El odiado régimen fujimorista viene de celebrar el triunfo de las elecciones de mediados del año pasado, en el que vistieron de gala al régimen fujimorista todos los agentes del imperialismo, desde la “fascista” Keiko Fujimori, el “democrático Kuczynski”, hasta la “progresista” Verónica Mendoza.
El fraude electoral fue posible por la política de colaboración de clases de la Confederación General de Trabajadores del Perú (CGTP, dirigida por el estalinismo de Patria Roja y el Partido Comunista de Perú), que contuvo y desvió la lucha de los explotados de las regiones del Perú profundo e impidió su coordinación y centralización con los duros combates en la capital del país, lo que hubiera significado la caída del gobierno de Humala, el estallido del régimen fujimorista y el inicio de la revolución peruana.
Es que en Octubre de 2015 se sublevaban los explotados como en Cajamarca contra el proyecto Conga, estallaba en noviembre del mismo año la gran huelga nacional de los mineros con las barricadas y bloqueos en la región Madre de Dios. En enero y junio de 2015, en la ciudad de Lima, los trabajadores no se cansaban de enfrentar con huelgas heroicas los planes privatistas, salarios de hambre y despidos masivos que imponía el gobierno y sus Leyes anti obreras como la Ley Pulpin o la Ley Servir de flexibilización laboral que fueran derrotadas por la juventud explotada con masivas movilizaciones. En septiembre de 2016 irrumpe la sublevación de los campesinos pobres y explotados de Islay - Arequipa que derramó su sangre luchando contra el saqueo de las transnacionales imperialistas.
Sin embargo, por medio de pactos y mesas de negociación la CGTP iba entregando cada una de las enormes luchas, impidiendo que la pelea de los explotados de las regiones se sincronice con la capital Lima y los explotados irrumpan en un combate generalizado. Ese ha sido el rol fundamental de la burocracia colaboracionista que, a base traiciones a los trabajadores, impuso la “paz social” para salvarle la vida al gobierno lacayo del imperialismo de Ollanta Humala y le diera tiempo a la burguesía para un recambio ordenado.
El Frente Amplio de Verónica Mendoza: el “ala izquierda” del régimen fujimorista antiobrero tutelado por el imperialismo
Luego de entregar las luchas de los explotados, la burocracias de la CGTP salió a legitimar aquel fraude electoral llamando a los trabajadores a votar por Verónica Mendoza del Frente Amplio en la primera vuelta en la que salió tercera en las votaciones, quedando para la segunda vuelta (“ballotage”) dos agentes directos del imperialismo y las transnacionales: Pablo Kuczynski o Keiko Fujimori. Días antes de la segunda vuelta se realizó una marcha contra el odiado régimen fujimorista, y la misma burocracia de la CGTP puso a Verónica Mendoza a la cabeza de la misma y juntos llamaron a votar por el “mal menor” es decir por uno de los verdugos de la clase obrera, Kuczynski en aras de defender la “democracia” contra la “fascista” Keiko. Una vez más, la traición de la burocracia colaboracionista de la CGTP le salvó la vida al odiado régimen fujimorista.
Es así que la CGTP puso a los trabajadores a los pies de la burguesía, representada por Verónica Mendoza. Aquella fue congresista el 2011 del partido de Ollanta Humala, que mientras era parte del congreso fue votando varios planes anti-obreros, por ejemplo: votó a favor del ingreso de tropas norteamericanas al Perú (donde actualmente permanecen más de 3200 marines yanquis), así también votó a favor de la ley universitaria que elimina de raíz la autonomía universitaria y da pie al autofinanciamiento estudiantil vía créditos bancarios y tasas educativas y promueve el despido de miles de docentes mayores de 70 años.
Para pintarse de “opositora”, Verónica Mendoza había “roto” con el gobierno el 2012 cuando, como parte de la lucha contra las transnacionales mineras y sus proyectos de saqueo, los trabajadores y campesinos de Cajamarca se levantan hartos de la contaminación de las tierras, en duros enfrentamientos con los perros de presa de la policía de Humala asesinan a dos manifestantes y dejan más de 20 heridos. Así Verónica Mendoza se lava las manos y posa de pelear junto a los trabajadores, para luego ser parte del Frente Amplio.
Ya en 2016 se postularon para las elecciones presidenciales que dieron como resultado que el Frente Amplio logre 20 congresistas de los 130 en total y el partido que gobierna de Pablo Kuczynski tenga 17 siendo mayoría los congresistas de Keiko, es así que el Frente Amplio continua legitimando el régimen fujimorista y lo sostiene por “izquierda”, ya que entre todos los congresistas, discuten cómo imponer los planes de súper explotación y saqueo de la nación. El Frente Amplio resulta entonces de un engaño para las masas con la mentira de que es posible lograr alguna conquista en el parlamento mediante sus 20 congresistas y en los marcos del régimen fuji-monstesinista de la archirreaccionaria constitución del 93. Parte del programa que levanta el Frente Amplio, es “contribuir a la democratización de la sociedad, de la economía y del sistema político en todo el Perú”, es decir “democratizar” al régimen fujimorista.
Nada puede quedar por fuera del régimen infame fujimorista…
Los pequeños grupos de renegados del trotskismo son parte del Frente Amplio, y ahora el PC y Patria Roja ponen de pie al interior del Frente el Movimiento Nuevo Perú
A fines del año pasado se pone en pie el frente Movimiento Nuevo Perú que está dentro del Frente Amplio a la cabeza de Verónica Mendoza con su programa: “…para fortalecer el Frente Amplio política, social, electoral y legalmente…forjar poder popular frente al bloque neoliberal dominante…” es así que Verónica Mendoza plantea que se tiene que democratizar más el Frente Amplio, y para eso se prepara también una alianza con el estalinismo. Así se preparan para intervenir en las elecciones regionales y municipales el 7 de octubre de 2018 y para las presidenciales del 2021. Ahora Verónica Mendoza hace campaña para recaudar firmas para “legalizar” su frente junto al Partido Comunista del Perú y Patria Roja.
A este movimiento es que se apuestan todas sus fichas los partidos comunistas peruanos, y es la manera en que estos partidos traidores de la clase obrera se reciclan, luego de estar con la política del Foro Social Mundial, hoy vuelven a reeditar a “Mariátegui latinoamericanista” y los “intelectuales” del Frente Amplio rescatan las enseñanzas de Gramsci.
Nadie de la “izquierda” queda afuera de esta política de colaboración de clases y sostén del régimen infame. Desde el inicio electoral presidencial, se han sumado al Frente Amplio los ex trotskistas como el grupo Uníos (UIT-CI) y La Lucha Continua (MST de Argentina), que durante la campaña electoral fueron voceros de esa estafa a los trabajadores y el pueblo peruano que es el Frente Amplio y ambas organizaciones están políticamente disueltos en ese frente. Así esos grupúsculos renegados del trotskismo se han sumado a la nueva mediación internacional que ha puesto en pie el imperialismo, levantando la vieja política del estalinismo de colaboración de clases. Los renegados del trotskismo junto al estalinismo y la burguesía “democrática” se preparan para dar duras derrotas a los explotados.
Este frente de colaboración de clases, es producto de la política de la “nueva izquierda” mundial. Desde antes del proceso electoral del Perú Verónica Mendoza viene teniendo fluidos vínculos con Pablo Iglesias del Podemos Español, que le hizo campaña en las redes sociales como: “¡Si se puede! ¡Juntos Podemos y venceremos! #Vamos con todo, Vero Presidenta#”. Y a su vez el 26 de junio de 2016, que se realizaron las elecciones en España, Verónica Mendoza viajó a Madrid a participar de la comitiva internacional que acompaño a la coalición electoral Unidos Podemos.
Ahora en Perú refuerzan el Frente Popular de Verónica Mendoza, junto a la CGTP y los renegados del trotskismo para desviar las luchas contra el odiado régimen fujimorista, con marchas contra la “corrupción” como lo vienen haciendo, y ponerlas a los pies del parlamento.
Como vemos los padres de la criatura de todas estas mediaciones contrarrevolucionarias en Latinoamérica como el Frente Amplio de Perú o el Frente Amplio de Chile, son el Podemos y Syriza. En Perú con un lenguaje Mariategui-Gramsciano para hacerle creer a las masas que se puede conquistar sus demandas dentro de los marcos del régimen fujimorista y sin avanzar en el camino de la revolución socialista.
Liga Socialista de los Trabajadores Internacionalistas de Perú
