13-08-2013

Las pandillas burguesas, agentes del imperialismo, siguen descuartizando Siria

En Siria, todas las fracciones burguesas la siguen descuartizando, mientras Bashar asedia los territorios que no controla. Luego de haber capturado puestos importantes en Homs, bombardeó con la aviación las zonas circundantes a Ladiqia (ciudad y puerto del noroeste) y a Deir ez-Zor (ciudad petrolera y bastión del Frente Al-Nusra, en la que están concentrando fuerzas, inclusive retirándolas de otros lugares no tan estratégicos y donde el control de las masas queda en manos del ESL y sus patrullas). Bashar Al Assad no ha mandado tropas terrestres a esas zonas todavía y sigue sin poder controlar el Norte y otras zonas, y esto no es por la fuerza del ESL ni del Frente Al-Nusra, sino porque las masas siguen resistiendo.
Por otro lado, los explotados siguen buscando refugio y formas de subsistencia. Cada vez son más los que se van a países vecinos a buscar trabajo. En cada lugar de la frontera se encuentran sirios buscando un nuevo país, trabajo y un lugar donde asentarse. La ONU dio un informe oficial según el cual hay más de 1.900.000 refugiados sirios en el exterior (a lo que hay que sumarle todos aquellos que no figuran en las estadísticas) además de los que perdieron sus casas y todo y se fueron a otras partes del país, dentro de la misma Siria, que se estima que son 4.000.000, en un país de 23 millones de habitantes.

En Palestina, de la mano de Fatah, el sionismo avanza sobre las masas

Mientras tanto, como parte del “Plan de Paz” del imperialismo y todos sus agentes en la región, el diálogo entre Fatah y el estado sionista fascista de Israel ya está dando sus primeros resultados: 1.200 nuevos asentamientos de colonos judíos, por sobre la expulsión y el encarcelamiento de más palestinos. ¿Y todo a cambio de qué? De la promesa por parte de Israel de liberar a 104 prisioneros, mientras más de 4.800 siguen en las cárceles.
Esto está encontrando una resistencia por parte de los palestinos de Cisjordania, que está siendo canalizada por el FPLP y el FDLP por medio de marchas pacíficas impotentes, que les permite pintarse de rojo con un discurso a la izquierda de Fatah, rechazando las negociaciones y diciendo que los presos nunca pueden ser moneda de cambio y extorsión y que no hay nada que negociar con Israel sino su retiro. En Gaza, Hamas también se ha negado a reconocer las charlas de negociación. Que tengan que hacer esto es porque no le pudieron imponer la rendición a las masas palestinas, aunque Kerry y el imperialismo yanqui opinan que podrán hacerlo para fin de año; el mismo plazo que se dio el gobierno libio para desarmar a las masas en su país. Pero, pese a lo que afirmen en sus declaraciones y aunque hayan lanzado su ofensiva contrarrevolucionaria, aun está por verse si pueden lograrlo. Pues, a pesar de muchas traiciones, quedan muchas batallas por dar.

B. León Sedov