Hemos oído la noticia de que un juez de Alemania se dispuso a juzgar a un general del régimen basharista como criminal de guerra.
¡Era hora que alguien pensara en nosotros! Nuestra revolución comenzó hace más de 9 años y lo que comenzamos con enorme entusiasmo y alegría, sufre con la contrarrevolución y las masacres, dejando llantos, sangre y muerte.
Aun así nuestra esperanza no está puesta en las manos de este juez ni de la justicia burguesa, sino en las acciones y las luchas que llevamos adelante día a día. Está en las mil y una formas que buscamos para resistir al hambre con nuestras monedas devaluadas y un dólar por las nubes, con desabastecimiento total, con el 95% de los trabajadores sufriendo desocupación y los que consiguen trabajo lo hacen por salarios de 2 dólares por día.
Desde la resistencia en Idlib, hace aproximadamente un mes y medio, nos encontramos bloqueando una de las principales carreteras del país, la carretera M4, que atraviesa del oeste al este del país. Por allí es por donde, según habían acordado en la Conferencia de Sochi Putin y Erdogan bajo el visto bueno de Trump, debían pasar patrullajes de convoys turcos y rusos.
Pero nosotros lo hemos impedido. Sólo nosotros, pues no hubo ni HTS (ex Al Nusra) ni ENS (ex ESL) que nos apoye. Los trabajadores de Siria, solo sufrimos miseria, pero estamos convencidos, por sobre todas las cosas, que la revolución vivirá siempre y cuando sigamos combatiendo. Por eso nos mantenemos firmes en medio de esa carretera al grito de: ¡Fuera las tropas invasoras!
Pero en vez de irse vinieron a por todo. Turquía nos golpeó y nos reprimió con sus fuerzas de seguridad, nos lanzaron gases y balas de plomo. Hasta mataron a 4 de nuestros hermanos. Pero aun así resistimos, solos, sosteniéndonos y respaldándonos uno a otro.
Los generales y oficiales del ENS solo hacen propaganda pro Turquía. Mientras, por el otro lado HTS finge estar de nuestro lado pero solo busca montarse en nuestra lucha, como lo ha hecho siempre, para terminar negociando su tajada en las Conferencias de Sochi.
Da bronca e impotencia que habiendo tantas armas de las miles de batallas en las que derrotamos al perro Bashar y sus mercenarios, hoy tengamos que resistir en las peores condiciones despojados de lo poco que teníamos con millones de los nuestros amontonados y muriendo de frío y hambre en los campos de refugiados, solo porque ese armamento fue acaparado junto al alimento por HTS y el ENS y escondido Alá sabe donde.
Genera odio, habiendo tenido la posibilidad de controlar las riquezas y controlar los pozos petroleros como, por ejemplo, en Raqqa y Deir Ezzor. Por el contrario, hoy estamos muriéndonos de hambre gracias a que el imperialismo yanqui y sus tropas invasoras llegaron para apropiarse esas riquezas a los ojos de la izquierda reformista mundial que observó y observó desde lejos, pero sin quedarse callada gritó: ¡El Enemigo es el ISIS! Siendo así como legitimó el rol del ejército yanqui en nuestro suelo. Hoy vemos cómo, aun en su peor crisis, el imperialismo yanqui ordena muy bien a sus perros como Putin o los ayatollahs iraníes para que hagan el trabajo sucio aquí masacrando a mansalva a nuestro pueblo.
Aprovechando esa crisis, es que Alemania entra en escena y hace su jugada, intentando ganarse nuestros corazones y nuestra confianza, llevando a juicio a este general. Pero FUERON MILES DE OFICIALES DEL EJÉRCITO BASHARISTAS ASESINOS QUE NOS MASACRARON Y NOS TORTURARON HASTA LA MUERTE. No podemos dejar que, como auspicia Alemania con sus jueces, nos engañen y nos reconciliemos con juzgar uno o dos oficiales para salvar a todos los genocidas. ¡EXIGIMOS JUICIO Y CASTIGO A TODOS LOS ASESINOS Y TORTURADORES! SON TODOS CULPABLES HASTA QUE DEMUESTREN SU INOCIENCIA: Bashar, Putin, Trump, los ayatollahs y el Hezbollah que nos masacraron aquí y ahora masacran en Irán y en el Líbano…
Por ello, sabemos que la verdadera justicia llegará cuando los que juzguen y castiguen a todos los asesinos del pueblo sirio sean tribunales conformados por nuestros representantes. Los que representen a los masacrados, a los torturados y a todos los refugiados.
Es más, si, luego de 9 años, debemos poner nuestra confianza en algo más que no sean nuestras propias fuerzas o las de los pueblos que sufren igual que nosotros, entonces que sea algo serio. Que el juez llame a un juicio ejemplar como fue el de Nuremberg contra los Nazis.
Por nuestra parte, preferimos seguir apostando por nuestros hermanos iraquíes, que vienen dando batalla desde hace años contra el régimen del protectorado y las tropas invasoras.
Apostamos en nuestros compañeros en el Líbano, que están a un paso de pasar a la siguiente etapa de su revolución en la cual deberán, así como lo hicimos nosotros, armarse para conseguir el pan y para poder sobrevivir a semejante ataque que descarga el imperialismo y el gobierno sobre ellos.
Nos apoyamos en los millones de hermanos que han sido hacinados en campos de refugiados en las fronteras. De la misma forma que siempre confiamos en las fuerzas de la intifada Palestina contra el invasor sionista.
Preferimos no renunciar a nuestro sueño de derrumbar una vez más las fronteras que nos separan de un futuro prometedor en Europa, aunándonos con nuestros hermanos del viejo continente para poder pegar con un solo puño al imperialismo, como lo viene haciendo la juventud griega y nuestros hermanos de las Citês de Francia.
Si hay algo que nos quedó más que claro en estos 9 años de revolución, es que no somos más que un eslabón de una sola cadena de revoluciones, uno de los más fuertes, pero, al fin y al cabo, un eslabón más que debe servir como punto de apoyo para extender esta cadena a todo el planeta.
Para que la clase obrera y los explotados del mundo vivamos… ¡El imperialismo, sus regímenes y gobiernos asesinos y hambreadores deben morir!
De Siria a Irak, de Líbano a Palestina, de Túnez, Argelia y Sudán hasta Europa… una sola clase obrera, una sola lucha, una sola cadena revolucionaria.
Periódico La Verdad de los Oprimidos