Huelga en la Escondida:
Se comienza a gestar un nuevo dique de contención para garantizar el aislamiento de la lucha
A dos semanas de iniciada la huelga de los trabajadores de planta de la mina de cobre más grande del mundo, operada por la multinacional minera BHP Billiton, junto a Rio Tinto y JECO (Mitsubishi), ésta está signada por el más absoluto hermetismo por parte de su dirección. A las puertas del yacimiento, a 3100 metros de altura, en el que acampan los huelguistas -que se encuentra a unos 200 Km de la ciudad de Antofagasta- se encuentran apostados los mineros que mantienen paralizado el 7% de la producción del cobre mundial.
Pero no sólo el aislamiento viene de la dirección del sindicato N°1 de la Mina La Escondida que dirige el FTM (Frente de Trabajadores Mineros), -que a su vez dirige gran parte de los sindicatos de planta de la minería privada en la segunda y tercera regiones de Chile- sino del conjunto de las direcciones de la izquierda y el movimiento obrero, que, salvo casos particulares, no han emitido ni siquiera una declaración al respecto.
Así, el día miércoles 23 de Febrero apareció en internet una convocatoria relámpago a una protesta en las puertas de las oficinas de BHP Billiton en Santiago para el día jueves 24 a las 11 de la mañana firmada por el Comité de Iniciativa de Unidad Sindical (CIUS), Alternativa Obrera (la colateral “obrera” del PTR), y el CTT (Comité de Trabajadores de El Teniente).
En la concentración (cuya convocatoria fue realizada a última hora y por internet) a la que no asistió ningún sector independiente, ya sea de trabajadores o estudiantes. Sólo estuvieron presentes dirigentes de las agrupaciones que convocaban, que no sumaban más de 20 personas.
Se dio inicio al evento desplegando lienzos del CIUS, un afiche de CTT/CIUS que demandaba “A igual pega, igual paga” (a igual trabajo, igual salario) y la bandera de Alternativa Obrera. Luego de unos canticos, tomó la palabra un representante del CIUS que leyó una declaración que hablaba contra la reforma laboral, por abajo el subcontrato y de apoyo a la huelga de los trabajadores de La Escondida. A continuación, tomó la palabra Edward Gallardo del PTR por Alterativa Obrera, como parte del “Frente Nelson Quichillao”, quien demandó solidaridad efectiva para los huelguistas de parte de todas las direcciones sindicales ¡Incluida la de la burocracia rompehuelgas de la CUT!, lo siguió Francisco Flores (PTR) por la vicepresidencia de la FECH, quien habló de la solidaridad del movimiento estudiantil hacía la huelga. Después tomó la palabra Yuri Sandoval del CTT, que se refirió al estado en el que se encuentra el sector contratista. La actividad no duro más de 20 minutos luego de los cuales escuetamente se disolvió.
La que si tuvo una asistencia nutrida e importante fue la prensa burguesa. Se hicieron presentes para cubrir el evento CNN, C13, Telesur, Radio Biobío, cooperativa, TVN, EFE, Reuters, el mostrador entre otros. Los que, entre fotógrafos, camarógrafos y noteros sumaban más personas que las que convocaron a la protesta.
Reasignación al PTR junto al CIUS: Montar un dique para contener posibles desbordes del sector minero contratista.
El PTR declara en su prensa digital que la Federación de Trabajadores del Cobre se alejaba de la CUT por cuestiones de “desacuerdos entre burócratas del PC y el PS” (en medio de la huelga de La Escondida y Molyb, N. de R.), Lo que no dice, es que la FTC deja la CUT, siguiendo los pasos del colegio de profesores, debido a que esta central sindical, estatizada hasta la medula y sometida por la burocracia estalinista a los pies del régimen pinochetista y sus gobiernos de turno, no representa ni al 5% de la clase obrera y ha quedado inutilizada para cumplir su función de engañar y contener a los trabajadores. Lo que realmente expresa este reacomodo del PTR, es que se da ante la necesidad de contener posibles irrupciones del sector de los mineros contratistas al calor de la huelga, el que ha recibido de parte de la patronal durante los últimos 18 meses un brutal ataque con más de 50 mil despidos, aumentos brutales en los ritmos de producción , sin ajustes salariales y bonos miserables e incrementos siderales en las tasas de “accidentes” fatales en las faenas, todo esto garantizado a punta de traiciones de la burocracia y con un saldo de un muerto en la represión criminal de los pacos.
Ante esto el PTR debería responder la pregunta: ¿Que hace con los que le hacen “paralelismo a la CUT”? La defensa de esta central sindical que tiene nutrido y probado prontuario de traiciones a la lucha de los trabajadores signado por su nula representatividad ha sido su política histórica ante el movimiento obrero chileno, más allá del cinismo con el que hable de los cordones industriales. Condenar de paralelismo a la CUT ha sido la critica que ha dirigido a todo aquel que se levantase contra la burocracia de la CUT. Por otro lado el CIUS, en la marcha en conmemoración del asesinato de Juan Pablo Jiménez, que como todos callaron la huelga de la escondida y su consigna de “igual pega igual paga”. Entonces el CIUS debería responder: ¿Que hace junto a los que hasta ayer los acusaban a ellos de “dividir a la clase obrera, haciéndole paralelismo a la CUT”? Es evidente que lo nuevo es el reacomodo de viejos aparatos burocráticos para impedir que este combativo y castigado segmento de la clase obrera, los mineros contratistas, se pongan a la cabeza del combate de los mineros de planta de la escondida, pues son la mayoría de los trabajadores de la mina.
Una consigna vacía: la solidaridad.
El PRT repite el mantra de la solidaridad. Más en este caso ¿Qué es esa solidaridad? Esta huelga es de los trabajadores de planta, es decir el segmento de trabajadores mejor pagado en la minería del cobre, la aristocracia obrera de Chile. El sindicato no reparó en gastos y montó un impresionante campamento para más de 1500 personas con todas las comodidades en las inmediaciones de la mina: comedores, baños y barracones (galpones) a 3.100 metros de altura. Afirman tener reservas para aguantar sin sobresaltos 60 días paralizados. Al respecto ¿Qué significa solidaridad? ¿Qué “teletón” puede servir a la huelga en estos días? Lo cierto es que la clave de esta huelga es el aislamiento que le impone su dirección y al que se adapta toda la izquierda. Callan que los mineros de La Escondida tienen la llave para poner fin a la reforma laboral, que es el perfeccionamiento del código del trabajo pinochetista y terminar con el subcontrato. Sus dirigentes se cuidan muy bien de mantener por fuera de ésta a los trabajadores contratistas de la minera, pues la lucha en sí misma encierra este asunto. La única solidaridad que puede servir a la huelga es la unificación de los reclamos, la unidad entre trabajadores de planta y de las contratistas y la coordinación con los demás sectores en lucha y con el conjunto de los trabajadores mineros y de esa manera avanzar en poner en pie organismos aptos para la lucha con democracia directa, que nos permitan marchar hacia la Huelga General. |
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10 de febrero de 2017
¡Viva la lucha de los mineros de La Escondida!
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