Siria - 11 de junio de 2015
La resistencia se mantiene en Aleppo, avanza en Idlib y Deraa
Las fuerzas terroristas genocidas de Al Assad, sostenidas con las tropas de Hezbollah, la guardia republicana iraní y ahora también el ejército iraquí bajo el mando directo de 450 oficiales yanquis, continúan masacrando a las masas
El imperialismo concentra sus fuerzas para aplastar la resistencia
en Siria, Palestina y la revolución yemení
¡La clase obrera debe concentrar las suyas en apoyo a las masas de Medio Oriente!
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Aleppo |
En el día de ayer, desde la resistencia de las masas sirias del sur, se derrotó a las tropas de Bashar en parte de la provincia de Deraa. Allí se tomó una de las bases militares que tiene allí: Liwa 52 ("brigada 52"). Esta base es una de las más importantes en cuanto a equipamiento e instalaciones militares, y era el centro desde donde Al Assad reagrupaba y mandaba sus tropas, aviones y helicópteros a masacrar a las masas del sur de Siria.
Este avance se da en el mismo momento que en el norte la resistencia avanza por sobre toda la provincia de Idlib, mientras nos mantenemos firmes en Aleppo rechazando las ofensivas de las tropas mercenarias de Al Assad y los intentos de avance del ISIS sobre ciudades como Azaz.
Pero ante nuestro combate por derrotar a Bashar y llegar a Damasco, para de allí ir a por Jerusalén, Al Assad está dispuesto a mantener su control y su rol como buen garante de las fronteras del estado sionista. Como su ejército tiende a disolverse y no puede más que llevar mercenarios a los frentes, ha sido reforzado nuevamente con las tropas de la guardia republicana iraní y de Hezbollah. Está claro que Obama, desde sus reuniones con Rouhani (el presidente de Irán) en Ginebra, le ha encomendado a éste y a todos los ayatollahs y la burguesía chiita que envíen a más de 15.000 tropas mercenarias provenientes de esos dos grupos para sostener a Al Assad en las zonas que considera estratégicas: Damasco, la frontera con Líbano, las ciudades de Hama, Homs y las provincias costeras de Latakia y Tartus.
Y a la vez, con la excusa de “enfrentar al ISIS”, los yanquis han enviado 450 oficiales para entrenar divisiones especiales del ejército iraquí. Lo que están haciendo es una "coalición chiita" de las fuerzas de Al Assad, Hezbollah, los ayatollahs iraníes y el ejército iraquí, bajo el mando yanqui, cuyo rol es masacrar a las masas, como vienen de hacerlo en Siria con 400.000 muertos, y aún hoy siguen haciéndolo.
En nuestras ciudades, como Aleppo o Idlib, donde se encuentra de pie la resistencia de las masas, Al Assad masacra con bombardeos aéreos. Hemos visto caer centenares y centenares de barriles solamente en el último mes, que nos dejaron más de 730 mártires. El número se incrementa día a día con los constantes ataques. El perro Bashar utiliza tanto los aviones proveídos por Putin (MIG y Sukhoi) que lanzan misiles y bombas militares, como los barriles explosivos que son simplemente dejados caer desde helicópteros sobre el centro de los barrios y localidades liberadas de las tropas de Bashar. Cada uno de estos barriles puede destruir una casa o edificio y son arrojados por decenas cada día.
A esta “coalición chiita”, armada por Putin y bajo el mando de los marines yanquis, el Foro Social Mundial la hizo pasar como “antiimperialista”. Dijeron que “enfrentaban al imperialismo y al sionismo”, cuando esos ayatollahs de Irán vinieron a Siria a sostener a Al Assad en Damasco y ahogar en sangre nuestra revolución, y cuando las guardias armadas de Hezbollah no dispararon un solo tiro contra el sionismo en el momento en que éste masacraba a 2200 palestinos en Gaza en julio/agosto del año pasado, pero sí irrumpió en Siria junto a Bashar para aplastar a las masas insurrectas como en Al Qusair.
Justifican la masacre de 6000 palestinos en Yarmouk que hizo Al Assad porque “hay que mantener su régimen que se enfrenta al sionismo”, cuando es quien le ha garantizado que queden intactas las fronteras de los Altos del Golan.
El FSM sostiene a esas fuerzas contrarrevolucionarias asesinas de las masas no solo sirias y los refugiados palestinos que están hoy en Siria, sino también iraníes. No nos olvidamos lo que hicieron estos carniceros aplastando a las masas explotadas iraníes cuando éstas se levantaban en el 2009 con heroicas huelgas -como de los obreros textiles, de la construcción o docentes- que reclamaban aumento de salario y luchaban contra la carestía de la vida.
Y no nos olvidamos de donde salieron los ayatollahs iraníes: del corazón de las potencias imperialistas, donde estaban “exiliados” y fueron mandados de nuevo a Irán cuando las masas derrocaron al gobierno del Sha Reza Pahlevi abriendo la revolución del ’79. El imperialismo los usó entonces para que aplasten y ahoguen en sangre esa gloriosa revolución que supo poner en pie los shoras, los consejos de obreros y campesinos pobres. Los ayatollahs, ni bien llegaron, con Khomeini a la cabeza, pusieron en pie su guardia armada de lo que ellos llamaron “mujahidines”, que fueron verdaderas tropas contrarrevolucionarias que aplastaron a tiros a los shoras y masacraron a las masas revolucionarias.
Hoy Khamenei –el ayatollah iraní supremo- hace lo mismo que ayer en el ’79 hizo su predecesor Khomeini: aplastar revoluciones. ¿Antiimperialistas? Son agentes del imperialismo que ahogan a las masas en sangre. ¡Basta de mentiras y engaños de la izquierda de Obama!
Ahora, los sostenedores de esta “coalición chiita” están diciendo que “hay que sostenerlo en contra del terrorismo del ISIS”. Esto no es más que una excusa para actuar conjuntamente y bajo el mando de EEUU. Sino, ¿por qué no bombardean con barriles ninguna de las zonas del ISIS? ¿Por qué los ataques de Al Assad son sólo sobre Aleppo, Idlib y las “zonas liberadas” del sur de Deraa y Sweida, y ninguna sobre los cuarteles del ISIS? Cuanto mucho le disparan en las fronteras del "Levante" para limitarlo a este territorio, el cual le otorgaron para actuar como el guardián "terrorista" que le defiende los oleoductos y la propiedad a las empresas petroleras angloyanquis.
Y, por su parte, el ISIS tampoco ataca la aviación de Al Assad, aun cuando tienen gran cantidad de arsenal y misiles tierra-aire que tomaron de las bases militares de Irak. Si el ISIS está contra Al Assad, ¿por qué nunca lo enfrenta? En vez de ello, el ISIS nos enfrenta a nosotros. Se ha lanzado sobre Aleppo, como ayer lo hizo contra la resistencia palestina en Yarmouk, contra los que nos encontrarnos resistiendo, al mismo tiempo que mantienen un control férreo militar en las zonas que ocupan, tanto en Siria como en Irak.
¿Y los bombardeos norteamericanos que supuestamente atacan al ISIS? Esas son mentiras y excusas que dan los yanquis para justificar sus ataques. Ninguna de sus bombas fue a cuarteles y centros importantes del ISIS. Algunas veces les ha atacado convoys en ciertos frentes para limitar su accionar y su avance, como ya dijimos. Pero la mayoría del fuego norteamericano que ha caído sobre Siria e Irak fueron a las casas de los explotados que viven bajo la bota del ISIS, a las cárceles donde el ISIS los mantenía presos por no someterse a su disciplina (como ocurrió en Al Bab hace un mes y medio, donde fueron masacrados 400 explotados presos del ISIS), inclusive a zonas de la resistencia de las masas en Aleppo e Idlib (donde el ISIS no estaba ni cerca).
El ISIS es otro agente contrarrevolucionario que usa el imperialismo en la región para aplastar a las masas. Obama, además de su “coalición chiita”, cuenta con su “coalición sunnita”. Son las dos puntas de una misma soga que tiene el imperialismo para estrangular la revolución en el Magreb y Medio Oriente. El imperialismo y Arabia Saudita mandaron al ISIS a la zona del “levante” en Irak y Siria para aplastar desde adentro el levantamiento revolucionario de las masas, y controlar esas zonas, imponiendo un “califato”. El ISIS ha demostrado ser el agente teocrático-sunnita del imperialismo, como los ayatollahs iraníes desde el ’79 vienen demostrando ser los agentes teocráticos-chiitas.
No se trata ni de “chiitas” ni de “sunnitas”. Se trata de que son burgueses, explotadores, lacayos y sirvientes del imperialismo que le garantizan su saqueo, sus riquezas, su propiedad de los pozos petroleros, y a nosotros hambre, miseria y masacre.
Ha sucedido que estas burguesías a veces quieren una mayor parte de los negocios, y regatean con el imperialismo o avanzan en buscar negocios más allá de sus fronteras. Y por ello, esas veces, el imperialismo limita a sus agentes, los disciplina y les tira un par de misiles. Pero no por esto dejan de ser sus agentes contrarrevolucionarios, sus socios menores en el saqueo de la nación y la superexplotación de los trabajadores.
Las masas norteamericanas le han impuesto un límite absoluto a la intervención directa de los yanquis en la región. Es más, se tuvo que retirar de Irak y Afganistán, gracias a la enorme lucha antiimperialista de las masas en EEUU. Por eso arman a sus esbirros contrarrevolucionarios en el Magreb y Medio Oriente, para que ellos actúen.
El imperialismo sabe que si nuestra resistencia llega a Damasco, volverán los 10 millones de refugiados -que viven en carpas en el desierto- a recuperar sus casas y saldar cuentas con todos los saqueadores y asesinos del pueblo sirio. Por ello tanta concentración de fuerzas alrededor de Al Assad y la defensa de Damasco. El día que éste caiga, las fronteras del sionismo se prenderán fuego.
En el Líbano, en las fronteras con el estado de Israel, donde está Hezbollah, se convive en paz con el invasor sionista. Se sostiene a las tropas de la ONU que allí están instaladas.
La contrarrevolución en Siria fue el punto de partida de una enorme contraofensiva para aplastar las revoluciones que comenzaron en Túnez en 2011 y se extendieran a todo el Magreb y Medio Oriente.
Pero el combate no ha terminado. Nuestros hermanos palestinos resisten. Y ha comenzado una heroica revolución en Yemen. Allí tanta mentira e infamia quedan al descubierto. Lo que hubo es un gran levantamiento de obreros y campesinos de todo el país. Y fue el clan saudí, los gerentes de las "siete hermanas" petroleras, a masacrar esa revolución.
En Yemen, hubo una respuesta contundente de masas que ha impedido, por ahora, que ingrese el invasor a sus fronteras, mientras un bombardeo rasante cae día a día sobre sus ciudades, masacrando por miles a hombres, mujeres y niños.
El imperialismo concentra sus fuerzas para aplastar la resistencia en Siria, Palestina y la heroica revolución yemení
¡La clase obrera debe concentrar las suyas! ¡Llamamos a que se ganen las calles de todo el mundo en apoyo a las masas de Medio Oriente!
¡Hay que derrotar a todas las "coaliciones" contrarrevolucionarias burguesas, lacayas de Obama!
En el 2011 comenzamos enormes levantamientos por el pan, contra la miseria, la carestía de la vida y los regímenes de oprobio, agentes del imperialismo. Hoy ha sido claro cuál es su respuesta: masacre, genocidios y guerras contrarrevolucionarias. También ha quedado claro cuál es la solución: el triunfo de las revoluciones que hemos empezado, expropiando a los expropiadores asesinos del pueblo, a los banqueros, a las petroleras imperialistas, como ayer lo hicieron nuestros hermanos de Libia que, tomando los puertos y los pozos de petróleo, llegaron a exportar directamente ellos el petróleo que extraen con sus manos.
¡Por la derrota de la coalición sunnita que bombardea Yemen! ¡Viva la revolución yemení!
¡Hay que derrotar a Al Assad y sus fuerzas aliadas! Para ello, ¡expropiemos todos los bienes de la burguesía en las zonas liberadas para poner todos los recursos disponibles a ganar la guerra y resolver el problema del pan!
¡Hay que tomar Damasco para marchar a Jerusalén!
Miles de nuestros hermanos de Libia vinieron a combatir contra el perro Bashar. Muchos de ellos murieron junto a nosotros. Ellos comprendieron que su revolución triunfaba en Damasco y Jerusalén.
Hoy una noche negra envuelve a las heroicas masas de Libia. Allí el golpe de Heftar, la llegada del ISIS y la corruptela de las burguesías locales se han impuesto bajo el mando de la vieja burguesía khadafista, hoy disfrazada por el gobierno de la "Casa de Representantes" que está en Tobruk.
Nosotros combatimos junto a las milicias rebeldes de Libia, porque sabemos que si ellas se coordinan y avanzan a sacarse de encima a los expropiadores de su revolución, la hora de la asesina burguesía libia -socia menor de la ENI y la British Petroleum, y socios, junto a Arabia Saudita, en la venta de esclavos de toda el África a Europa- tendrá los días contados.
En Gaza y en la Palestina rebelde se define la revolución del 2011.
¡Todos somos palestinos!
¡Por la destrucción del estado sionista-fascista de Israel!
¡La revolución de Medio Oriente sigue de pie! ¡Que viva la revolución!
Brigada Leon Sedov |
