Desde Rusia, Andrey Sedov, corresponsal de “El Organizador Obrero Internacional”
¡De pie junto al levantamiento de las masas de Kazajistán!
El levantamiento en Kazajstán tiene un marcado carácter de clase y fue provocado por la dificilísima situación de la clase obrera, a la cual la mafia estalinista-capitalista gobernante de Nazarbayev le viene robando con aumento de la edad de jubilación, aumento explosivo de los precios, bajos salarios y un régimen policial muy brutal. Los trabajadores de Kazajstán, sin embargo, tienen un carácter más combativo que en los estados vecinos de la antigua "Unión" estalinista y tienen experiencia en la lucha contra el régimen (Zhanaozen 2011).
Putin y sus secuaces de la OTSC (Organización del Tratado de la Seguridad Colectiva) le tienen mucho miedo a tales estallidos de ira espontánea de los oprimidos, por lo que la intervención se produjo de inmediato. El Terror Blanco, y posiblemente la anexión de ciertas partes de Kazajstán, son ahora las principales amenazas para las masas allí.
Por supuesto, muchos burros pseudoizquierdistas y estalinistas-centurionegristas como Zyuganov (el partido "comunista" oficial de la Federación Rusa) están diciendo tonterías, llamando al levantamiento una "conspiración" de los imperialistas. Esto es una completa tontería, ya que el régimen de Nazarbayev es uno de los más proimperialistas de Asia Central. Organizaciones de izquierda, como cliffistas, grantistas y anarquistas, apoyaron el levantamiento y realizaron acciones individuales de solidaridad, lo que significó que terminaran todos detenidos.
Sin embargo, creo que ha habido un salto cualitativo en la lucha de clases en el espacio de la antigua URSS. El colapso del régimen mafioso de 30 años en Kazajstán es un indicio de lo que depara el futuro para todos los regímenes similares.
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