Medio Oriente - 6 de abril de 2024

El estado sionista bombardea la embajada iraní en Siria

La cobardía y el servilismo de los ayatollahs al desnudo

El pasado martes 2 de abril, el sionismo bombardeó la embajada iraní en Damasco, capital de Siria. Este no es el primer ataque sionista sobre las posiciones iraníes en ese país. Esta es la manera en la cual el imperialismo yanqui le viene haciendo saber a los ayatollahs que se acerca el fin de su participación en los negocios en Siria, que obtuvo como resultado de su rol contrarrevolucionario allí. EEUU los quiere fuera de Siria, reducir su parte de los negocios que se quedaron en Medio Oriente y que vuelva el sionismo como gran dispositivo contrarrevolucionario en la región.
Es que la Guardia Iraní viene de cumplir una gran labor contrarrevolucionaria masacrando en Siria, sosteniendo el protectorado yanqui en Irak y aplastando a su propio pueblo cuando se sublevó en los últimos años dejando miles de muertos y de presos políticos, muchos de ellos condenados a muerte y ya ejecutados.
Los ayatollahs pusieron todas sus fuerzas para ahogar en sangre los procesos revolucionarios en la región. Pero no han hecho ni un solo disparo contra el sionismo al que dicen enfrentar. Ni una sola acción por las masas palestinas a las que dicen apoyar, ni siquiera cuando estas están bajo un ataque genocida del estado de Israel.
Aún después del reciente bombardeo sionista a la embajada iraní no hubo ni una sola respuesta por parte de los ayatollahs. No dispararon una sola salva. La frontera del Golán sigue tan firme como siempre, resguardada tanto por ellos como por Al Assad y Putin. No han hecho nada por Gaza cuando está siendo arrasada por el ocupante sionista.
Es que la teocracia iraní se encuentra cercando a las masas de Gaza, como lo está haciendo toda la burguesía árabe, en primer lugar la OLP y Hezbollah. Gaza resiste sola. Han impedido que entren a combatir el conjunto de las masas palestinas que están en Cisjordania, Líbano, Jordania, etc. Ni hablar del resto de Medio Oriente. Solo la nación yemení se encuentra combatiendo junto a las masas de Gaza.
La teocracia iraní ha demostrado ser “valiente” para masacrar en Siria y a su propio pueblo, y cobarde para enfrentar al sionismo, porque, a pesar de su verborragia “antiimperialista”, su Guardia no es más que un ejército contrarrevolucionario a cuenta del imperialismo.