Francia - 12 de marzo de 2023
Luego de 7 jornadas de huelga y lucha en las calles quedó demostrado que…
Para impedir que se imponga la reforma jubilatoria
¡Hay que derrotar a Macron
y al régimen de la Vta República!
Ayer 11 de marzo, en la séptima jornada nacional de movilización contra la reforma jubilatoria nuevamente en distintas ciudades de Francia cientos de miles de trabajadores, jubilados, estudiantes, familias con sus hijos, mostrando una vez más su enorme espíritu de lucha y determinación, daban cuenta a un Macron inflexible que no están dispuestos a rendirse y entregar su conquista: la jubilación.
Los ferroviarios, los recolectores de basura, los obreros de la electricidad que continuaron su huelga desde el 7 hasta ahora, se movilizaron por miles, perturbaron la actividad en sus lugares de trabajo. El transporte se interrumpió este fin de semana y en las refinerías y depósitos de carburante de TotalEnergies reanudaron la huelga y los piquetes este sábado a la mañana y se podía ver las calles de Paris cubiertas de basura.
La multitud que se manifestaba se vio nuevamente reprimida por la policía antimotines que, con una nube de gases que sobrevolaba las banderas de los sindicatos, repelían la rotura de vidrieras, incendio de tachos de basura, barricadas, y toda la expresión de la ira, hartazgo y bronca de los manifestantes, sobre todo de los jóvenes combativos, que son dejados a merced de la represión por parte de los sindicatos que hacen cordones de seguridad para separarlos de las columnas de trabajadores. Al final de la jornada, la policía daba cuenta de cerca de 35 detenidos.
Si bien el Senado había aprobado el artículo que eleva la edad de retiro de 62 a 64 años la semana pasada, la noche del sábado 11, el Senado terminó finalmente votando en general el proyecto de reforma. Por lo que la semana que viene una Comisión Mixta Parlamentaria compuesta por 7 senadores y 7 diputados para acordar una versión final del proyecto de ley -pues las enmiendas no fueron votadas- y si esto ocurre la presentarían a votación a la Asamblea Nacional y al Senado el jueves 16.
Por lo que la intersindical, llamó a la octava jornada de huelga y movilización para el 15 de marzo cuando estas cámaras voten la reforma. Mientras, el secretario general de la CFDT, Berger, “implora” y llora que el gobierno no los atiende y Martinez, secretario general de la CGT, reclama que si Macron “está seguro de sí mismo, no tiene más que consultar al pueblo” y así “vera su respuesta”. ¡una vergüenza! Las masas ponen todo en las calles e incluso soportan pérdida de su salario por el descuento de los días de paro y los dirigentes de los sindicatos insisten en dialogar con el gobierno, y proponen un referéndum cuando el gobierno y la V República imperialista ya dieron suficientes muestras de que no están dispuestos a retroceder ni un ápice en su ofensiva.
La patronal francesa no da tregua ni está dispuesta a negociar nada
La clase obrera francesa ante un combate decisivo
Hay que superar a las direcciones de los sindicatos
Es que en un Maastricht en crisis, en medio de una brutal disputa interimperialista profundizada por la guerra en Ucrania, la burguesía imperialista francesa está obligada a atacar a su propia clase obrera y arrancarle todas sus conquistas.
Por eso en este ataque no hay marcha atrás. Las burocracias sindicales y los partidos social-imperialistas le hicieron creer a las masas que en el Parlamento fantoche de la V República de las transnacionales imperialistas francesas, se puede frenar semejante ataque. Entonces la burocracia de los sindicatos llevó hasta ahora las enormes fuerzas desplegadas por la clase obrera y la juventud francesa a presionar para que el Parlamento no vote la reforma. Esto equivale a pedirle al zorro que no se coma las gallinas.
Con la política de huelgas escalonadas, divididas sector por sector, terminarán desgastando y aislando a los sectores que a su pesar votan seguir la huelga. Y ya sabemos que nada conseguiremos en una mesa de negociación con el gobierno. Exactamente lo mismo hicieron en 2016 cuando nos enfrentábamos a la reforma del código de trabajo: no hubo un solo llamado al que los trabajadores no hayamos respondido, demostrando que estábamos dispuestos a defender las 35hs de trabajo semanal, los dirigentes de la intersindical llevaron estas fuerzas a luchas de presión y luego se sentaron a negociar con el gobierno de Hollande. Este no cedió en nada y nuestros dirigentes nos dijeron que “se hizo todo lo que se pudo”. ¡Mentira! Tuvimos la cabeza de Hollande en la horca y lo salvaron.
Los partidos de la llamada “extrema” izquierda de Francia como el NPA, LO, Révolution Permanente, entre otros, tienen la misma política que la burocracia de “continuar con la huelga”, “ser más numerosos en las manifestaciones” (LO), “huelgas, bloqueos, manifestaciones” (NPA), o, los que se visten más de rojo, están por una “huelga indefinida y en todas partes” (RP) pero sin organismos que la garanticen, es decir, dejándole la dirección a la burocracia.
No podemos permitir que nos lleven de nuevo a la misma trampa. Sobra voluntad de lucha. Dejen de confundir a los trabajadores: no necesitamos ni mesa de diálogo con el gobierno ni un referundum. NECESITAMOS PONERLE EL PIE EN EL PECHO A LA BURGUESÍA Y DERROTAR DE UNA VEZ EL BRUTAL ATAQUE A LA CLASE OBRERA Y SUS CONQUISTAS. Para esto hay que poner en pie los organismos de autodeterminación de la clase obrera y la juventud combativa donde la mayoría explotada de la población tendrá verdadero poder de decisión sobre su lucha. Desde las asambleas que ya existen en las fábricas e incluso las interprofesionales luego de cada manifestación, poniendo en pie comités de lucha en cada establecimiento de trabajo, de estudio y por barrio, con comités de inmigrantes y sin papeles, tomemos la continuidad de la lucha en nuestras manos.
Hay que unir a la clase obrera y a la juventud revolucionaria francesa tras los pasos del Mayo francés ¡Abajo Macron y la V República! ¡Abajo la reforma previsional! ¡Huelga General Revolucionaria!
Hay que organizar una gran lucha. Hay que unir y organizar a la amplia mayoría de los obreros y el pueblo de Francia que están siendo atacados por el 1% de parásitos de banqueros y transnacionales, que son los verdaderos dueños de la V República francesa y hoy buscan estrangular a los trabajadores. ¡Para derrotar la reforma, hay que derrotar a Macron! ¡Hay que romper con todos los partidos de la burguesía y su Parlamento fantoche! La patronal francesa dijo que no iba a negociar nada… Ahora es la clase obrera la que debe plantear y decir: ¡no negociamos nada! ¡Desconocemos la reforma! ¡Fuera Macron!
Las transnacionales y bandidos imperialistas sólo dan algo cuando ven que están a punto de perderlo todo. Y “todo” es su propiedad de los medios de producción, con la que explotan a los trabajadores y saquean al mundo.
¡QUE SE ABRA UN NUEVO MAYO FRANCES!
La clase obrera francesa tiene poderosísimos aliados: los trabajadores de Europa y del mundo semicolonial
¡Hay que unir todas las fuerzas para derrotar el ataque de los capitalistas!
Sobran fuerzas para librar este combate: la clase obrera francesa en defensa de sus conquistas, tiene un enorme aliado que es la clase obrera de la Europa de Maastricht que enfrenta los mismos ataques y se encuentra en pie de lucha. En Inglaterra, España, Portugal y Grecia se viene enfrentando el ataque a la salud, la jubilación y la educación que lanzan sus gobiernos con los estados quebrados. La burguesía del Maastricht imperialista centraliza su ataque. La clase obrera debe centralizar su respuesta en una sola lucha y comando de combate desde Portugal a las estepas rusas. Sobrepasando a las centrales sindicales que, dirigidas por el PC, dejan al proletario europeo combatiendo país por país.
Para derrotar el ataque de las burguesías imperialistas en todo el continente la primera tarea de la clase obrera europea es derrotar la guerra en Ucrania sostenida desde la OTAN que hace negocios con la sangre derramada de nuestros hermanos ucranianos. Hay que unirse a la resistencia ucraniana y echar a Putin. Que la clase obrera tome la dirección revolucionaria de la guerra, expulse al invasor y transforme la guerra en guerra civil será una derrota para la OTAN y así estaremos en mejores condiciones para parar el ataque a nuestras conquistas.
El plan de Macron es el plan del Maastricht imperialista contra los trabajadores de toda Europa, los refugiados y la clase obrera de sus colonias y semicolonias. ¡Tenemos los mismos enemigos! ¡Luchemos juntos por una Huelga General europea! ¡Trabajo y papeles para todos los refugiados! ¡Una sola clase en toda Europa, una sola lucha!
¡Hay que expropiar sin pago y bajo control obrero a las transnacionales y a los banqueros!
¡Hay que terminar con el 1% de parásitos!
¡Para que la clase obrera viva, el imperialismo debe morir!
¡Abajo el Maastricht imperialista! |