Siria - 06 de mayo de 2018
Mientras Al Assad y Putin masacran con bombardeos incesantes al pueblo,
Como ayer en Alepo y Ghouta, bajo el mando de la conferencia de Ginebra:
Los generales del ESL firman la entrega del norte de la provincia de Homs
y su armamento pesado a Al Assad y Putin
Tras incesantes bombardeos de los aviones rusos y del régimen sirio, hoy estos genocidas marchan a plantar sus banderas en el norte de la provincia de Homs (principalmente de las ciudades Al Houla, Talbiseh y Rastan). Pero si esto es posible, no fue solo por esta masacre, sino sobre todo, por la entrega que firmaron los generales de la burguesía sunnita del ESL. Estos generales ya se encuentran entregando su armamento pesado a Rusia y Al Assad y están abriéndole camino a los autobuses de evacuación que trasladarán a las personas que viven en esas ciudades al norte de Siria.
Acaban de firmar una entrega como la que ayer hicieron en Alepo o Ghouta. Inclusive el acuerdo que firmaron con Rusia establece que ingresan las autoridades civiles del régimen, pero no su policía, sino que serán ellos mismos los que se pongan el uniforme de la policía local. Además, el acuerdo establece un compromiso a garantizar que todo hombre entre 18 y 42 años que se encuentre en esas ciudades del norte de la provincia de Homs y no se vaya al norte de Siria debe hacer el servicio militar obligatorio en el ejército assadista. De esta manera, los generales del ESL están propinando otro golpe durísimo a la revolución siria, con la entrega de otra de sus últimas trincheras.
Pero esto todavía no está dicho que vaya a imponerse. Las masas han salido a las calles a enfrentar este acuerdo de entrega de los generales del ESL. En la ciudad de Rastan marcharon al grito de “el pueblo quiere la caída del régimen” y haciendo saber que no aceptarán que ingrese a esa zona el régimen asesino sirio de Al Assad ni el sicario Putin. Es decir, están enfrentando tanto a Al Assad como a los que las están entregando: la burguesía sunnita del ESL.
Se están escribiendo los últimos capítulos de la revolución siria.Desde la ONU y su conferencia de Ginebra se coordinan los distintosagentes contrarrevolucionarios para que jueguencada uno su rol y terminen de derrotar las últimas trincheras donde las masas siguen resistiendo. Al Assad masacra a mansalva, y los generales de la burguesía sunnita entregan desde adentro de las zonas rebeldes como hoy lo están haciendo en el norte de la provincia de Homs. Y lo hacen ahora a cara descubierta y directamente, y no solo eso, sino que vuelven al lugar de donde salieron: al ejército y policía assadista, reunificando una casta de oficiales y un ejército único.
Este es el pacto contrarrevolucionario de Rusia y Turquía, los que comandan a Bashar y al ESL, los garantes de que se imponen (como se vienen imponiendo) por sobre todas las ciudades rebeldes. Y todos ellos están bajo el mando de EEUU, que disciplina a todos sus agentes marcándoles sus límites a bombazos, cuestión que lo hizo saber unas pocas semanas atrás cuando lanzó un ataque a algunas instalaciones de Al Assad. La conferencia de Ginebra es un gran pacto contrarrevolucionario entre todos estos agentes, bajo el mando del imperialismo, para derrotar la revolución siria y repartirse los negocios de la Siria una vez aplastada la revolución.
EEUU ya está ocupando las zonas petroleras de Siria con sus ejércitos y bases militares. Francia también tiene bases militares y ocupa, como también lo hace Turquía, la ruta de los oleoductos. Ya se frotan las manos pensando en el negocio de la reconstrucción. Ser administradores, a cuenta del imperialismo, de esta Siria ensangrentada y socios menores de los negocios de EEUU es lo que buscan los generales de la burguesía sunnita y los de Al Assad.
Los generales de la burguesía sunnita tienen negocios en común con los de Al Assad. Entre los dos negocian la circulación de las mercancías en Siria. El ESL garantiza la propiedad de la burguesía en las zonas liberadas y que los trabajadores sean superexplotadas, y que lo producido allí llegue a las zonas de Al Assad. Acuerdan sus negocios y se unifican en el mencionado ejército común, que está comandado por el imperialismo desde Ginebra, que es el que se está quedando con la mayor parte de los negocios de la Siria ensangrentada.Los generales del ESL y los de Al Assad son agentes distintos del imperialismo, pero con un interés común: que la revolución siria sea derrotada y seguir llenándose sus bolsillos.
Pero para eso tienen que terminar de aplastar la revolución. Para eso tienen que imponerse desde Ginebra contra todas las últimas trincheras. Y todavía la última palabra no está dicha.
La resistencia siria no se rinde. Si cayeron ciudades rebeldes no fue por falta de combate de las masas, sino porque ellas fueron entregadas por el ESL. Era posible la victoria, pero no con los generales de la burguesía sunnita al frente. Es que ellos son verdaderos “Caballos de Troya” al interior de las zonas liberadas. Son los que han entregado una a una las ciudades rebeldes. Fueron los mejores aliados de Al Assad contra la revolución siria.
Son los que cobran comisión de todo giro de dinero a las masas de las zonas liberadas que le hacen sus familiares para que puedan comprar comida. Acapararon todo el alimento para hacer subir los precios de los mismos y llenar sus bolsillos a costa del hambre del pueblo. Son los que superexplotan a los trabajadores en fábricas y talleres en jornadas de 12 horas diarias y con salarios tan bajos como los de Bashar, que apenas alcanza para comprar lo básico como pan y té.
Ellos son los que retiraron sus fuerzas de los frentes contra Bashar para irse bajo las órdenes de Erdogan a cuidarle sus negocios de los oleoductos. Se fueron a Afrin y dejaron Ghouta a merced de la masacre assadista, como lo habían hecho antes con Alepo, yéndose a Jarabulus y Azazen la operación “Escudo del Éufrates”. Ellos son los que desarmaron al pueblo y disolvieron sus comités de coordinación.
¡Fuera los generales de la burguesía sunnita que negocian la entrega de las masas! ¡Que vuelvan los comités de coordinación como en 2011!
¡Hay que recuperar las armas que los generales del ESL están entregando!
El triunfo era posible si se contaba al frente con una dirección revolucionaria que plantee las condiciones de la victoria. Y todavía es posible, a condición a condición de expulsar a esos generales, de romper el cerco a la revolución siria yunificarse con la clase obrera internacional.
La izquierda reformista mundial no ha hecho más que aislar a las masas sirias. Ellos dijeron que “el enemigo era el ISIS” y las separaron de los trabajadores del mundo, haciéndoles creer a estos últimos que los masacrados en Alepo, Homs, Hama, Daraya eran “terroristas” y “jihadistas fanáticos”.
Algunos apoyaron a Al Assad, otros al ESL… las dos puntas de la misma soga de Ginebra que estranguló la revolución siria. Todos dijeron que éstos estaban en “dos bandos” cuando eran parte de un mismo bando, un mismo pacto contrarrevolucionario para aplastar la revolución.
¡Hay que romper el cerco a la revolución siria!
¡Abajo la conferencia de Ginebra!
¡Fuera Al Assad!
¡Fuera EEUU, Francia, Rusia, Turquía, Irán y todas las tropas invasoras de Siria!