Desde hace semanas que los fascistas Al Assad y Putin lanzaron una brutal ofensiva sobre las últimas trincheras de la revolución. Los bombardeos son brutales, focalizados sobre todo en las ciudades del sudoeste de esta zona, compuesta por el sur de la provincia de Idlib y norte de la provincia de Hama. Cientos de nuevos mártires, heridos y sobre todo centenares de miles de desplazados buscando refugiarse de los bombardeos. Son cientos de miles de familias en carpas a las afueras de ciudades, incluso viviendo bajo los árboles. Es que Al Assad ha atacado un Idlib cercado no solo por su ejército y sus aliados, sino también por el imperialismo yanqui (que está ocupando todo el noreste sirio, junto a sus gurkas de las YPG, y se ha quedado con todo el petróleo sirio) y por Turquía, que mantiene sus fronteras cerradas.
Es así que los ejércitos de Assad y Putin lanzaron un ataque el viernes pasado, y lograron entrar y ocupar las ciudades de Qalaat al Mudiq, Tal Otma y Kafr Nabuda. Al hacerlo, las fuerzas turcas, que estaban en puestos de control rodeando Idlib, se replegaron y se volvieron a sus fronteras, abriendo el camino para dicho ataque, demostrando el pacto contrarrevolucionario que mantiene Erdogan con Putin y Al Assad, bajo el mando yanqui, desde las conferencias de Ginebra, Sochi y Astana.
La resistencia respondió. Se reagrupó, se puso en pie una mesa de operaciones conjunta y combate unificada en el frente sudoeste de Idlib. Habían logrado retomar las ciudades tomadas por Al Assad, pero luego este perro pudo avanzar por otros poblados como Sahel y Ghab. Miles de jóvenes se alistan para ir a pelear al frente. Toman las armas que los generales del ESL o HTS (ex Al Nusra) mantenían guardadas. Nuevamente se realizan movilizaciones en las ciudades de Idlib, con las mujeres a la cabeza, contra Al Assad y en apoyo a la resistencia en el frente, al grito de “que se abran los frentes”. En esas movilizaciones también se prendió fuego la bandera turca, denunciando a Erdogan por traidor.
Los choques militares son encarnizados, con todo tipo de armamento. Se están librando batallas decisivas de la revolución siria. Al Assad bombardea despiadadamente, hospitales, escuelas, viviendas… busca masacrar hasta el último de los explotados que “osaron” levantarse por el pan y la dignidad en 2011.
Esta masacre, como la campaña brutal de bombardeos a mansalva sobre Idlib que viene habiendo desde hace ya varios días, se da a partir de que las masas fueron sacadas de las calles. Es que estas, en septiembre de 2011, marchaban cada viernes de a cientos de miles contra el régimen, afirmando que van a defender Idlib hasta el último aliento, denunciando los pactos contrarrevolucionarios como Sochi y a quienes las querían entregar. Ellas planteaban “que se abran los frentes y se unan las brigadas” para enfrentar a Al Assad. Pero sucedió todo lo contrario. En enero pasado no solo no se abrieron los frentes contra Al Assad, sino que hubo un choque militar entre HTS y el ESL por el control de Idlib, que terminó con estas acciones de las masas, las sacaron de las calles, y terminó con HTS imponiendo su control y entrando al acuerdo de negocios sobre la base del genocidio sirio. Al Assad, viendo que estaban las masas bajo control, con su ataque no solo buscó masacrarlas sino también desplazar a este sector burgués de HTS de los negocios de manejar una provincia entera como Idlib.
Las que respondieron y presentan batalla son las masas, que volvieron a las calles y a abrir los frentes combatiendo contra Al Assad, inclusive yendo a recuperar el armamento pesado que los generales burgueses de HTS y el ESL mantenían bien escondidos y guardados.
En esta situación, todos los partidos que se dicen de izquierda y las direcciones de las organizaciones obreras a nivel internacional mantienen un escandaloso silencio cómplice de esta masacre y ataque de Al Assad. Ellos son los que apagan la luz y hacen un manto de silencio para que el asesino termine su trabajo, en este caso, que el perro Bashar culmine el genocidio sirio y de ahogar en sangre la gloriosa revolución que comenzó en 2011.
Ellos montaron un cerco a las masas sirias. Es que ellos son los que apoyaron abiertamente a Al Assad y Putin, diciendo que eran “antiimperialistas” y “antisionistas” y afirmando que en Siria no había clase obrera, sino “jihadistas” y “terroristas”.
Esto lo plantearon desde las capitales imperialistas, y se negaron a levantar el grito de “el enemigo está en casa”, encubriendo a sus propios gobiernos imperialistas y diciéndole a los trabajadores allí que los enemigos eran los “terroristas” de Siria… cuestión que llevó a que Putin y Al Assad pudieran tener las manos libres para hacer el “trabajo sucio” de todas las potencias imperialistas de masacrar a las masas, mientras los refugiados son hacinados en carpas en las fronteras, cuando no en campos de concentración en la Europa de Maastricht.
Algunos de ellos dijeron estar del lado de la revolución siria, y solo apoyaron a los generales del ESL, que bajo las órdenes de Turquía, desde el pacto contrarrevolucionario de Ginebra, solo han entregado una a una las ciudades rebeldes, como Daraa, Homs, Ghouta. Por una u otra vía, sostuvieron a la conferencia de Ginebra, desde donde se coordina los ataques a las masas sirias, como el de actual en el sur de Idlib.
Estos partidos estalinistas y renegados del trotskismo son corresponsables de que se haya llegado a esta situación, con más de 600.000 masacrados y 15 millones de refugiados. Ellos sostuvieron los ataques a las masas rebeldes.
Presentamos en estas páginas reportes y artículos publicados por nuestro periódico “La Verdad de los Oprimidos” de los socialistas de Siria y Medio Oriente, que dan cuenta de los combates actuales, de la masacre de Al Assad y Putin, y planteando un programa para que no caigan las últimas trincheras de la revolución y pasar a la contraofensiva para derrotar al perro Bashar.
Los últimos focos de la revolución siria están siendo masacrados. ¡No lo podemos permitir! ¡Ganemos las calles de las capitales imperialistas y marchemos a las embajadas sirias y rusas del mundo para parar la masacre de Al Assad y en apoyo a la resistencia siria!
¡Hay que romper el cerco a las masas sirias y a las de Gaza que luchan por recuperar su territorio y son masacradas por el sionismo!
¡Viva el levantamiento de las masas de Argelia y Sudán!
¡En todo Magreb y Medio Oriente, un mismo combate!
Abu Muad, por el Comité Redactor
de “La Verdad de los Oprimidos”
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