha cobrado la vida de más de 12 mil personas, y ahora hay una segunda ola de infecciones y muertes, que se han más que triplicado desde principios de mayo a más de 200 por día y el sistema de salud colapsó. Por eso, la cuarentena continúa, pero sin trabajo y sin comida, lo cual hace la situación ya insostenible para los explotados.
Ante esta situación, decenas de miles los trabajadores de distintos sectores de todo Irán, como municipales, camioneros, azucareros y también campesinos arruinados, salen a pelear con huelgas, piquetes y movilizaciones.
Asimismo, miles de trabajadores de salud realizaron marchas al ministerio por sus bajos salarios, contra los contratos precarios de empleos temporarios y contra las pésimas condiciones en las que están los centros médicos, que les significa un alto riesgo de posibilidad de contagio del coronavirus.
Por su parte, más de 3.000 trabajadores de la Compañía de Carbón Kerman realizaron huelgas y piquetes intermitentes en tres sitios: Ravar, Kuhbanan y Zarand, ya que el gobierno quiere vender las acciones de la empresa estatal a sectores privados, poniendo en riesgo los puestos de trabajo. Además de la lucha contra la privatización, exigían aumento de salarios, medidas de seguridad y el fin de los contratos precarios.
En todo el país son millares y millares de trabajadores los que han salido al combate. Luchan por cobrar sus salarios adeudados desde hace meses, tanto en las empresas estatales como en las privadas. Pelean contra las privatizaciones de las empresas estatales y por la libertad de los presos, desafiando a la dictadura asesina de la teocracia iraní, la cual no hace más que enriquecerse.
En esta pelea están juntos los trabajadores persas, árabes, lors, fars y de todas las minorías que se encuentran dentro de Irán. Es que las condiciones de hambre y miseria no se aguantan más ya en ninguna parte. Por eso las huelgas, piquetes y movilizaciones son ya generalizados en todo Irán.
¡Una misma clase, una misma lucha de Teheran a Ahwaz!
¡Que caiga el régimen infame de clérigos millonarios!
De Irán a Líbano, Siria, Palestina e Irak: ¡Una misma intifada contra un mismo enemigo: el imperialismo y todos los regímenes asesinos de los opresores de Medio Oriente!
Comité redactor del periódico La Verdad de los Oprimidos