Jornada internacionalista en el 12° aniversario de la Revolución Siria
Mensaje de Claudia Pafundi de la Comisión de Trabajadores Condenados, Familiares y Amigos de Las Heras y la Red Internacional por la Libertad de los Presos Políticos y Justicia por Nuestros Mártires.
"En Siria los trabajadores no se han rendido, nosotros tampoco. Seguimos luchando por hacer justicia por todos nuestros mártires, liberar a todos nuestros y terminar con tanta calumnia contra los ustedes y todos los que luchamos por nuestras demandas.”
Queridos compañeros y compañeras.
De todo corazón quiero darles un abrazo de parte de todos nosotros, las familias petroleras que luchamos contra el mismo enemigo que enfrentan ustedes allá.
Somos de la Comisión de Trabajadores Condenados, Familiares y Amigos de Las Heras y componemos, junto a decenas de organizaciones a nivel mundial, la Red Internacional por la Libertad de los Presos Políticos y Justicia por Nuestros Mártires.
Aquí, hace 10 años, nuestros compañeros fueron condenados a cadena perpetua y cárcel por luchar contra las petroleras en defensa de nuestro salario y contra la precarización laboral.
En ese momento gobernaba el mismo partido que gobierna hoy nuestro país. Fue primero Néstor Kirchner el que ocupó nuestro pueblo con sus fuerzas represivas en el 2006 durante la huelga y fue su esposa Cristina Kirchner, bajo las órdenes de las petroleras, la que encabezó el ataque contra nosotros y le planteó a los jueces que nos condenaran.
Pero cuando ellos nos atacaban, nos dictaban la brutal sentencia, nosotros no estábamos solos. Decenas de organizaciones obreras del mundo estuvieron junto a nosotros enfrentando a ese tribunal videlista. Eran los Kirchner, amigos de Al Assad y sirvientes de las petroleras igual que Al Assad los que nos atacaban para escarmentar a todos los trabajadores.
Y eso mismo hicieron con ustedes, los calumniaron, los aislaron, les dijeron terroristas, como a todos los que salimos a luchar por nuestros derechos en todo el mundo.
Fueron ustedes, compañeros revolucionarios de Siria, unos de los que estuvieron con nosotros desde el primer día. Y desde ese día nunca más luchamos solos. Nunca más nos separamos. Sus familias y las nuestras se hicieron una sola, junto a las madres de los presos palestinos, los obreros y jóvenes de Japón, las familias que buscan a sus hijos desaparecidos por el Estado en México en Ayotzinapa y todos los presos y perseguidos del mundo que se levantan contra la opresión.
Es por esta enorme solidaridad que hoy, nuestros compañeros, aunque fueron condenados, siguen libres luchando por su absolución junto a nosotros y sus hijos.
Queremos que sepan, compañeros y compañeras de Siria, que no están solos, que en este pueblo petrolero la bandera de la revolución sigue de pie.
¡VIVA LA REVOLUCIÓN SIRIA! ¡VIVA LA RESISTENCIA!
En Siria los trabajadores no se han rendido, nosotros tampoco. Seguimos luchando por hacer justicia por todos nuestros mártires, liberar a todos nuestros y terminar con tanta calumnia contra los ustedes y todos los que luchamos por nuestras demandas.
¡EL PUEBLO QUIERE LA CAÍDA DEL REGÍMEN!
¡NOSOTROS JUNTO A USTEDES NO PERDONAMOS, NO NOS OLVIDAMOS Y NO NOS RECONCILIAMOS!
La rebelión de los esclavos no es delito, es justicia.
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