Ucrania - 3 de abril de 2022
Sangrienta masacre de las tropas de Putin
en la ciudad de Bucha
Es el pueblo, no los nazis, el que enfrenta la invasión del carnicero fascista de Putin a Ucrania...
Cuando los cadáveres ya no entren en los cementerios y millones queden refugiados, harán como en Siria: partirán definitivamente Ucrania y se la repartirán con los yanquis y el Maastricht imperialista.
Ayer con la excusa de la lucha “contra el terrorismo” en Siria, masacraron a 700 mil oprimidos. 15 millones quedaron refugiados. Mientras los yanquis bombean con Turquía todo el petróleo del norte sirio, Putin y el fascista Assad mantienen la “paz de los cementerios”.
Hoy, el fascista de Moscú llamó a “aplastar a los nazis de Kiev” y solo masacra al pueblo ucraniano.
Mientras tanto, ya en mesas de negociaciones con Turquía y los yanquis, dibujan las nuevas fronteras de la Ucrania tutelada para repartírsela...
Y todavía hay sinvergüenzas en el movimiento de izquierda internacional que apoyan a uno de los gobiernos más contrarrevolucionarios como es el de Putin en Eurasia. Un gobierno de multimillonarios, socios del imperialismo europeo y de los yanquis, a los que les cuidan sus inversiones a sangre y fuego.
Una banda de bandidos imperialistas de Occidente ahora van por Moscú... Una Ucrania devastada es una ruta despejada para llegar. Así “Roma usa a sus vasallos”.
La clase obrera de Europa, Rusia y EEUU debe parar esta masacre y guerra de ocupación contrarrevolucionaria.
Los últimos capítulos de esta historia aún no se han escrito. Pero las masas de Ucrania no abandonan las calles. El miserable de Zelensky se cuida muy bien de no armarlas.
La lucha nacional contra la invasión debe pasar a otras manos: a un comité militar de obreros, soldados rasos y el pueblo en las calles. Este le daría el derecho a la autodeterminación al Donbass y uniendo así a la clase obrera podrá unir la nación para derrotar la invasión de Moscú y romper con el imperialismo. Este es el camino para imponer lo que la autocracia de Moscú repudia: una Ucrania obrera, soviética e independiente. Son los obreros y el pueblo de Ucrania los que ya están dispersando y confraternizando con los soldados rasos de Rusia que se niegan a morir por Putin.
Los asesinos de la OTAN se hacen los distraídos. Ni un disparo contra Putin. Nunca dispararon contra el gendarme de sus negocios en Siria, Kazajistán, Bielorrusia, Georgia, Armenia, Azerbaiyán, donde Putin intervino militarmente para defender los negocios de todos los capitalistas. Los bandidos de la OTAN solo esperan que Putin aplaste a Ucrania, que es una de las naciones más ricas en minerales, alimentos, acerías, gas, del Este europeo, para quedarse luego con la mayoría de sus riquezas, en una nación devastada.
Nuestra lucha: ¡Putin go home!
¡Armamento generalizado de las masas ucranianas!
¡Comités de soldados rasos rusos para paralizar la máquina de guerra de Putin!
¡Que vuelva la URSS revolucionaria de Lenin y la III Internacional!
¡Fuera la OTAN!
¡Huelga general revolucionaria en toda Europa!
¡Abajo el Maastricht imperialista!
¡Por los Estados Unidos Socialistas de Europa, de Portugal a las estepas rusas! |