Siria - 16 de febrero de 2023

La posición de Prensa Obrera sobre el terremoto en Siria y Turquía:
Nueva catástrofe y viejas pócimas y recetas ya perimidas y derrotadas por el marxismo revolucionario

La semana pasada un terremoto azotó Siria y Turquía con un saldo devastador de más de 37 mil muertos, y la cifra va en aumento a medida que se encuentran más bajo los escombros en un intento de rescatar sobrevivientes. Desde La Verdad de los Oprimidos hemos dado cuenta de esta verdadera catástrofe, que es solo una parte de la terrible devastación en Siria que llevaron a cabo Al Assad, Putin, los ayatollahs iraníes, mientras Turquía entregó las ciudades rebeldes, todos bajo el mando de EEUU.

También ha llegado a nuestras manos una nota escrita por el periódico Prensa Obrera, en el que se da cuenta de todo lo que fue la destrucción en Turquía y cómo Erdogan impidió la prevención y que llegue efectivamente la ayuda que se estuvo enviando a la zona afectada.
Pero también se habla de que en Siria los efectos del terremoto se ven más agravados porque ya viene de una destrucción debido a una “guerra imperialista” y porque las sanciones a Al Assad traban la llegada de la “ayuda humanitaria”, y que las potencias imperialistas “no están dispuestas a entregarle ayuda a Al Assad” ni este quiere permitir que ingresen directamente “a los rebeldes”.
Esto es una falsificación de los acontecimientos, así como también un embellecimiento del genocida Al Assad. En primer lugar en Siria no hubo ninguna “guerra imperialista”. En 2011 estalló una grandiosa revolución de obreros y campesinos por el pan y la libertad, que fue masacrada y ahogada en sangre por la contrarrevolución de Al Assad, Putin y los ayatollahs iraníes que le hicieron el trabajo sucio a todas las potencias imperialistas.
¿Nos pueden decir qué potencias imperialistas se enfrentaron en Siria? EEUU, Turquía, Al Assad, Rusia, estuvieron todos juntos en las conferencias de Ginebra-Astana-Sochi pergeñando contra el pueblo sirio sublevado. Los yanquis le liberaron los cielos para que Al Assad y Putin masacren, mientras se quedaban con los pozos de petróleo. Erdogan comandó la entrega una a una de las ciudades rebeldes. Jamás chocaron ninguna tropa norteamericana ni turca contra las de Al Assad o Putin. Coordinaron bien sus intervenciones dentro de Siria para cumplir cada uno su rol contrarrevolucionario. Jamás chocaron en 12 años, a excepción de que Turquía derribó un avión ruso por error en la ruta de vuelo, por el que luego Erdogan pidió perdón. Y el veredicto final lo da el “plan de reconciliación” que ahora quieren imponer para asentar la partición, la derrota, y la “paz de los cementerios” en Siria.

Pero no solo embellecen al fascista genocida Al Assad haciéndolo pasar por enemigo del imperialismo, y no solo calumnian nuestra revolución diciendo que se trató de un ataque imperialista. También ponen su centro en que la clave en la situación actual es la llegada de la ayuda humanitaria y luego de denunciar cómo los gobiernos y estados ponen trabas a la misma concluyen “toda la solidaridad con los pueblos de Turquía y Siria”.
Algunas migajas y limosnas llamadas “ayuda humanitaria” no es la solución para los explotados. La solución jamás vendrá de la mano de los explotadores. Erdogan ha cerrado las fronteras impidiendo que los sirios a uno y otro lado de la frontera pudieran reunirse con sus familiares y que llegue solidaridad al norte de Siria… Al Assad se queda con la denominada “ayuda humanitaria” mientras continúa sus bombardeos junto a Putin… Los gobiernos y estados son los responsables de genocidios, devastaciones, presos políticos bajo tortura, persecuciones… Las potencias imperialistas son las que saquean nuestra región y todas nuestras riquezas petroleras para dejarnos en la miseria… La ONU es la que viola a nuestras mujeres en los campos de refugiados a cambio de ofrecer un pan como “ayuda humanitaria”…
La Prensa Obrera se niega a pelear por un programa clasista de los trabajadores de salida a la catástrofe. Por el contrario, desde La Verdad de los Oprimidos afirmamos que la única solución es la expropiación de todas las empresas y los bancos de la burguesía alawita en Siria, de los hombres de negocios que se enriquecieron con la guerra, de las empresas constructoras turcas que realizan enormes ganancias sin hacer construcción antisísmica y los bancos que las financiaron, para ponerlas a producir y financiar el salvataje del pueblo. Allí están los fondos para implementar un plan de rescate en gran escala y solo la clase obrera unificada de Turquía, kurda y siria lo puede resolver, poniendo en pie comités obreros y populares de salvataje, socorro y solidaridad de los millones de sirios, turcos y kurdos atrapados por el terremoto y las guerras contrarrevolucionarias de las petroleras imperialistas. Obreros turcos y sirios se vieron afectados de la misma manera con la pérdida de sus hogares y en su unidad está la llave de recuperar viviendas y luchar por la dignidad.
El terremoto no interrumpe la revolución ni la contrarrevolución. ¡Al Assad sigue bombardeando el norte sirio! Por eso, hoy más que nunca ¡Que caiga el régimen! ¡Fuera todas las tropas invasoras de Siria! ¡Para que la clase obrera viva, el imperialismo y todos sus gobiernos y regímenes lacayos deben morir!