Argentina - 12 de marzo de 2017
-La burocracia sindical de la CGT y su acto con el PJ del 7/3 fue para sostener al gobierno de Macri, la patronal negrera e impedir la Huelga General para derrotar el ataque de los capitalistas… Contra esto, una rebelión de la base obrera los sacó a patadas del palco al grito de “¡Paro general ya!”
-Con movilizaciones de masas y el paro nacional docente, con la rebelión obrera contra el triunvirato de la burocracia sindical de la CGT, el paro internacional y enorme movilización en el día de la mujer trabajadora, con una docena de fábricas en lucha contra los cierres, despidos y suspensiones… ¡La clase obrera resiste y responde al ataque de los de arriba! |
A propósito del acto del 7 de marzo de la CGT y el PJ:
El que juega con fuego, puede salir lastimado…
Debilitamiento de la burocracia de la CGT y profundas tendencias a la huelga general
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¡Que la rebelión contra la burocracia no se detenga!
¡Paso a las fábricas en lucha y docentes que marcan el camino!
¡Abajo la burocracia sindical!
Coordinadora Nacional de Trabajadores en Lucha
La Línea 60, Aceiteros, Canale, AGR-Clarín, la asamblea de General Motor, y los docentes en lucha tienen toda la autoridad para ponerla en pie
¡Plan de Lucha y Huelga General!
Para derrotar el ataque de Macri, el PJ y las transnacionales e imponer todas las demandas de los explotados
¡Que se vayan todos y no quede ni uno solo!
De los políticos patronales y los burócratas sindicales
Asamblea populares del 2001 |
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Palco tomado el 07 de marzo |
En la segunda semana de marzo, la clase obrera argentina ha dado un salto en su lucha contra el ataque del gobierno de Macri, los gobernadores y las transnacionales. A la docena de fábricas en lucha que resisten cierres, despidos y suspensiones se le sumaron cientos de miles de trabajadores que han ganado las calles de todo el país.
El enorme paro nacional de los docentes y sus movilizaciones en todo el país el lunes 6, con más de 90 mil trabajadores de la educación en las calles; la rebelión de la base obrera que irrumpió en el acto convocado por la CGT y el PJ el martes 7 en donde despidieron a patadas a los burócratas exigiendo el paro general ya; las miles y miles de mujeres que colmaron las calles y las principales plazas en el paro internacional por los derechos de la mujer trabajadora, demuestran una enorme predisposición al combate de los explotados y fundamentalmente que se han conquistado las condiciones para la Huelga General para derrotar el ataque de Macri, pero que la burocracia sindical en todas sus variantes lo ha impedido… por el momento.
El ataque del gobierno se profundiza y es sostenido por todos los partidos patronales como el PJ, el FpV, el Frente Renovador y el PS que desde las provincias que gobiernan aplican el mismo plan de ajuste y ataque al servicio de las trasnacionales imperialistas y le han votado a Macri y Cambiemos todas las leyes de ataque a los trabajadores en el parlamento. Es que mas allá de las discusiones por los negocios que puedan tener, todos gobiernan al servicio de las ganancias y saqueo de las trasnacionales imperialistas de la nación y tienen acuerdo en que la clase obrera entregando su salario, sus conquistas, pagando impuestos y muriéndose de hambre, debe ser la que pague los platos rotos de los negocios de los capitalistas.
Los acontecimientos del 6, 7 y 8 de marzo han puesto a la clase obrera en posición de contraofensiva.
La burocracia sindical de la CGT y la CTA impide la Huelga General para derrotar el ataque de Macri y los gobernadores ¡Paso a los que luchan! ¡Viva el paro de los docentes! ¡Paso a la mujer trabajadora!
¡Que la rebelión contra la burocracia sindical no se detenga!
Las duras luchas obreras comenzaron a romper su aislamiento. La segunda semana de marzo comenzó con el lunes 6 conmoviendo al país con el paro general docente y movilizaciones de masas en todas las provincias por la paritaria única nacional docente y salarios dignos para todos los maestros. Se movilizaron más de 90 mil docentes en todo el país. En Buenos Aires unas 15 cuadras de maestros paralizaron la ciudad y pre-anunciaron los acontecimientos del día siguiente bajo el canto de “¡Paro, paro, paro, paro general!” cuando uno de los burócratas del triunvirato de la CGT, Carlos Acuña, tomó la palabra en el acto de cierre de la movilización.
El 7/3 se desarrolló la jornada convocada por la CGT, un verdadero acto del PJ para dirimir su interna, con un programa de colaboración de clases y pro patronal. Bajo las consignas de subsidios y quite de impuestos para sectores de la patronal afectados por la política económica del gobierno, fueron parte de dicha marcha partidos patronales como el PJ y el Frente Renovador, que son quienes sostienen la ofensiva antiobrera del gobierno. Fue un acto enemigo del paro general tan ansiado por la base del movimiento obrero que sufre una guerra descarnada de los capitalistas. Se trató de un acto de los sostenedores del gobierno junto con la burocracia sindical para impedir el paro general, amortiguar los choques de la clase obrera contra el gobierno y los patrones, e intentar descomprimir el descontento de sectores de los trabajadores y los explotados. El palco de la CGT y el PJ fue para impedir la Huelga General, es decir, fue un acto de sostenimiento al gobierno.
Sin embargo, a pesar de las intenciones de la burocracia sindical y los sectores de la patronal que impulsaron y participaron de aquella jornada, el desarrollo y finalización del acto, con el triunvirato saliendo escoltado, corriendo y a los botellazos, mientras sectores de sindicatos acaudillados por la Linea 60, Aceiteros y Canale ocupaban el palco al grito de “ponele fecha al paro”, expresó un proceso profundo de la base del movimiento obrero que se rebeló contra esa burocracia sindical que a cada paso boicotea la Huelga General y sostiene al gobierno ¡Viva la rebelión de la base obrera contra la burocracia sindical!
Finalmente el 8/3 fue una enorme jornada de movilizaciones de masas en las principales ciudades del país en el marco del paro internacional en el Día de la Mujer Trabajadora. La segunda semana de marzo demostró que las condiciones están más que maduras para la Huelga General contra el gobierno y para unir todas las luchas en un solo golpe en la quijada de Macri para derrotar el ataque de las transnacionales. Fueron acciones de lucha política de las masas en las calles directamente contra el gobierno.
El acto de la CGT fue justamente para impedir esto, fue para boicotear la huelga general que sin más demoras se podría haber protagonizado en aquellas jornadas de la segunda semana de marzo. Esto hubiera significado un enorme paso adelante para la lucha docente por la paritaria nacional y salario, trabajo digno, contra el femicidio y las demandas de las mujeres trabajadoras, y hubiera unificado la lucha dispersa de decenas de fábricas que enfrentan los cierres, suspensiones y despidos. Pero fundamentalmente, hubiera sido un duro golpe político al gobierno con la clase obrera pesando decisivamente en la vida política nacional.
A pesar que la burocracia sindical, por el momento impidió la huelga general, la clase obrera ha pasado de un proceso de duras luchas de resistencia aisladas, a ponerse en posición de contraofensiva en esta verdadera guerra de clases que se agudiza.
El triunvirato de la CGT, ha quedado completamente deslegitimado y debilitado ante la base del movimiento obrero. Millones de trabajadores que odian a la burocracia sindical –la policía interna del movimiento obrero- vieron a esos carneros vendidos salir custodiados y esquivando puños y botellas.
Por el contrario, luego de la rebelión contra la dirección de la CGT, los sectores en lucha del movimiento obrero han quedado en mejores condiciones para enfrentar el ataque. Los docentes que se mantienen en estado de asambleas permanente en todo el país y que le han impuesto a sus direcciones un nuevo llamado a paro nacional, las trabajadoras desocupadas que en Mosconi-Salta vuelven a cortar las rutas en la cuna del movimiento piquetero revolucionario, obreros de AGR-Clarín, Banghó, Sancor, General Motors, VW, Textil Neuquén, Cresta Roja, Mascardi, Atanor, petroleros, y todos los sectores en conflicto, están sacando la conclusión de que para derrotar el ataque, hay que sacarse de encima a la burocracia sindical y esto se hace en la lucha, en las calles y coordinando todos los conflictos en curso.
Desarrollar y generalizar la rebelión contra la burocracia sindical y poner en pie los organismos de coordinación para la lucha, es la garantía de conquistar la necesaria Huelga General para derrotar el ataque del gobierno de Macri, las trasnacionales y la patronal.
El FIT y la impotencia del reformismo
Las corrientes que componen el FIT y dirigen e influencian a sectores del sindicalismo combativo han quedado realmente revolcadas por los acontecimientos protagonizados por los trabajadores y las masas en la última semana. Su programa y estrategia nada tuvieron que ver con la rebelión de las bases de la CGT que enfrentaron a los boicoteadores de la huelga general repudiando al triunvirato de carneros.
Los dirigentes del FIT no sólo que llamaron a la clase obrera a participar de la marcha junto a la patronal bajo la forma de “columna independiente”, sino que mientras sucedía la rebelión contra la burocracia, le impuso a los sindicatos combativos, hacer una hablada bien lejos de éstos acontecimientos.
Pitrola, dirigente del Partido Obrero y diputado del FIT en la provincia de Buenos Aires, quien había dado la línea de que se le podía cambiar el contenido al acto del PJ y por ello había que marchar en él con una columna “independiente”, dijo en un programa de TV la noche misma del 7 que ellos habían intentado hablar con los organizadores del acto para diseñar por donde marchar y “no generar choques”… Por esta política es que no tuvieron nada que ver ni con la rebelión de las bases de la CGT, ni con el palco tomado por la Linea 60, Aceiteros y Canale que fueron ovacionados por todas las columnas de los sindicatos.
En última instancia, el FIT fue “el ala izquierda” de ese acto de colaboración de clases y por ello nada tuvo que ver con la rebelión obrera de las bases.
Es que al acto del PJ no se le podía “cambiar el contenido”, pero una política audaz de coordinación de los sectores en lucha, una política de lucha en las calles contra la burocracia sindical, hubiera empalmado con esa rebelión profunda mucho antes del acto convocado para el 7 de marzo. Lamentablemente la estrategia del FIT es la de respetar los cuerpos orgánicos de los sindicatos estatizados y no la de coordinar a los que luchan y derrotar a la burocracia sindical en las calles.
La rebelión contra el triunvirato tiró por tierra la permanente excusa del FIT de que nunca “hay condiciones” para coordinar y derrotar a la burocracia. Las acciones de masas del paro y movilización docente y de las mujeres, y la rebelión obrera contra la burocracia del 7/3 demostró que hay profundas condiciones para derrotar a la burocracia sindical y marchar a imponer la Huelga General. Lamentablemente, las corrientes del FIT optan por el camino de mantener las luchas de los trabajadores que resisten el ataque patronal, aisladas unas de otras negándose a luchar por poner en pie una coordinadora para echar a la burocracia sindical de las organizaciones obreras, disputarle en la lucha la dirección del movimiento obrero a la misma y conquistar las condiciones para imponer la Huelga General. Su política es de sostenimiento a la burocracia sindical porque deja en manos de la dirección de la CGT y la CTA la convocatoria al paro, cuando está demostrado que son enemigos del mismo y que es el momento en que están las condiciones para expulsar a la burocracia de las organizaciones obreras. Su política es de exigencia a la burocracia a que convoque y le ponga fecha al paro, y no de llamar a poner en pie los organismos aptos para la lucha.
Insistimos, hoy, una coordinadora de lucha de los compañeros de la Linea 60, Aceiteros, Canale y AGR tienen más autoridad ante los trabajadores que la dirección de la CGT. Se vuelve urgente que desde estas organizaciones de lucha pongamos en pie dicha coordinadora, llamando a asambleas de base de todo el movimiento obrero ocupado y desocupado para conquistarla.
Esa coordinadora despertaría el entusiasmo de millones de obreros que odian a la burocracia y quieren derrotar el ataque de Macri, se nutriría de comités de desocupados y despedidos dejados a su suerte por sus gremios y la burocracia piquetera, unificaría a la docena de fábricas en lucha y su unificación con la base docente movilizada, sería un punto de referencia y organización para los millones de trabajadores que no están sindicalizados trabajando en negro y bajo una terrible precarización laboral, y abriría el camino de la derrota de la burocracia sindical y el plan de lucha para imponer la Huelga General.
El FIT le oculta este combate a la clase obrera y le dice que es posible frenar el ataque de los capitalistas con leyes en el parlamento y de las instituciones del régimen como el Ministerio de Trabajo. Para las corrientes del FIT es posible que los explotados mejoren su nivel general de vida bajo el régimen capitalista al que luchan por “democratizar”. Por ello son incapaces de llamar a una lucha política de masas a la clase obrera y a retomar el camino revolucionario del 2001 y su grito “Que se vayan todos” para derrotar el ataque de Macri y todos los partidos patronales bajo el comando de las trasnacionales imperialistas. Los representantes de la “Nueza Izquierda” en Argentina, han renegado definitivamente de la lucha por la revolución socialista y se han abrazado a una lucha por una “democracia superior” como le gusta definir a Del Caño.
El FIT debe romper con su política cretinamente parlamentaria y de sometimiento a las instituciones de dominio de la burguesía y a los estatutos de los sindicatos estatizados, y poner sus fuerzas al servicio de coordinar ya mismo a los que luchan.
La clase obrera debe volver a pesar en la vida política nacional…
Coordinadora Nacional de Lucha para expulsar a la burocracia de las organizaciones obreras y abrir el camino a la Huelga General para derrotar el ataque del gobierno
Millones de obreros en el país han visto como el triunvirato de la burocracia de la CGT fue repudiado y sacado a patadas del palco por la base obrera. Como dijimos más arriba, la tarea de derrotar a esos carneros es de vida o muerte para que triunfen todas las luchas en curso y derrotar el ataque del gobierno.
Una coordinadora de lucha de los trabajadores Aceiteros, de la Línea 60, Canale, AGR-Clarín, General Motor y las centenares de comisiones internas arrebatadas a la burocracia y los comités de lucha de las fábricas cerradas, puede abrir el proceso de derrocamiento en las calles de la burocracia y el camino a la Huelga General. Eso es lo que faltó el 7 de marzo y eso es lo que necesita la clase obrera para derrotar el ataque patronal y al gobierno de Macri y los Ceos de las trasnacionales. Necesitamos avanzar en esta coordinación y preparar un congreso nacional del clasismo.
El ataque contra los explotados no hará más que profundizarse. Es que para hacer frente a la recesión empujada por el crack y la crisis en Brasil (uno de los principales destinos de los intercambios comerciales de la Argentina) que no se detiene, cumplir con los vencimientos de deuda externa y conquistar una mano de obra “competitiva” para que lleguen las famosas “inversiones”; la patronal necesita exprimir a la clase obrera robándole el salario nuevamente en las paritarias, liquidar conquistas con flexibilización laboral y aumentando los ritmos de producción. Para imponer esta política debe avanzar sobre las organizaciones obreras, principalmente sobre las comisiones internas combativas. Este es uno de los objetivos del cierre de la planta de Pompeya de AGR-Clarín, hoy bajo amenaza de desalojo de la ocupación por medio de patotas y recientemente la amenaza de quitarle la personería al sindicato de los trabajadores del Subte.
No puede quedar en manos de la burocracia las paritarias que definen el salario y las conquistas de los trabajadores. Ellos co-dirigen el ataque de los capitalistas y a cada paso entregan nuestra lucha. Ejemplo de esto es la base docente que con su lucha no le permite a la dirección de CTERA entregar nuevamente la lucha por una paritaria única nacional docente tras el enorme paro del 6 de marzo, aunque la burocracia ha comenzado a firmar por provincias los acuerdos salariales miserables. El objetivo de la burocracia sindical es seguir el camino de Pereyra que entregó a comienzos de año el convenio colectivo de trabajo de los petroleros en Vaca Muerta ¡No podemos permitirlo!
La plata para el salario y para el trabajo digno está, se la lleva el imperialismo y el gobierno se la da a las trasnacionales y al FMI: subsidia a las petroleras imperialistas con casi 40 dólares cada barril de petróleo, le quitó impuestos a las mineras y las retenciones a los sojeros y paga dólar por dólar los vencimientos de la deuda externa. La clase obrera necesita una coordinadora nacional de trabajadores en lucha, conquistar un programa que unifique sus filas y le dé salida a la debacle impuesta por los capitalistas con la Huelga General y una lucha revolucionaria como la que protagonizó el 2001 para que se vayan todos los políticos patronales. La patronal cierra fábricas, suspende y despide trabajadores aduciendo crisis ¡Mentira! Se llenaron y se llenan de plata a costa de la explotación de la clase obrera.
Si están en crisis, que lo demuestren y abran los libros de contabilidad. ¡Abajo el secreto comercial con el que los patrones esconden sus ganancias al pueblo! Sobra plata para garantizar salarios y trabajo digno para todos los trabajadores del país, se la llevan las trasnacionales y el FMI. ¡No al pago de la deuda externa! ¡Incautación de toda la plata del blanqueo de capitales! ¡Basta de subsidios a las petroleras imperialistas! ¡Abajo el impuesto al salario y el IVA! ¡Impuesto progresivo a las grandes fortunas!
Basta de tregua de la burocracia piquetera con el gobierno. Un millón y medio de trabajadores han perdido su trabajo en el último año y la desocupación ya es un flagelo para las familias obreras. Las condiciones para millones de familias obreras se vuelven día a día insoportable. La lucha de las trabajadoras despedidas de Mosconi que vuelve a cortar las rutas, le marca el camino a los millones de trabajadores desocupados para luchar por sus demandas ¡Que vuelva la lucha por trabajo genuino! ¡Que se vuelva a poner de pie el movimiento piquetero! ¡Un turno más en todas las fábricas para que se pongan todas las manos disponibles a producir!
Hay que impedir un nuevo robo al salario obrero en las paritarias truchas que negocia la burocracia sindical. La lucha de los docentes por una Paritaria Única Nacional debe ser tomada en sus manos por todo el movimiento obrero. ¡Salario igual a la canasta familiar con cláusula gatillo según la inflación para todo el movimiento obrero! ¡40% de aumento salarial para todos los trabajadores! ¡Basta de precarización y flexibilización laboral ¡Todos bajo convenio! ¡Los convenios colectivos no se tocan!
Hay que seguir el ejemplo de los trabajadores de General Motor que en asamblea desconocieron el acuerdo de la patronal y la burocracia para suspender y despedir trabajadores ¡Desconocimientos de todos los acuerdos de la burocracia sindical con la patronal y el gobierno que liquidan las conquistas obreras o despidan trabajadores! ¡Reincorporación de todos los despedidos! ¡Basta de despidos y suspensiones!
A los trabajadores no nos interesa la crisis de tal o cual patronal, sea nacional o extranjera, ¡Estatización sin pago y bajo control obrera de toda fábrica que cierre, suspenda o despida! No podemos permitir que las automotrices como la Volkswagen y la General Motor suspendan a un sólo obrero. Durante más de una década tuvieron record de producción y venta. Si la industria automotriz está en crisis, ¡Plan de reconversión de la industria automotriz al servicio de construir hospitales, escuelas, tractores y un plan de obras públicas bajo control de las organizaciones obreras!
¡Abajo los tarifazos! ¡Renacionalización de YPF y expropiación sin pago bajo control obrero de la Chevrón, PAE y todas las petroleras imperialistas! ¡Empresa estatal única de energía bajo control de los trabajadores!
El ajuste lo imponen profundizando la represión y persecución a los trabajadores. ¡Desprocesamiento de los más de 7000 luchadores obreros y populares, absolución de los petroleros de Las Heras y de los trabajadores de Tierra del Fuego! ¡Libertad a Milagro Sala!
Para derrotar el ataque de Macri, los gobernadores y los partidos patronales, todos bajo el mando de Wall Street, hay que retomar el camino de la lucha revolucionaria del 2001 y su grito “Que se vayan todos y no quede ni uno solo”. ¡Argentina será socialista o será colonia yanqui!
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