Kazajistán - 12 de abril de 2023
¡Los trabajadores petroleros de Zhanaozen vuelven a la lucha tras despidos y sitian el edificio del Ministerio de Energía en la capital del país, Astana!
Unos 150 petroleros despedidos de Berali Mangistau Company, una empresa contratista de servicios petroleros de Zhanaozen, se reunieron en la capital, cerca del edificio del Ministerio de Energía de Kazajstán, exigiendo que se les dé un trabajo estable. Los trabajadores despedidos de la empresa exigen recuperar sus puestos de trabajo y aseguraban que permanecerían en el edificio hasta que el problema se resuelva por completo.
“El 1 de abril, nos quedamos sin trabajo. Fuimos obligados a venir aquí. Una vez cada dos años, se lleva a cabo una licitación y este año nuestra empresa perdió. También queremos vivir como trabajadores petroleros, tener un trabajo estable y recibir un salario estable. Yo mismo soy perforador, el trabajo es duro, tiene un efecto muy negativo en la salud”, manifestó uno de los participantes de la huelga.
Luego de que Berali Mangistau Company perdió la licitación, y los trabajadores quedaron en la calle, la empresa que resultó ganadora les ofrecía incorporarlos, pero con un salario muy inferior.
La semana pasada, decenas de mujeres en Zhanaozen ya habían realizado una protesta exigiendo trabajos permanentes para sus hijos y esposos, mientras que cientos de ex empleados de la industria petrolera se reunieron frente a las oficinas de OzenMunaiGaz para exigir empleo.
La policía de la capital dispersó este 11 de abril a los manifestantes que viajaban a la capital desde la región occidental y se llevaron al menos 80 trabajadores detenidos.
La ira por esa represión se extendió rápidamente en Mangystau, la provincia de origen de los trabajadores en lucha. Los trabajadores de varias compañías petroleras declararon enseguida huelgas en respuesta y se llevaron a cabo marchas espontáneas en la ciudad de Aktau y en la localidad de Zhanaozen. En Zhanaozen, un gran número de habitantes se reunieron frente al ayuntamiento para pedir la liberación de los trabajadores detenidos en Astana.
Luego de que los manifestantes se negaran a abandonar la plaza frente al Ministerio de Energía en el segundo día de su manifestación, policías encapuchados con uniforme negro rodearon el área y un representante de la oficina del fiscal llegó para ordenar a los presentes que se dispersaran o enfrentarían las consecuencias de romper la ley de reuniones públicas.
Pocas horas después del enfrentamiento en el edificio del Ministerio de Energía, dos dirigentes de los manifestantes, Zholmurat Ulykpanov y Nursultan Nurumuly, aparecieron en un llamamiento en video para decir que casi todos los manifestantes estaban regresando a Mangystau y aseguraron que cinco representantes de su grupo se quedarían en Astana para negociar con el Ministerio de Energía y la compañía estatal de petróleo y gas KazMunaiGaz sobre cómo resolver el conflicto.
Mientras tanto, KazMunaiGaz emitió un comunicado para decir que los empleados en huelga en tres de sus empresas subsidiarias, UzenMunaiGaz, UzenMunai Service y Burgylau, habían regresado a sus estaciones de trabajo.
Sin embargo, los manifestantes en Aktau y Zhanaozen se negaban a dispersarse hasta recibir la confirmación definitiva de que la policía había liberado a los trabajadores petroleros detenidos.
Una tenaz y aguerrida clase obrera que fue masacrada por Putin
La ciudad de Zhanaozen ya había sido centro de las manifestaciones y de una verdadera situación insurreccional, con los trabajadores petroleros a la cabeza de los combates que sacudieron Kazajistán en el mes de enero de 2022, frente a un tarifazo criminal en los precios del combustible. Este hecho encendió las praderas, y los combates se extendieron por todas las ciudades como reguero de pólvora, llegando a una verdadera huelga general revolucionaria entre el 4 y el 5 de enero del pasado año. Las oficinas gubernamentales, el Parlamento Nacional eran atacados. Los trabajadores se armaban en enfrentamientos con la policía. Los trabajadores kazajos, hartos de vivir en la miseria mientras los pulpos petroleros imperialistas como la BP y la Exxon saquean sus riquezas, salían a la lucha en fenomenales combates.
La burguesía y el imperialismo temblaron ante la perspectiva que comenzaban a andar los trabajadores kazajos, retomando el camino revolucionario que los llevó, bajo la dirección de la III Internacional revolucionaria y el Partido Bolchevique a la toma del poder en 1917, haciendo rodar la cabeza del zar.
Es por eso que presuroso fue Putin, el gendarme del imperialismo, a ahogar en sangre ese enorme levantamiento, con sus tropas asesinas masacrando a centenares de explotados. Otros cientos fueron detenidos, procesados, torturados. Se trató de un verdadero aplastamiento a sangre y fuego, como los que Putin acostumbra dirigir contra los trabajadores. Putin es un raro “antiimperialista” que siempre ha apuntado sus tanques, misiles y bombas contra la clase obrera y nunca contra un solo interés del imperialismo.
Putler y sus pandillas CSTO organizaron una verdadera intervención y masacre en Kazajistáb, su ensayo para la invasión de Ucrania. Pisando Kazajistán y aplastando a la clase obrera kazaja preparó el carnicero su invasión a Ucrania.
Hoy, los petroleros kazajos, enfrentando a las petroleras imperialistas que saquean la nación y hunden al pueblo en la miseria, volvieron a la lucha…
Un nuevo frente se abre contra Putin
¡Los trabajadores kazajos son hermanos de los trabajadores y de Ucrania que mueren bajo las botas de Putin y son saqueados por el imperialismo que amasa fortunas con la sangre y el hambre del pueblo ucraniano!
¡Los obreros petroleros de Zhanaozen son hermanos de los trabajadores rusos que se niegan a morir en la guerra de Putin!
¡Una misma clase, los mismos enemigos, una misma lucha!
La clase obrera de Eurasia y Rusia debe volver por lo suyo, a recuperar su revolución que entregara el stalinismo a la burguesía y el imperialismo. |