Grecia - 10 de julio de 2022

Desde el 23 de mayo Giannis Michailidis se encuentra en huelga de hambre en la prisión de Malandrinos. Giannis es un preso político, como las decenas de presos políticos que hay en Grecia, de la juventud que se sublevó contra la Troika que imponía los peores planes de ajuste contra los trabajadores y el pueblo. Giannis peleó por los refugiados sirios cuando llegaban a las costas griegas para que se abrieran las fronteras, se terminaran los campos de concentración y se les diera todos los derechos. Más aún, desde detrás de las rejas donde lo mantienen preso la burguesía griega y su estado, luchó por el triunfo de la revolución siria.
Giannis es un preso político. Lo han condenado a largos años de prisión, inventando todo tipo de causas y maniobras, haciendo juicios falsos para mantenerlo en “prisión preventiva” y aprovechando tal o cual aspecto legal para negarle una y otra vez la libertad condicional y hasta revocarle su derecho a estudiar y rendir exámenes, aún cuando ya lleva preso más de 8 años y ha cumplido 3/5 de su condena de 20 años y 2/5 de su condena por fuga. Se han ensañado con Giannis a tal punto que luego de 48 días de huelga de hambre, habiendo perdido el 21% de su peso y con su salud en grave peligro, le niegan la posibilidad de la atención médica que necesita. Reproducimos la carta que Giannis ha escrito desde la cárcel iniciando su huelga de hambre denunciando el ataque de la burguesía griega y su estado.

Una gran solidaridad de toda Grecia se ha puesto de pie por la libertad de Giannis. Otros presos políticos han iniciado también una huelga de hambre y se vienen realizando marchas y otras actividades. Esta solidaridad ha traspasado las fronteras griegas y se ha manifestado también en otros países como España o Alemania.
Desde la Red Internacional por la Libertad de los Presos Políticos nos sumamos a esta pelea por la libertad de Giannis y llamamos a que sea tomada en sus manos por todas las organizaciones obreras, de derechos humanos, estudiantiles combativas, etc. del planeta. Giannis Michailidis es un preso político de la clase obrera, un rehén en manos de los explotadores y la lucha por su liberación es imperiosa, más todavía en su estado actual de salud.

Como retumba en todas las calles de Grecia: ¡La pasión por la libertad es más fuerte que todas las celdas!

¡Ganemos las calles en solidaridad con Giannis!

¡Marchemos a las embajadas de Grecia!

¡Libertad a Giannis Michailidis y a todos los presos políticos de Grecia!

REPRODUCIMOS LA CARTA DEL COMPAÑERO GIANNIS,
DESDE LA CÁRCEL

http://www.anticarcelaria.org/2022/05/30/giannis-michailidis-en-huelga-de-hambre/

Grecia: Giannis Michailidis – Anuncio del inicio de una huelga de hambre para mi liberación

Después de 8,5 años en prisión, después de todas estas acciones arbitrarias contra mí, decidí poner fin a mis 11 años de sufrimiento, poniendo fin a la práctica de la prisión preventiva, o el castigo adicional de la fuga a través de vacíos legales. Después de 5 meses más de detención preventiva, comienzo una huelga de hambre para mi liberación. Esta elección, con la profunda motivación de la ansiada libertad, pienso apoyarla con la misma coherencia con la que he apoyado mis elecciones hasta ahora y por la que se están vengando de mí.

"Ay de los que acepten la prisión como condición de vida,
y de la más brillante luz del sol, el más pequeño rayo"

- El grito de guerra del levantamiento de la prisión de Alikarnassos

Llevo 11 años sufriendo la reivindicación del Estado contra las opciones que se ajustan a mis valores e ideas. La difícil travesía, de la que opto por compartir algunas arbitrariedades vindicativas flagrantes en mi contra, comenzó en 2011, cuando se emitió una orden de detención en mi contra por el caso de conspiración de los Células de fuego, por el que finalmente fui absuelto al no existir ninguna relación entre mi persona y la acusación en mi contra. Fue la incriminación de una relación de solidaridad con los anarquistas buscados lo que me puso en su lugar cuando fueron detenidos.

Después de 2 años de ser perseguido, yo también estoy atravesando las pesadas puertas de la prisión, ya que la existencia de una orden de encarcelamiento de una década ha llevado a ciertas elecciones y a los consiguientes errores. Todos los compañeros que fueron detenidos en su momento en el atraco a un banco en Velventos, Kozani, fueron torturados por la policía, lo que era habitual, y luego el Ministerio de Orden Público publicó las fotos de nuestras caras hinchadas, provocando una reacción pública. Por supuesto, ningún policía fue acusado de esto por la ciega justicia griega.

Al cabo de un año y medio, cuando los 18 meses estaban llegando a su fin, me encontré con otra orden de prisión preventiva relativa a las actividades de la Conspiración de los Células de fuego, con un expediente en el que figuraba mi nombre como participante en actos con los que no estaba relacionado, ni siquiera una sola prueba o testimonio. Naturalmente, como el trabajo sucio ya estaba hecho y yo ya había sido condenado en el caso del robo del banco, finalmente fui absuelto. Esta estrategia de prisión preventiva múltiple sin pruebas y de disección de casos individuales fue la herramienta con la que el Estado se aseguró de que los presos anarquistas permanecieran en la cárcel sin ser juzgados incluso después de que hubiera expirado el período máximo de 18 meses de prisión preventiva, al mismo tiempo que los asesinos fascistas disfrutaban de su libertad después de que hubiera expirado el período de 18 meses de prisión preventiva.
También fui condenado por la justicia ciega por tentativa de homicidio contra un agente de policía, a pesar de que estaba desarmado en el momento del incidente, porque, según la acusación, intenté asesinarle utilizando el coche de policía que cogí para escapar de la detención.

En una culminación de la arbitrariedad judicial, se me condena a 11 años más de prisión por posesión de cartuchos, que fueron encontrados en la casa del camarada Dimitris Politis, que él mismo declaró que eran suyos, con el inconcebible argumento de que los poseíamos todos juntos para cometer "terrorismo individual". Para que conste, hasta el día de hoy, este caso y las duras condenas que conllevó siguen siendo la única aplicación de la ley sobre terrorismo individual en los anales judiciales griegos. El hecho de que esta ridiculez sin precedentes haya sido confirmada también por el Tribunal Supremo demuestra hasta qué punto el poder judicial "independiente" está entrelazado con las directrices de los partidos y del gobierno y lo común que se ha vuelto juzgar casos con lagunas legales.
Digamos unas palabras sobre el proceso educativo "sagrado" en el contexto de la educación penitenciaria. Tras la huelga de hambre del camarada Nikos Romanos, en la que tuve el honor de participar en solidaridad, se consiguió el derecho a permisos educativos para todos los presos, independientemente de su estatus. Así que, tras los retrasos y la dilación, después de 5 años de prisión, conseguí asistir a clases en la Universidad Agrícola de Atenas durante 1,5 años. A los 6,5 años de mi encarcelamiento, y después de estar ya en una prisión rural y haber recibido ya muchos permisos educativos de allí, la fiscal de Tirynthas decide que mi universidad está lejos y por lo tanto me corta los permisos. Me engañan con que me van a dar permiso para el examen, cosa que tampoco ocurre. Luego me informaron de que mi permiso ordinario también se cortaría, de nuevo con un vacío legal, lo que significaba que volvería a la prisión cerrada, perdiendo mi preciado salario. Así que me veo obligado a escapar de nuevo. Después de que me arresten de nuevo y solicite mi traslado a Korydallos por motivos educativos, tal y como prevén sus leyes, como el KEM no puede rechazar mis peticiones, opta por no responder. A pesar de que están "obligados" por ley a responder en 40 días... Todavía estoy esperando... Y a pesar de que he pasado por todos los cursos teóricos de mi escuela en condiciones adversas (Para los laboratorios se requiere estar físicamente presente lo que aparentemente no se me permite hacer si no voy).
El 29 de diciembre de 2021, habiendo cumplido 3/5 de mi condena de 20 años y 2/5 de la condena por la fuga, un total de 8 años y 3 meses de tiempo real cumplido, la secretaría de la prisión me llama para que firme la solicitud de libertad condicional según lo estipulado.

Al llegar al último episodio, también me enfrenté a la política habitual del mecanismo penitenciario de vengarse de los presos insumisos negándose a conceder la libertad condicional, a pesar de la condición esencial de terminar con éxito mi curso escolar (lo que me impedía terminarlo) y de haber encontrado ya un trabajo. De nuevo con una laguna legal... Esta vez con el argumento del peligro potencial... como medida de precaución. Como no ha pasado el tiempo suficiente para que me "rehabilitado" y corregido... Obvio disparate que ni ellos mismos se creen, sólo lo reproducen procesalmente mutilando la vida de tantos presos. Por supuesto, las personas reincidentes verdaderamente peligrosas, como los violadores, no se utilizan en este argumento porque, como sujetos viles que son, cooperan impecablemente con el sistema penitenciario y se benefician de la libertad anticipada y la libertad condicional. Se suele describir a las personas peligrosas como aquellas que tomaron la decisión digna de escapar, lo que se supone que la ley no castiga severamente porque el legislador reconoce que es normal que todo ser humano haga valer su libertad. Por ello, los funcionarios del sistema no se conforman con la aplicación de la ley y amplían su interpretación.
La laguna legal es la norma de funcionamiento del sistema. Los jueces que la hacen cumplir fueron probablemente nombrados de alguna manera como títeres del partido, construyendo carreras sobre las espaldas de los pobres presos que envían a los barrotes con gran facilidad, repartiendo años como garbanzos, mientras enormes sumas de dinero fluyen a través de grandes abogados para sacar a los más pudientes de la cárcel, o ni siquiera encarcelarlos. También lo hacen sus propios hijos, a los que se les abren resquicios legales para salir…
Al igual que el policía asesino del camarada Alexandros Grigoropoulos, Korkoneas, a quien la mafia judicial se apresuró a liberar, provocando reacciones generalizadas, que llevaron a su reaparición en prisión.
Como los policías que asesinaron a Nikos Sambanis a sangre fría en Perama.
Como los funcionarios de prisiones que torturaron hasta la muerte a Ilir Kareli, que fueron absueltos.

Como la Sra. Vlahaki, implicada en el escándalo millonario de Energa, que se escapó cortando su pulsera, pero pasó muy poco tiempo en la cárcel, consiguiendo una suspensión inmediata de su condena.
Como Furthiotis, que por hacer la pelota a la Justicia consiguió salir de la cárcel en 6 meses, pero luego se abrió la ventana legal para volver a ser detenido al sacar los trapos sucios del gobierno a la luz.
Como Vangelis Marinakis, que fue absuelto de la acusación por 3 toneladas de heroína con el argumento de que un prominente hombre de negocios como él no podía ser asociado con algo así. Este último ejemplo, aunque no estoy en condiciones de saber sobre su culpabilidad o no, y no me interesa, es de especial importancia precisamente porque demuestra de la manera más clara posible la naturaleza de clase del sistema judicial. Por supuesto, si un consumidor es detenido por posesión de una pequeña cantidad de droga y está en un grupo de tres personas, es condenado bajo el vacío legal de la organización criminal (que es como Grecia tiene más organizaciones criminales que Italia o México).
Los ejemplos requieren un libro entero para ser escrito, no sé cuántos volúmenes, así que estoy llegando a la esencia de esta carta.Después de 8,5 años en la cárcel, después de todas estas acciones arbitrarias contra mí, decidí poner fin a mis 11 años de sufrimiento poniendo fin a la práctica de la encarcelación preventiva, o el castigo adicional de la fuga con lagunas legales. Tras 5 meses más de prisión preventiva, voy a iniciar una huelga de hambre para que me liberen. Esta elección, con la profunda motivación de la tan deseada libertad, pienso apoyarla con la misma coherencia con la que he apoyado mis elecciones hasta ahora y por la que ellos, a su vez, se están vengando de mí.

Es mi profundo deseo que esta huelga de hambre se convierta en otro detonante de la reactivación de la lucha general contra el capital y los estados. El sistema capitalista que concentra la mitad de la riqueza de la tierra en una élite del 1% mientras empobrece rápidamente al resto, esclavizando a las almas vivas, no sólo de nuestra especie, a la tortuosa condición de la producción industrial. Sus corporaciones, que compiten en el saqueo de los recursos naturales, agotan el mundo natural al tiempo que llevan al planeta al borde del cambio climático y provocan la mayor extinción de especies en millones de años. La estructuración estatal de la sociedad, comercializada como necesaria por sus administradores de izquierda y derecha, con su estructura social centralizada, para imponer la esclavitud generalizada y asegurar la rentabilidad del capital. Los Estados, occidentales y orientales, cuyo monopolio de la violencia legítima, aniquila a poblaciones enteras, ya sea con armas ultramodernas de destrucción masiva, o instrumentalizando el hambre mediante la destrucción de infraestructuras, como en una serie de conflictos recientes en Palestina, Irak, Afganistán, Libia, Siria, Yemen, Ucrania. Las alianzas transnacionales que han convertido la tierra en un polvorín de cabezas nucleares que amenazan con hacerla volar literalmente, demostrando que los estados son los verdaderos terroristas.

Con el ataque generalizado que los estados y el capital han lanzado contra toda la vida viviente, incluida nuestra especie, es más necesario y oportuno que nunca organizar y plantear nuestras resistencias, rechazando cualquier forma de organización jerárquica que haga la lucha vulnerable a la manipulación, resultando en la reproducción del sistema o su asimilación al mismo. La agudización y unificación de los aspectos individuales de la lucha contra las máquinas estatales a través de redes descentralizadas de ecocomunidades y comunidades de lucha es la herramienta clave de la radicalización en la dirección de debilitar la dependencia de la gente del sistema industrial capitalista que está destruyendo la tierra amenazando su propia supervivencia.

Por eso, en un momento tan crítico, veo la batalla por mi libertad como un intento desesperado de participar en la lucha más amplia de la que me ha apartado mi largo encarcelamiento. Por ello, no considero que deba reclamar la exclusividad de las referencias del movimiento, sino que me propongo reconectar la lucha por la liberación de los anarquistas encarcelados con las ideas que les llevaron a entrar en conflicto con el sistema y que provocaron su encarcelamiento. Porque no busco el interés de nadie como víctima de la represión estatal, sino como sujeto social y político activo que ve mi condición de encarcelado como parte del ataque del Estado y del capital a quienes se oponen conscientemente a ellos. Por el contrario, reclamo una relación de solidaridad revolucionaria sobre la base de proyecciones comunes y una lucha común con múltiples aristas que coordine la rabia que sienten personas diferentes que experimentan condiciones diferentes pero con las mismas causas.
Y por último, sabiendo que es posible que esta huelga sea la última parte de mi viaje, quiero darle precisamente esa dimensión que me expresa como un todo:

La lucha por la libertad de uno es una lucha por la libertad de todos…
...hasta la destrucción de la última jaula

Giannis Michailidis,
encarcelado preventivamente en la prisión de Malandrinos

23/5/2022